Estas hierbas podrían ayudarlo a combatir los virus respiratorios

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 17 de marzo del 2021.

HISTORIA EN BREVE

  • Investigadores de la Academia China de Ciencias Agrícolas y la Universidad Agrícola de Hebei en China analizaron algunas de las hierbas más efectivas para prevenir y tratar el resfriado, la gripe y quizás el COVID-19
  • El tulsi, raíz de serpiente, raíz de regaliz y el clavo son ejemplos de hierbas con propiedades expectorantes que pueden aliviar la tos y los resfriados
  • El tomillo, madreselva, andrografía y la milenrama son hierbas antivirales que pueden prevenir infecciones virales
  • La equinácea, el ajo, ginseng e isatis estimulan su sistema inmunológico para combatir las enfermedades infecciosas
  • Debido a que trabajar con hierbas puede ser complejo, si desea obtener mejores resultados, consulte a un profesional de salud natural capacitado para que lo oriente sobre las soluciones herbolarias apropiadas según sus circunstancias

Durante miles de años, las culturas indígenas han utilizado la medicina herbolaria tradicional para prevenir y tratar enfermedades que incluyen problemas respiratorios como influenza y resfriados. En la actualidad, los compuestos bioactivos de las plantas medicinales se han convertido en puntos principales de investigación para las terapias con medicamentos, pero los remedios herbolarios también son muy beneficiosos cuando se utilizan según lo previsto por la naturaleza.

En 2017, esto es lo que los investigadores escribieron en Nature Plants, “Y aunque el reino vegetal sigue siendo un complemento importante de las terapias con medicamentos, la medicina herbolaria tradicional que se desarrolló por ensayo y error en seres humanos durante miles de años contiene información biomédica invaluable que espera ser descubierta con enfoques científicos modernos”.

Ahora, con la pandemia del COVID-19, el uso de la medicina herbolaria tradicional para tratar las enfermedades respiratorias volvió a suscitar el interés de muchas personas, por lo que investigadores de la Academia China de Ciencias Agrícolas y la Universidad Agrícola de Hebei en China analizaron algunas de las hierbas más efectivas para prevenir y tratar el resfriado, la gripe, y quizás el COVID-19.

Las mejores hierbas expectorantes para combatir la gripe y el resfriado

Las hierbas expectorantes ayudan a adelgazar y aflojar la mucosidad, lo que a su vez ayuda a descongestionar. Suelen utilizarse para combatir la tos y los resfriados porque lo ayudan a respirar mejor.

Después de realizar una encuesta bibliográfica sobre las medicinas herbolarias tradicionales, en particular las de la medicina tradicional china y persa, los investigadores sugirieron que las siguientes hierbas tenían un potencial significativo como expectorantes para la gripe y el refriado:

Tulsi: también conocido como albahaca santa, es una hierba ayurvédica con propiedades antibacterianas, antivirales, antifúngicas, antiinflamatorias, analgésicas, antioxidantes y adaptógenas. Una revisión en el Journal of Ayurveda and Integrative Medicine incluso llamó al tulsi como una “hierba multiusos”, al señalar que es eficaz contra “una variedad de patógenos humanos y animales” con actividad antimicrobiana de amplio espectro. Incluso sugirieron que se podría utilizar como desinfectante de manos.El tulsi también es una de las hierbas que componen el Ayush Kwath, una fórmula herbolaria ayurvédica que recomendó el gobierno de la India para estimular el sistema inmunológico y combatir el COVID-19.“Debido a las propiedades inmunomoduladoras, antivirales, antioxidantes, antiinflamatorias, antiplaquetarias, antiateroscleróticas, hepatoprotectoras y renoprotectoras del Ayush Kwath, parece promover la inmunorregulación que ayuda a controlar infecciones virales como el COVID-19”, escribió un equipo de investigadores en el Journal of Ayurveda and Integrative Medicine.
Raíz de serpiente: los indios norteamericanos la utilizaban para tratar mordeduras de serpiente, además, la raíz de serpiente o Polygala senega, tiene propiedades expectorantes y estimulantes que ayudan a tratar problemas respiratorios.
Raíz de regaliz: la raíz de regaliz contiene liquiritina, un compuesto que demostró prevenir la reproducción del SARS-CoV-2, el virus que causa el COVID-19, en el laboratorio. Los compuestos de la raíz de regaliz también demostraron tener efectos antivirales y antiinflamatorios en el cuerpo, así como la capacidad de modular el sistema inmunológico.Un segundo compuesto en la raíz de regaliz que ha demostrado ser efectiva para combatir el SARS-CoV-1 en 2003 es la glicirricina.En China, India y Grecia, la glicirricina se utiliza para tratar la tos y las infecciones virales del tracto respiratorio y los estudios en animales sugieren que reduce la mortalidad por encefalitis herpética y neumonía por influenza A, mientras que estudios in vitro demuestran que también tiene “actividad antiviral contra el VIH- 1, coronavirus relacionado con el SARS, virus respiratorio sincitial, arbovirus, virus vaccinia y virus de la estomatitis vesicular”.
Clavo: los clavos (Syzygium aromaticum o Eugenia cariophylata) son los botones florales aromáticos que se recolectan de los árboles de hoja perenne del mismo nombre. El eugenol, un componente volátil importante del aceite esencial de clavo, produce una serie de actividades farmacológicas que incluyen propiedades antimicrobianas, antiinflamatorias, analgésicas, antioxidantes y anticancerígenas.El clavo se puede utilizar como refuerzo respiratorio al prepararlo en forma de té, para beber o inhalar su vapor. En caso de resfriado, puede agregar un par de gotas de aceite esencial de clavo a una taza de agua caliente, endulzado con miel sin procesar o stevia, si así lo desea. Beba de dos a tres vasos al día hasta experimentar mejorías. También puede utilizar aceite de clavo como aromaterapia al difundirlo en el aire.
Raíz de olmo resbaladizo: la corteza interior del olmo resbaladizo es una sustancia viscosa que, cuando se mezcla con agua, crea mucílagos, una sustancia pegajosa que se utiliza para aliviar una variedad de dolencias. Además de usarse para problemas gastrointestinales como el síndrome del intestino irritable, el olmo resbaladizo es beneficioso para la garganta y la tos, y tiene efectos calmantes en el tejido de las vías respiratorias superiores.
Raíz de malvavisco: esta hierba perenne ha sido muy conocida desde hace muchos años por tratar enfermedades respiratorias, y la investigación sugiere que, cuando se agrega a un jarabe para la tos a base de hierbas, es ideal para aliviar la tos relacionada con resfriados, bronquitis y enfermedades del tracto respiratorio que involucran la formación de moco.
Salvia: la salvia, además de tener propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias, es un expectorante natural y eficaz para despejar la mucosidad, reducir la tos, e incluso calmar el dolor de garganta. Se recomienda agregar una gota de aceite esencial de salvia a una taza de té o agua caliente la próxima vez que tenga un resfriado.

Las mejores hierbas antivirales e inmunoestimulantes

En su revisión de las mejores medicinas a base de hierbas para el resfriado y la gripe, además del COVID-19, los investigadores del estudio también destacaron las hierbas antivirales y las que estimulan el sistema inmunológico. Aunque la mayoría de las plantas medicinales tienen muchos beneficios con propiedades terapéuticas similares, las siguientes se destacaron en estas categorías. Hierbas antivirales importantes:

Tomillo: el tomillo (Thymus vulgaris) contiene compuestos potentes como timol, canfeno, linalol y carvacrol y se ha utilizado para tratar problemas respiratorios. La investigación moderna demuestra que los aceites esenciales vaporizados del tomillo, entre otros, podrían ser “muy eficaces para tratar la influenza”.Los funcionarios venezolanos también anunciaron que tuvieron resultados alentadores al tratar a pacientes con COVID-19 con Carvativir, una solución oral que está hecha de extractos de tomillo y orégano.
Flores madreselva: la madreselva (Lonicera japonica) es otra planta que se ha utilizado desde hace muchos años para tratar enfermedades respiratorias. Contiene ácido clorogénico, que de acuerdo con un estudio “inhibió el virus de la influenza durante la última etapa del ciclo infeccioso” y también redujo de forma efectiva la inflamación en los pulmones y los títulos virales durante el estudio.
Andrografía: esta hierba adaptógena y antiviral se ha utilizado en la Medicina Tradicional China y Ayurveda para tratar el resfriado común. En una revisión sistemática de 33 ensayos controlados aleatorios con 7 175 pacientes, la andrografía ayudó a aliviar los síntomas de la infección aguda del tracto respiratorio superior y redujo el tiempo de tos y dolor de garganta.En otra revisión, los académicos descubrieron “pruebas sólidas” de que la Andrografía era mejor que un placebo para reducir la frecuencia y la gravedad de la tos. También se ha estudiado una formula conocida como Kan Jang que combina la andrografía y el ginseng siberiano, y se obtuvo resultados positivos para tratar resfriados, infecciones del tracto respiratorio superior, sinusitis y gripe.
Milenrama: esta hierba perenne contiene muchos componentes con actividad farmacológica. Se ha utilizado desde hace muchos años para tratar las infecciones respiratorias, resfriados y la gripe, y a veces se combina con flor de saúco para este mismo propósito.
Menta: el aceite de menta actúa como expectorante y descongestionante, y podría ayudar a limpiar su tracto respiratorio. Aplique aceite esencial de menta en su pecho o inhale por medio de un vaporizador para ayudar a despejar la congestión nasal, aliviar la tos y los síntomas del resfriado.Para un efecto aún más terapéutico, pruebe un té elaborado con flor de saúco, milenrama, eupatoria, tilo, menta y jengibre.
Caléndula: también conocida como botón de oro, la caléndula tiene propiedades antiinflamatorias, antivirales y regenerativas que también estimulan el sistema inmunológico.

Las siguientes hierbas, además de la raíz de malvavisco y el olmo resbaladizo, también se destacaron por sus propiedades inmunoestimulantes, en especial para el resfriado y la gripe:

Equinácea: en un estudio publicado en Integrative Cancer Therapies, la equinácea demostró reducir la gravedad y la duración de los resfriados si se administra justo cuando aparecen los síntomas.
Ajo: proporciona efectos tanto estimulantes del sistema inmunológico como antivirales, y las personas que diario consumieron ajo durante tres meses tuvieron menos resfriados que las que tomaron un placebo.
Ginseng: es otra hierba adaptógena, y de hecho los adultos mayores que tomaron un extracto de ginseng americano presentaron una disminución del 48 % en su riesgo relativo y una disminución del 55 % en la duración de las enfermedades respiratorias. También se descubrió que esta hierba es “un tratamiento seguro y eficaz para disminuir el riesgo absoluto de resfriados recurrentes y la cantidad de resfriados por persona”.
Raíz de isatis: la isatis es una planta con flores que se utiliza en la medicina tradicional china y ayurveda junto con otras hierbas. Los tés y enjuagues bucales que contienen isatis, madreselva, menta y raíz de regaliz también han sido eficaces para tratar los problemas respiratorios, incluyendo la influenza.
Liquen Usnea: la usnea es un tipo de liquen que crece en árboles y rocas de todo el mundo. Contiene polisacáridos que podrían estimular la actividad del sistema inmunológico, lo que la hace ideal para tratar los resfriados y la gripe.
Mirra: la mirra es un árbol o arbusto espinoso que libera una resina de las grietas de la corteza. Esta resina se ha utilizado desde hace muchos años para tratar resfriados y tos, y además tiene propiedades antivirales e inmunomoduladoras, por esa razón los investigadores sugirieron que el enjuague bucal de mirra podría ser eficaz para combatir el COVID-19.
Jengibre: la raíz de jengibre se ha utilizado durante siglos como tónico para tratar dolencias comunes, y varios estudios han documentado los efectos antioxidantes e inmunomoduladores de esta planta herbácea perenne.

La naturaleza contiene muchos sanadores poderosos

La medicina herbal es un poderoso arsenal para prevenir y tratar enfermedades respiratorias como resfriados, gripe y COVID-19. En China, se recomienda el tratamiento a base de hierbas para niños y adultos con COVID-19, y en Estados Unidos también está creciendo el interés por los remedios tradicionales.

Las hierbas son únicas porque contienen múltiples componentes beneficiosos que promueven el bienestar. Como se señaló en el estudio presentado:

“Algunos componentes químicos importantes de las hierbas tradicionales, que se pueden considerar para combatir el COVID-19, son el ácido betulínico, cumaroiltiramina, criptotansinona, desmetoxireserpina, ácido dihomo-γ-linolénico, dihidrotansinona I, kaempferol, lignano, moupinamida, -feruloiltiramina, quercetina, sugiol y tanshinoneIIa”.

Debido a que trabajar con hierbas puede ser complejo, si desea obtener mejores resultados, consulte a un profesional de salud natural capacitado para que lo oriente sobre las soluciones herbolarias apropiadas según sus circunstancias.

Cómo mejorar la salud de los riñones

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 16 de marzo del 2021.

HISTORIA EN BREVE

  • Los riñones reducen la carga de ácido del cuerpo. A medida que progresa la insuficiencia renal, el ácido tiende a acumularse en el sistema, lo que causa daños graves
  • Una alimentación alta en ácido puede deteriorar la función renal y acelerar la progresión de la enfermedad
  • Cualquier alimentación rica en frutas y verduras, al igual que una menor cantidad de alimentos procesados y productos lácteos, será baja en ácido
  • Todo lo que ayude a mejorar la diabetes también mejorará la salud renal. Esto incluye el ayuno o restringir los periodos de consumo de alimentos y hacer ejercicio
  • Un consumo elevado de proteínas también puede dañar los riñones, a causa del amoníaco que generan. Para proteger la salud renal al consumir grandes cantidades de proteínas, se recomienda añadir una mayor cantidad de frutas y verduras para amortiguar el ácido

La Dra. Lynda Frassetto, una nefróloga y profesora emérita del departamento de medicina de la Universidad de California en San Francisco (UCSF, por sus siglas en inglés), ha compartido información importante sobre el ácido que afecta a la salud y la longevidad de los riñones. Según Frassetto:

“Cuando cursaba medicina interna, el Dr. Eli Friedman fue mi mentor en la Universidad Estatal de Nueva York (SUNY, por sus siglas en inglés) en Brooklyn. Hizo que me interesara mucho la nefrología.

Y así, después de terminar mis estudios y de ser médica internista durante un par de años, decidí regresar para estudiar nefrología, porque las personas que la estudian logran tener una mejor comprensión de la fisiología que la mayoría de los internistas.

Pensé que me ayudaría a ser un mejor médico. Después de terminar mi beca, comencé a trabajar con Anthony Sebastian en UCSF. Le interesaba estudiar la carga de ácido que proviene de la alimentación en personas relativamente sanas.

Los riñones tienen numerosas funciones. Una de ellas es eliminar el ácido. Sabemos que a medida que progresa la insuficiencia renal, los riñones comienzan a experimentar problemas para deshacerse del ácido. El cual se acumula en el sistema y tiene muchos efectos secundarios negativos.

También sabemos que los riñones tienden a no funcionar adecuadamente a causa del envejecimiento. En las personas sanas, cuyos riñones simplemente no funcionan tan bien como lo hacían anteriormente, cerca de 40 o 50 años antes, es posible que los alimentos con una concentración muy elevada de ácido tengan algún efecto secundario potencial”.

Alimentos bajos en ácido para proteger la función renal

En las etapas iniciales de su trabajo, Frassetto y Sebastian buscaban neutralizar el ácido en la alimentación utilizando bicarbonato. Luego, hace más de una década, comenzaron a buscar alimentaciones bajas en ácido.

Aunque todos los alimentos contienen precursores que pueden metabolizarse en ácidos, las frutas y verduras contienen muchos precursores alcalinos que se metabolizan en bicarbonato, como el citrato o el malato.

El interés de Frassetto por este tipo de alimentaciones comenzó con la dieta paleo, promovida por el Dr. Loren Cordain. Según Cordain, nuestros antepasados no tenían acceso a muchos de los alimentos que hoy consumimos, como los granos procesados y los azúcares.

Él consideraba que una alimentación más parecida a las alimentaciones ancestrales sería más saludable, ya que cualquier régimen rico en frutas y verduras (y sin alimentos procesados) genera menores cantidades de ácido. Como lo explicó Frassetto:

“Al observar cualquier población grande y su función renal promedio, con el tiempo la función renal de toda la población disminuye. Pero al observar individuos específicos, la función renal disminuye a un ritmo mucho más lento o incluso puede nivelarse.

El Dr. Donald Wesson, nefrólogo de la Universidad de Texas (UT) Southwestern, buscaba explicar la relación que existe entre la salud renal y los alimentos bajos en acido u otros aspectos vinculados.

Analizó los suplementos alcalinos y las alimentaciones que incluyen frutas y verduras en personas con enfermedad renal en etapa 2, con una tasa de filtración glomerular (TFG) estimada entre 60 y 90, así como en personas con la enfermedad renal crónica (ERC) en etapa 3, la cual tiene una TFG estimada de 30 a 60.

La TFG es un estimado de la función renal. Por lo tanto, si una persona tiene 50 años, su TFG es de 90. Mientras que a los 80 años el TFG es de aproximadamente 60, ya que las personas mayores desarrollaran una enfermedad renal crónica en etapa 2 o 3.

Wesson demostró que al ofrecerles suplementos alcalinos como bicarbonato de sodio, o una alimentación con grandes cantidades de frutas y verduras, era posible reducir la velocidad de progresión.

Si lo extrapolamos de personas con insuficiencia renal a personas mayores, la idea sería que es posible disminuir la tasa de progresión de la función renal, incluso si se trata d una persona saludable durante el proceso de envejecimiento. Esa es la cuestión.

Todo está relacionado con la función renal. Ya que los riñones tienen diversas funciones. Si los riñones no están funcionando de manera óptima, todo el funcionamiento del cuerpo se verá afectado”.

El ayuno protege la función renal

Según Frassetto, la mayoría de las enfermedades renales en los países occidentales son enfermedades más avanzadas a causa de la presión arterial alta y la diabetes tipo 2. Tres cuartas partes de las personas se someten a diálisis debido a la presión arterial alta y diabetes. Entonces, todo lo que ayude a mejorar la diabetes también mejorará la salud de los riñones.

El ayuno es una estrategia conocida por reducir significativamente el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, al igual que la restricción en los periodos de consumo de alimentos durante el día. Anteriormente entrevisté al Dr. Jason Fung, un nefrólogo que utiliza el ayuno para revertir la diabetes. El ejercicio es otra estrategia que reduce el riesgo de desarrollar diabetes y que protege la salud de los riñones.

Daños causados por el ácido o las proteínas

El ácido no es lo único que puede afectar la salud de los riñones. Un consumo elevado de proteínas también puede dañar los riñones, a causa del amoníaco que generan. En cuanto a que es peor para la salud de los riñones, Frassetto explica lo siguiente:

“Todas las proteínas contienen precursores ácidos. Al consumir grandes cantidades de proteínas sin tener suficiente álcali para ayudar a amortiguar o eliminar el ácido de los riñones, se considera dañino para la salud de los riñones. Pero también es necesario consumir una cierta cantidad de proteína, para no tener problemas adicionales.

Realmente se trata de un equilibrio. No es que la proteína sea dañina, sino que es necesario consumir mucho álcali para poder consumir grandes cantidades de proteínas. Ya que esto ayudará a no utilizar los sistemas corporales para neutralizar o amortiguar el ácido en el sistema. Lo ideal es mantener el pH de la sangre dentro del rango normal.

Para lograrlo, es necesario transferir el ácido a las células, descomponer los músculos y suministrar glutamina a los riñones, para de esta forma excretar el ácido como amonio. También se descomponen los huesos en hidroxiapatita de calcio, el cual es el álcali.

O bien, es necesario disminuir la producción de ácidos endógenos para mantener el pH sanguíneo. El cuerpo tiene numerosas maneras de lidiar con los ácidos que el riñón tiene que eliminar.

Entonces, al ofrecer cantidades suficientes de álcali exógeno, como bicarbonato o frutas y verduras, no existe la necesidad de descomponer los huesos y los músculos para neutralizar el ácido en el cuerpo.

Los iones de hidrógeno se equilibran a un nivel de 10-9, que es un nivel bajo de iones de hidrógeno libres en el cuerpo. Mientras que los cambios que se pueden lograr sin exceder el rango normal no son muy grandes.

Solo existen un par de aspectos que se pueden hacer en este caso. Ya sea que le proporcione álcali exógeno al cuerpo o que descomponga sus sistemas corporales”.

Las personas con enfermedad renal avanzada generalmente obtienen álcali exógeno, en una combinación de bicarbonato de sodio y citrato de sodio, ya que se ha demostrado que esto detiene la progresión de la enfermedad y retrasa la necesidad de diálisis. El citrato de sodio también reduce el riesgo de cálculos renales.

No se recomienda utilizar bicarbonato de potasio cuando existe una enfermedad renal. Esto es porque el potasio puede acumularse a niveles letales cuando existe una insuficiencia renal. También es importante controlar la presión arterial y la diabetes al tener una enfermedad renal, así como controlar la proteinuria (daño a la barrera glomerular).

Beneficios del klotho para la función renal

La proteína klotho es útil para eliminar el fosfato del cuerpo, el cual es otro ácido que los riñones deben eliminar. Resulta curioso que los animales transgénicos, que han sido modificados genéticamente para sobreexpresar el gen klotho, también aumentan su longevidad entre un 10 % y 40 %.

El klotho es un transportador de membrana y una proteína soluble. Al consumir una alimentación alta en fosfato, el cuerpo libera el factor de crecimiento de fibroblastos 23 (FGF23), el cual se adhiere al klotho como cofactor y se transfiere a los riñones para eliminar los transportadores y permitir que los riñones reabsorban el fosfato. Esto ayuda a mantener un equilibrio normal de fosfato.

Sin embargo, el cuerpo necesita mayores cantidades de FGF23 para deshacerse del fosfato durante el envejecimiento. El FGF23 también previene la 1-alfa hidroxilasa, la cual es una enzima necesaria para activar la vitamina D y que también es esencial para producir klotho.

Entonces, a medida que envejece y continúa consumiendo alimentos altos en fosfato (lo cual es sencillo ya que el fosfato se encuentra en la mayoría de los alimentos), los niveles de FGF23 aumentan mientras que los niveles de vitamina D y klotho disminuyen. Como resultado, los riñones comienzan a reabsorber mayores cantidades de fosfato, lo que genera daños adicionales.

Por consiguiente, no se trata únicamente de una alimentación baja en ácido, sino que también deber ser relativamente baja en fosfato. ¿Cuáles son los alimentos altos en fosfato? Frassetto explica lo siguiente:

“Primero, los productos lácteos. Todos los productos lácteos contienen cuatro cosas: calcio, fósforo, proteínas y grasas, por lo que las personas con insuficiencia renal tienen que detener su consumo.

Segundo, las bebidas de cola o los refrescos. Estos contienen ácido fosfatídico. Se busca que las personas no consuman bebidas que contengan ácido fosfatídico. Y luego podemos encontrar el chocolate y las nueces. Las personas con insuficiencia renal avanzada necesitan evitarlos. Los frijoles son otra fuente de fosfato”.

Cómo evaluar la función renal

Para saber qué tan bien están funcionando sus riñones, es necesario comenzar con un panel renal. Este ofrece una lectura de sus niveles de nitrógeno ureico en la sangre y de creatinina sérica. Es posible calcular el TFG en función del género, la edad, la raza y el nivel de creatinina sérica. Según los resultados del panel renal, es posible que deba realizar otras pruebas.

“Existen dos factores que observamos en términos de la salud del riñón”, explica Frassetto. “Uno es el número estimado de TFG. Y el otro es establecer la existencia de alguna proteína en la orina, ya que pueden representar dos problemas diferentes. La proteína en la orina, es mala para la función renal.

Esto se descubrió hace muchos años por el Dr. Barry Brenner, quien realizó de cinco a seis nefrectomías en ratas y demostró que los restos del riñón, también conocidos como remanentes de nefronas, tenían que hiperfiltrarse para poder limpiar toda la sangre.

Dicha hiperfiltración a través de la membrana glomerular era perjudicial para la membrana, por lo que la membrana comenzó a perder proteínas.

Entonces, ahora sabemos que existen una serie de problemas renales en los que la membrana pierde proteínas. Lo cual causa más daños en los riñones.

Si tuviera que hacer sólo dos cosas para descubrir que tan saludable está, la primera sería un análisis de sangre para determinar el estado del funcionamiento de sus riñones. La segunda sería un análisis de orina. Esas son las dos pruebas que suelen realizarse durante una visita de atención primaria”.

Estrés por el ácido

Aunque la mayoría de las personas conocen el estrés oxidativo, el estrés causado por el ácido es otro tipo de estrés que puede afectar significativamente la salud. Frassetto considera que ambos son importantes, especialmente en lo que respecta a la enfermedad renal. El estrés causado por el ácido también es importante en el envejecimiento.

“La Dra. Elissa Epel es una amiga muy querida que ha analizado la relación entre la longitud de los telómeros, la actividad de la telomerasa y el estrés oxidativo. Ella ha demostrado que las personas con mucho estrés tienen telómeros más cortos y una función anormal de la telomerasa.

Tienen mayores niveles de estrés oxidativo. De hecho, he investigado más el estrés causado por el ácido, pero considero que es una combinación de ambos”, explica Frassetto. “Entonces, lo ideal sería reducir la cantidad de estrés oxidativo y de estrés causado por el ácido para limitar el daño al cuerpo”.

Información adicional

En resumen, una alimentación baja en ácido es básicamente alta en frutas y verduras, con una cantidad moderada de proteínas. Cuantas más proteínas consuma, más frutas y verduras necesitara con el fin de mantener un equilibrio saludable. Una dieta baja en ácido también es baja en productos lácteos.

Cuando la mayoría de las personas consultan a un nefrólogo, es porque han perdido las tres cuartas partes de su función renal. Para marcar una diferencia es necesario considerar la función de los riñones desde el principio. Se recomienda realizarse un análisis de nitrógeno ureico en la sangre (BUN, por sus siglas en inglés) y de creatinina, para resolver cualquier problema que se pueda presentar.

Aunque el proceso de trasplante de riñón ha mejorado mucho en los últimos años, el número de donantes es limitado, por lo que ha aumentado el número de pacientes en diálisis.

Como señaló Frassetto, la diálisis es extremadamente costosa y apenas lo mantiene con vida. Además, aunque el seguro de Medicare en los Estados Unidos cubre el costo por tratar la enfermedad renal en etapa terminal, únicamente cubre la diálisis. Y no cubre todos los medicamentos necesarios.

Recuerde que es difícil depender de las terapias terminales. Es mejor prevenir el problema en primer lugar. La importancia del ácido dietético es un descubrimiento bastante reciente que no se conoce ampliamente, pero que puede marcar una gran diferencia en la salud renal.

Evitar los alimentos con un alto contenido de fosfato podría mejorar y mantener la función renal durante el envejecimiento. Cronometer, es un rastreador de nutrición en línea, el cual rastrea la cantidad de fósforo que contiene su alimentación.

El glutatión y la NAC desempeñan un papel importante en la salud y el ejercicio

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 11 de marzo del 2021.

HISTORIA EN BREVE

  • El azufre es el tercer mineral más abundante en su cuerpo. Los aminoácidos que contienen azufre aumentan sus niveles de glutatión y N-acetilcisteína (NAC), que desempeñan un papel importante en la salud y el estado físico
  • El metabolismo del glutatión influye en el control de los mecanismos epigenéticos a varios niveles, incluida la disponibilidad del sustrato, la actividad enzimática para la metilación del ADN y la expresión de microARN
  • La suplementación con NAC puede ser útil para la prevención de problemas cardiovasculares en personas mayores, ya que reduce el estrés oxidativo y mejora la función mitocondrial
  • La deficiencia de glutatión puede inducir cambios epigenéticos en los genes que regulan el metabolismo de la vitamina D en el hígado; una investigación sugiere que la suplementación con glutatión podría ayudar a reducir el riesgo de deficiencia de vitamina D en personas con obesidad
  • El glutatión y la NAC también reduce el estrés provocado por el ejercicio y reducen la fatiga muscular. El glutatión también puede desempeñar un papel principal en el síndrome de fatiga crónica

Como explico en mi artículo “Beneficios del MSM: un poderoso proveedor de azufre“, el azufre es el tercer mineral más abundante en su cuerpo y desempeña un papel importante en una variedad de procesos corporales, incluidos el metabolismo, la desintoxicación y el control de la forma y estructura de proteínas y enzimas.

Los aminoácidos que contienen azufre aumentan sus niveles de glutatión y N-acetilcisteína (NAC), además estos dos desempeñan un papel importante en la salud y el estado físico.

Conceptos básicos del glutatión

El glutatión se compone por tres aminoácidos: cisteína, glutamato y glicina. Se le conoce como “el antioxidante maestro”, ya que es el antioxidante más poderoso de su cuerpo y se encuentra dentro de cada una de sus células.

Los antioxidantes combaten los radicales libres, que son las partículas altamente reactivas que se encuentran alrededor de la célula y que dañan todo lo que tocan. Estos radicales libres ocurren durante el proceso del metabolismo, pero también pueden surgir durante el ejercicio o por la exposición a toxinas, irradiación y metales tóxicos.

Debido a que los radicales libres son muy destructivos, las células tienen una red de defensas diseñadas para neutralizarlas. Esta red antioxidante se compone de numerosos componentes que incluyen vitaminas, minerales y químicos especiales llamados tioles (glutatión y ácido alfa lipoico).

El glutatión se diferencia de otros antioxidantes gracias a que es intracelular y tiene la habilidad única de maximizar la actividad de todos los demás antioxidantes, incluyendo (entre otros) a las vitaminas C y E, al CoQ10 y al ácido alfa lipoico. También elimina las toxinas de sus células y lo protege de los efectos dañinos de la radiación, los productos químicos y los contaminantes ambientales.

Conceptos básicos de la NAC

La NAC es un precursor y un nutriente limitante para la formación de glutatión. El glutatión tiene mala absorción, por lo que, en muchos casos, es más fácil aumentar los niveles de glutatión al consumir NAC.

En medicina de emergencia, la NAC se usa como antídoto para la toxicidad del acetaminofén resultante de una sobredosis. Prácticamente, se ha podido eliminar la mortalidad causada por la toxicidad del paracetamol cuando se administra NAC con rapidez.

Se cree que el daño hepático que causa el acetaminofén se debe en gran medida al agotamiento de los niveles de glutatión, el cual es un antioxidante secretado por el hígado como respuesta a la exposición tóxica.

Adicionalmente, la suplementación con NAC puede ayudar a hacer un “pre-tox” de su cuerpo cuando se consume antes del alcohol, lo que minimiza el daño relacionado con el consumo de alcohol, un dato que puede ser útil para las celebraciones de Año Nuevo.

Tomar NAC (al menos 200 miligramos) 30 minutos antes de consumir bebidas alcohólicas, puede ayudar a disminuir los efectos tóxicos del alcohol. La vitamina B6 también puede ayudar a disminuir los síntomas de la resaca.

Aunque la NAC es comúnmente utilizada para el apoyo del hígado, también ha demostrado beneficios prometedores como un neuroprotector. Los científicos investigan su uso como un tratamiento para la enfermedad de Parkinson, la cual se ha relacionado con la deficiencia de glutatión en la sustancia negra, una región que alberga neuronas de dopamina.

La investigación que analiza cerebros autopsiados sugiere que los pacientes con Parkinson tienen niveles apenas detectables de glutatión en esta región del cerebro. Estudios posteriores encontraron que la deficiencia de glutatión en la sustancia negra también es común en otras afecciones neurodegenerativas, incluida la enfermedad de Alzheimer.

Otra área donde la NAC demuestra una promesa particular es en el tratamiento de los trastornos de salud mental, incluido el trastorno de estrés postraumático, la depresión y los trastornos por uso de sustancias. Se analizan docenas de beneficios de salud adicionales en un artículo de SelfHacked del 29 de noviembre de 2019.

La NAC mejora la función cardiovascular y mitocondrial

Según un estudio realizado en el año 2018, la suplementación con NAC puede ser útil para la prevención de problemas cardiovasculares en personas mayores. Como era de esperarse, el estrés oxidativo con el tiempo puede inducir cambios metabólicos y funcionales que aceleran el envejecimiento y la disfunción cardiovascular. Además, sus niveles de glutatión disminuyen con la edad, lo que lo pone en un riesgo mayor.

En este estudio, los ratones adultos recibieron NAC o una combinación de NAC y glicina. Después de siete semanas, se evaluó su función cardíaca y se descubrió que aquellos que recibieron NAC más glicina mejoraron varios parámetros de su función cardiovascular, que incluyen:

  • Función diastólica mejorada
  • Menor tiempo de relajación
  • Menor volumen auricular izquierdo
  • Menor presión diastólica final del ventrículo izquierdo

La NAC no fue la única responsable de agregar estos beneficios cardiovasculares. La combinación de NAC y glicina también mejoró la función mitocondrial y los genes mitocondriales regulados ascendentemente en el corazón, los cuales normalmente se regulan negativamente con la edad.

Según los autores, “Nuestros datos indican que la suplementación con NAC + Gly puede mejorar la función diastólica en el ratón adulto y puede tener el potencial de prevenir morbilidades importantes para las personas mayores”.

La deficiencia de glutatión reduce los niveles de vitamina D en personas con obesidad

Otra investigación reciente publicada en Scientific Reports demuestra que la deficiencia de glutatión puede inducir cambios epigenéticos en los genes que regulan el metabolismo de la vitamina D en el hígado. Señalan los autores que: la evidencia emergente también sugiere que el metabolismo del glutatión desempeña un papel en la regulación epigenética de las reacciones de reducción-oxidación (redox).

Según este documento, la obesidad se ha correlacionado con bajos niveles de glutatión y 25-hidroxivitamina D3, especialmente en las personas con diabetes tipo 2 y en las personas con obesidad. Cuando alimentaron a los ratones obesos con una alimentación deficiente en glutatión, disminuyeron los genes del metabolismo de la vitamina D en los receptores del hígado. Como resultado, aumentó el estrés oxidativo.

Según los autores, sus hallazgos sugieren que la suplementación con glutatión podría ayudar a reducir el riesgo de deficiencia de vitamina D en personas con obesidad.

También se ha demostrado que la suplementación con L-cisteína, un precursor limitante de la velocidad del glutatión, aumenta los niveles de vitamina D y reduce el estrés oxidativo, señala el documento, que respalda la relación entre el glutatión y la vitamina D.

El glutatión y la NAC mejoran el estrés inducido por el ejercicio

Como se mencionó anteriormente, el ejercicio es una de las formas en la que aumenta la producción de radicales libres y, con ello, el estrés oxidativo. Este estrés oxidativo es lo que hace que el ejercicio sea tan beneficioso, siempre y cuando descanse lo suficiente entre los entrenamientos.

Dicho esto, como se señaló en un artículo del año 2005, “Regular de manera efectiva el equilibrio celular entre la oxidación y la antioxidación es importante cuando se considera la función celular y la integridad del ADN, así como la transducción de señales de la expresión génica”. En otras palabras, el ejercicio excesivo puede causar más daño que beneficio. Según los autores:

“Los amantes del ejercicio y los investigadores se han interesado en los últimos años en identificar cualquier medio que ayude a minimizar los efectos perjudiciales del estrés oxidativo que se relacionan con el ejercicio intenso y poco habitual. Es posible que al disminuir la cantidad de estrés oxidativo a la que está expuesta una célula pueda aumentar la salud y el rendimiento …

Para proteger contra los efectos nocivos de las ROS [especies reactivas de oxígeno], nuestros cuerpos tienen un complejo sistema de protección antioxidante endógeno en forma de enzimas como la superóxido dismutasa, la catalasa y el glutatión peroxidasa.

En condiciones normales de reposo, se eliminan las especies reactivas de oxígeno de la célula evitando así cualquier daño posterior.

Sin embargo, en condiciones más extremas, tales como: 1) consumo inadecuado de alimentos que contienen antioxidantes, 2) consumo excesivo de prooxidantes, 3) exposición a productos químicos nocivos o luz ultravioleta, 4) lesiones/heridas o 5) el ejercicio intenso, especialmente el ejercicio excéntrico, el sistema antioxidante endógeno del cuerpo no puede eliminar eficazmente la producción excesiva de ROS.

En situaciones como las mencionadas anteriormente en las que la producción de moléculas prooxidantes aumenta hasta un punto en el que el sistema antioxidante no puede eliminarlas de manera efectiva, es cuando ocurre el estrés oxidativo.

El estrés oxidativo se ha relacionado con una serie de enfermedades que incluyen aterosclerosis, fibrosis pulmonar, cáncer, enfermedad de Parkinson, esclerosis múltiple y envejecimiento.

La investigación sobre el estrés oxidativo durante el ejercicio indicó que el entrenamiento regular mejora la capacidad de estos mecanismos para responder de forma eficaz al aumento del producto oxidativo”.

El ejercicio aumenta su nivel de glutatión

El artículo del año 2005 también explica cómo el ejercicio afecta su nivel de glutatión y, por lo tanto, su salud, estado físico y el riesgo de padecer alguna enfermedad.

En resumen, cuando realiza ejercicio intenso su nivel de glutatión en la sangre disminuye de forma significativa, mientras que aumentan los niveles circulantes de glutatión oxidado, lo que indica que se ha utilizado dentro del músculo para extinguir los radicales libres producidos durante el esfuerzo.

Ya que se tiene en cuenta la importancia del glutatión para contrarrestar los radicales libres, una preocupación importante es la regulación efectiva de los niveles de glutatión al hacer ejercicio. La buena noticia es que cuanto más ejercicio haga, mayores serán sus niveles básicos de glutatión.

Esta adaptación le permite a su cuerpo lidiar de forma efectiva con el aumento de radicales libres que produce el ejercicio. Aunque el ejercicio en sí aumentará su nivel de glutatión con el tiempo, una estrategia que utilizan los atletas es aumentar el glutatión a través de la suplementación.

Como se mencionó, la suplementación con glutatión es ineficaz debido a su mala absorción, por lo que NAC se considera una opción mucho mejor. Otros estudios también confirmaron que la suplementación con NAC ayuda a retrasar la fatiga muscular durante el ejercicio y así mejora la resistencia. En un estudio, la infusión de NAC aumentó el tiempo de agotamiento en un 26.3%.

La capacidad de NAC para reducir la fatiga y mejorar el redox celular (reducción de la oxidación) también insinúa su beneficio potencial para quienes padecen el síndrome de fatiga crónica (CFS, por sus siglas en inglés).

La teoría del agotamiento de glutatión en el síndrome CFS

Según lo explicado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, el CFS, también conocido como encefalomielitis mialgica o ME, se caracteriza por “una fatiga abrumadora que no mejora con el descanso”. Esta fatiga con frecuencia desafía su capacidad para realizar las tareas más comunes de la vida diaria, como ducharse o preparar la comida.

El papel del glutatión en esta condición se aborda en el documento titulado “Una explicación simple de la teoría del agotamiento del glutatión/metilación de ME/CFS”, realizado por el Dr. Rich Van Konynenburg, creador del protocolo de metilación utilizado por muchos en la comunidad CFS.

Según Van Konynenburg, el estrés oxidativo “es probablemente el aspecto bioquímico mejor probado del síndrome de fatiga crónica”, y para que su estrés oxidativo abrume su sistema, algo debe demandar demasiado suministro de glutatión.

Ya se mencionaron varios ejemplos, como un consumo inadecuado de antioxidantes o prooxidantes inadecuados, exposiciones tóxicas y lesiones físicas. El estrés emocional a largo plazo también puede ser un factor. Como se señaló en el artículo de Van Konynenburg:

“Todas las personas experimentan una variedad de factores estresantes todo el tiempo, y el cuerpo de una persona sana puede mantenerse al día con las demandas de glutatión al reciclar las moléculas de glutatión usadas y al producir otras nuevas según sea necesario.

Sin embargo, si el cuerpo de una persona no puede seguir el ritmo, ya sea por demandas muy altas o polimorfismos genéticos heredados que interfieren con el reciclaje o con la producción de glutatión, o ambos, los niveles de glutatión en las células podrían desplomarse …

Uno de los trabajos que el glutatión hace es proteger su suministro de vitamina B12 para que no reaccione con las toxinas … Cuando su nivel de glutatión es demasiado bajo, su B12 está expuesto y vulnerable, y es atacado por toxinas.

Además, cuando no hay suficiente glutatión para eliminar los niveles de toxinas que aumentan en el cuerpo, hay dos cosas que funcionan juntas para sabotear su vitamina B12 cuando el glutatión baja demasiado”.

La conexión entre la vitamina B12 y el glutatión

La vitamina B12 ayuda a convertir los alimentos en glucosa para obtener energía, por lo que la fatiga es uno de los síntomas de niveles bajos de B12. Curiosamente, muchas personas con CFS tienen niveles elevados de B12. Sus cuerpos simplemente no pueden usarla de forma adecuada, y un posible culpable es un bajo nivel de glutatión.

“La mejor forma de descubrir esto es por medio de una prueba de ácidos orgánicos en la orina que incluye ácido metilmalónico. Será alto si la B12 se desvía, y esto se ve en personas con CFS”, afirma Van Konynenburg, y agrega:

“El trabajo más importante que tiene la B12 en el cuerpo es formar metilcobalamina, que es una de las dos formas activas de B12. La enzima metionina sintasa necesita esta forma para hacer su trabajo. Una enzima es una sustancia que cataliza o estimula una cierta reacción bioquímica.

Cuando no hay suficiente metilcobalamina, la metionina sintasa tiene que retrasar su reacción. Su reacción se encuentra en la unión del ciclo de metilación y el ciclo del folato, por lo que cuando esta reacción se ralentiza afecta a ambos ciclos…

El ciclo de metilación tiene trabajos importantes que debe hacer. Primero, actúa como una pequeña fábrica para suministrar grupos de metilo (CH3) a una gran cantidad de reacciones en el cuerpo. Algunas de estas reacciones producen cosas como la creatina, carnitina, coenzima Q10, fosfatidilcolina, melatonina y muchas otras sustancias importantes para el cuerpo.

No es una coincidencia que estas sustancias sean bajas en CFS… No producen suficientes debido al bloqueo parcial en el ciclo de metilación.

El ciclo de metilación también suministra grupos de metilo para que se unan a las moléculas de ADN, y esto ayuda a determinar si la estructura del ADN se utilizará para producir ciertas proteínas de acuerdo con sus patrones.

La ‘lectura’ del ADN se conoce como ‘expresión génica’. Los grupos metilo evitan o ‘silencian’ la expresión génica. Se ha observado una sobreexpresión de genes en pacientes con CFS, y sospecho que se debe al menos en parte a la falta de metilación para silenciar la expresión génica”.

El mecanismo bioquímico básico del CFS

El ciclo de metilación también regula el uso de azufre en el cuerpo y la producción de sustancias que contienen azufre, incluido el glutatión. Los pacientes con CFS tienen niveles anormales de metabolitos de azufre. Una vez que comprenda la interconexión del glutatión, la vitamina B12 y el ciclo de metilación, es más fácil ver cómo surge el CFS crónico. Como lo explicó Van Konynenburg:

“Cuando el glutatión disminuye demasiado, el efecto sobre la vitamina B12 ralentiza el ciclo de metilación. Los metabolitos de azufre se vierten en la vía de transulfuración (que está conectada al ciclo de metilación), se oxidan para formar cistina, pasan a través del sulfuro de hidrógeno, y finalmente se convierten en tiosulfato y sulfato y se excretan en la orina.

Esto reduce la producción de glutatión, que requiere cisteína en lugar de cistina, y ahora hay un círculo vicioso que preserva este mal funcionamiento y lo mantiene enfermo. Ese es el mecanismo bioquímico básico del CFS, todo lo demás fluye de esto.

Así es como creo que ocurre la fatiga: las células tienen pequeñas centrales eléctricas llamadas mitocondrias. Su trabajo es utilizar los alimentos como combustible para producir ATP (trifosfato de adenosina). El ATP actúa como una fuente de energía para generar una gran cantidad de reacciones en las células.

Por ejemplo, impulsa la contracción de las fibras musculares y proporciona la energía para enviar impulsos nerviosos. También suministra la energía para producir ácido estomacal y enzimas digestivas para digerir nuestros alimentos y muchas otras cosas.

Cuando el glutatión baja demasiado en las células musculares, incrementan los niveles de radicales libres oxidantes, y estos reaccionan con partes de la “maquina” en las pequeñas centrales eléctricas, de esta manera se reduce su producción de ATP.

Entonces, las células musculares experimentan una crisis energética y eso es lo que causa la fatiga. Con el tiempo, debido a la falta de glutatión, se acumulan más problemas en las mitocondrias, incluidas las toxinas, el ADN viral y los desequilibrios minerales”.

Todos estos factores finalmente diezmarán su función inmunológica y permitirán que las bacterias, virus y hongos patógenos asuman el control. Los pacientes con CFS tendrán varias infecciones al mismo tiempo. El bajo nivel de glutatión también impide las vías naturales de desintoxicación de su cuerpo y permite que la toxicidad se acumule con el tiempo con una disfunción cada vez mayor.

La respuesta para el síndrome CFS

Entonces, ¿cómo cambia estos eventos? Como se señaló en el artículo de Van Konynenburg:

“La clave principal para cambiar este proceso es ayudar a que la enzima metionina sintasa funcione de forma más normal, de modo que se levante el bloqueo parcial en el ciclo de metilación, el ciclo del folato y que el glutatión vuelva a la normalidad.

Para eso está diseñado el enfoque de tratamiento simplificado y, hasta ahora, la evidencia es que provoca estas cosas en la mayoría de las personas que tienen CFS.

Recomiendo que las personas con CFS tengan el panel de vías de metilación de diagnóstico de vitamina para averiguar si realmente tienen un bloqueo parcial del ciclo de metilación y el agotamiento del glutatión antes de decidir si es necesario probar este tratamiento con sus médicos.

Esto también proporciona una base para juzgar el progreso más adelante y repetir el tratamiento cada ciertos meses. Los síntomas no son una buena guía para juzgar el progreso durante el tratamiento, porque la desintoxicación puede empeorar los síntomas, mientras que en realidad son justo lo que se necesita para la recuperación”.

Se puede encontrar un resumen del plan de tratamiento de metilación simplificado de Van Konynenburg para el CFS en HealthRising.org. El punto clave de este tratamiento es el uso de suplementos específicos, que incluyen folato, B12, un multivitamínico, SAMe y fosfatidil serina.

En su protocolo explica la teoría detrás del uso de cada uno de estos suplementos, la forma en la que impactan el ciclo de metilación y sus interacciones con otros suplementos.

Mi recomendación es que los suplementos de glutatión y NAC no siempre son el camino ideal. Las personas con CFS pueden estar mejor respaldadas por una evaluación personalizada realizada por un médico experimentado que también puede incluir metil folato y metil vitamina B12.

Pautas generales de dosificación y seguridad para la NAC

Sin embargo, para muchos otros, la NAC se puede usar de manera segura para aumentar los niveles de glutatión. Para obtener más información sobre cómo NAC puede beneficiar su salud, consulte mi artículo “Los muchos beneficios de la NAC“.

La NAC está disponible como un suplemento oral y es muy económico. Por desgracia, al igual que el glutatión, la NAC tiene mala absorción cuando se consume por vía oral, aunque es mejor que el glutatión.

Según algunos estudios, la biodisponibilidad oral de NAC puede variar entre el 4 % y el 10 %, por lo que la dosis recomendada puede llegar hasta los 1800 miligramos (mg) por día. Su vida media es de alrededor de dos horas, por lo que la mayoría de los sujetos del estudio lo consumen dos o tres veces al día.

No se ha determinado una dosis máxima segura, pero como regla general, se tolera bien, aunque algunos experimentan efectos secundarios gastrointestinales como náuseas, diarrea o estreñimiento. Si esto ocurre, reduzca su dosis. Para reducir la probabilidad de efectos gastrointestinales es mejor combinarlo con alimentos.

También tenga en cuenta que debido a que la NAC aumenta el glutatión, el cual es un poderoso agente de desintoxicación, puede experimentar síntomas debilitantes de desintoxicación si comienza con una dosis demasiado alta. Para evitar esto, comience con poco, digamos de 400 a 600 mg una vez al día, y aumente poco a poco.

Además, si toma un antidepresivo o está bajo tratamiento contra el cáncer, asegúrese de hablar sobre el uso de NAC con su médico, ya que puede tener una reacción con algunos antidepresivos y quimioterapia.

Las bayas de espino podrían beneficiar la salud cardíaca, hepática y cutánea

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 11 de marzo del 2021.

HISTORIA EN BREVE

  • Las bayas de espino se han utilizado como refuerzo cardíaco desde el año 659 d.C. Las investigaciones demuestran que su extracto produce efectos anti-ateroscleróticos y tiene propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y de protección endotelial
  • Durante años, las bayas se han utilizado para tratar los problemas digestivos. En estudios con animales, han reducido los efectos de la enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA) y mejorado la función hepática
  • Las propiedades antienvejecimiento y fotoprotectoras podrían relacionarse con su alto contenido de polifenoles. El extracto de espino también ha demostrado promover la densidad, rugosidad y elasticidad de la piel
  • Es originaria de Norteamérica, crece de forma silvestre y se puede cultivar como planta ornamental. Aunque la mayor parte de la planta es comestible, las semillas producen cianuro de hidrógeno que puede ser toxico para los intestinos

Las bayas de espino (género Crataegus) son ricas en flavonoides que ayudan a revertir los efectos de las enfermedades cardiovasculares, mejorar la apariencia de la piel y estimular la digestión y el metabolismo del hígado.

Casi 6 de cada 10 adultos que viven en los Estados Unidos tienen al menos una enfermedad crónica y 4 de cada 10 tienen dos o más, que son las principales causas de muerte y discapacidad. Su estilo de vida no solo influye en su salud en general, sino también en su riesgo de muchas enfermedades crónicas. Así que es bueno implementar algunos cambios, en algunos casos dejar de hacer y en otros empezar a hacer.

De acuerdo con la Asociación Americana del Corazón, casi el 50 % de todos los adultos que viven en los Estados Unidos padecen alguna enfermedad cardiovascular. Este término general incluye varios problemas de salud, que incluyen enfermedades cardíacas, aterosclerosis, derrame cerebral, insuficiencia cardíaca, presión arterial alta y arritmias cardíacas.

Las enfermedades cardiovasculares afectan el corazón y los tejidos de apoyo que transportan sangre, oxígeno y nutrientes a todo el cuerpo. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la enfermedad cardíaca es la principal causa de mortalidad en el país y el derrame cerebral ocupa el lugar número 5, mientras que la aterosclerosis es un factor determinante en las enfermedades cardiovasculares.

Sin embargo, hay algunas estrategias que pueden ayudarlo a optimizar su salud, incluso si ya tiene una enfermedad crónica. Y consumir bayas de espino o su extracto es una de ellas.

Las bayas de espino fortalecen su corazón

En China, el uso medicinal de las bayas de espino se remonta al año 659 d.C. A principios del siglo XIX, los médicos estadounidenses la utilizaban para tratar problemas cardíacos como presión arterial alta, insuficiencia cardíaca y aterosclerosis.

Los estudios de investigación modernos descubrieron que el extracto de baya de espino produce efectos anti-ateroscleróticos que podría atribuirse a las vías de señalización que afectan la inflamación y la apoptosis. Los científicos descubrieron que las bayas de espino influyen en el sistema cardiovascular a través de cuatro vías principales. Que incluyen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, de protección endotelial y reductoras de lípidos.

Una revisión de la literatura encontró que las flavonas en el espino tienen capacidad de reducir el deterioro endotelial después de una cirugía de baipás coronaria con injerto. El extracto de espino también demostró tener la capacidad de mantener la función endotelial normal en el laboratorio e in vivo.

El extracto ayuda a reducir la retención de lípidos y la formación de placa vascular. Esto activa un proceso que reduce la producción de citoquinas inflamatorias y especies reactivas de oxígeno (ROS) que, a su vez, ayuda a mantener la función normal y proteger el sistema vascular de la infiltración de macrófagos y monocitos circulantes, lo que reduce aún más la inflamación.

Varios ensayos en humanos demostraron que los participantes que tomaron extracto de espino aumentaron su capacidad de trabajo y redujeron los síntomas de insuficiencia cardíaca congestiva. En un estudio de 952 pacientes con insuficiencia cardíaca documentada, los investigadores descubrieron que aquellos que recibieron espino durante dos años como terapia complementaria, mostraron una reducción significativa en los síntomas de insuficiencia cardíaca congestiva: fatiga, disnea y palpitaciones.

La protección vascular también incluye la capacidad de promover la actividad de señalización del calcio en el corazón y los vasos sanguíneos. Varios estudios en animales demuestran que el espino actúa como vasodilatador, incluso aumenta los niveles de óxido nítrico.

En un estudio de 16 semanas de duración que incluyó personas con diabetes tipo 2 e hipertensión arterial, los participantes tomaron 1200 miligramos (mg) de extracto de espino al día o un placebo. Las personas que tomaron el extracto demostraron más mejoras en la presión arterial que el grupo de placebo. Los investigadores informaron que no hubo interacciones con los medicamentos que los pacientes ya estaban tomando y los participantes de ambos grupos solo reportaron molestias leves.

Las bayas de espino tienen beneficios hepáticos

Durante años, las bayas se han utilizado para tratar los problemas digestivos como el estreñimiento. Las bayas contienen fibra que actúa como prebiótico para alimentar a sus bacterias intestinales saludables. En un estudio con animales, el extracto de espino redujo el tiempo de tránsito de los alimentos en el tracto digestivo.

En otro estudio que utilizó ratas con úlceras de estómago, el extracto mostró efectos protectores en el revestimiento del estómago similares a los de un medicamento antiulceroso. En animales alimentados con una dieta rica en grasas, el extracto de espino también demostró tener la capacidad de disminuir la acumulación de grasa dentro del hígado.

La acumulación de grasa en el hígado que se produce sin el consumo de alcohol se denomina enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA). Una forma más grave de esta enfermedad se conoce como esteatohepatitis no alcohólica (NASH), que produce hinchazón y daño permanente al órgano.

Las enfermedades hepáticas se están volviendo un problema de salud mundial, y la EHGNA y la enfermedad hepática alcohólica son las dos más comunes. Aunque varía mucho de un país a otro, la prevalencia combinada a nivel mundial es del 25.24 % de la población.

La mayor prevalencia más alta se encuentra en los países de Oriente Medio y Sudamérica, mientras que la menor prevalencia se encuentra en África. En los Estados Unidos y Norteamérica, la prevalencia está entre el 21 % y el 24.7 %. En un estudio con animales, los investigadores encontraron que los flavonoides de las hojas de espino, los extractos más bioactivos que se encuentran en las hojas de espino, tenían una influencia positiva sobre la esteatosis hepática inducida por la alimentación.

También descubrieron que la suplementación redujo el peso corporal y el peso del hígado de los animales, y mejoró los parámetros séricos y la función hepática. Parecía que esto fue el resultado del aumento en los niveles de adiponectina circulante que es una hormona que participa en la degradación de la glucosa y los ácidos grasos.

Además, activó AMPK. Esto llevó a los investigadores a concluir que el extracto de hoja de espino ayuda a mejorar la “esteatosis hepática al mejorar la vía de adiponectina/AMPK en el hígado de ratas con EHGNA inducida por HFG [alimentación rica en grasas]”.

Ayuda a combatir el envejecimiento

Durante mucho tiempo se han estudiado los polifenoles debido a su capacidad para proteger la piel de la luz ultravioleta y mejorar el aspecto de la piel. Aunque la baya de espino es rica en varios flavonoides, tiene una mayor concentración de proantocianidinas, proantocianidina oligomérica (OPC) u oligómeros procianidólicos (PCO). Un análisis del extracto de espino con cromatografía líquida de alta resolución mostró que también tiene un alto contenido de epicatequinas.

La combinación de ácido clorogénico, proantocianidinas B2 y epicatequinas representó el 51.4% de la cantidad total de polifenoles en la fruta. Estos compuestos son poderosos antioxidantes. Al igual que a otras áreas de su cuerpo, la inflamación crónica y las especies reactivas de oxígeno pueden dañar el tejido conectivo de su piel.

Los estudios demuestran los poderosos efectos que producen las epicatequinas y proantocianidinas en la fotoprotección, la estructura y función de la piel. Un estudio evaluó el efecto que tiene el extracto de espino en el envejecimiento de la piel por la luz UVB, que aumenta la producción de metaloproteinasas de la matriz (MMP) y la degradación del colágeno.

Esta combinación de daño de la luz UVB provoca la formación de arrugas. Con un modelo animal, los investigadores encontraron que los tratamientos revirtieron el engrosamiento epidérmico y el daño causado por la luz UVB, que “suprimió la expresión de MMP y estimuló la producción de procolágeno tipo I”, lo que llevó a los investigadores a concluir que el extracto de espino puede ayudar a “prevenir el fotoenvejecimiento cutáneo inducido por la radiación UVB”.

Otra revisión de la literatura encontró que el PCO y la quercetina son bioflavonoides específicos que benefician el tejido conectivo, ya que se relacionan con una mayor circulación local y promueven el desarrollo de una matriz de colágeno fuerte.

Las catequinas también son poderosos antioxidantes que tienen propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas. En un estudio sobre los polifenoles del té verde, los investigadores incluyeron a 60 mujeres en un estudio doble ciego y controlado con placebo. El grupo de intervención tomó una bebida con 1402 mg de catequinas totales por día.

A lo largo del estudio, se midió la estructura, función y fotoprotección de la piel. Después de la exposición a un simulador solar, los investigadores encontraron que quienes tomaron la bebida de polifenoles tenían un mejor suministro de oxígeno y un mayor flujo sanguíneo a la piel. En el grupo de intervención también experimentó mejoras en la densidad, elasticidad, rugosidad y descamación de la piel.

¿Qué es la baya de espino?

La planta de espino es originaria de las zonas templadas del norte y puede encontrarse en Norteamérica. Crece de forma silvestre y se puede cultivar como planta ornamental. Recibe el nombre de manzana de espinas en referencia a su fruta que se parece a una manzana y está cubierta de espinas. A veces se planta como una circa de espinas para el ganado.

La planta pertenece a la familia de las rosas. A principios de la primavera, la planta tiene flores blancas o rosadas y produce una pequeña fruta que se parece a una manzana, que puede variar en color del rojo al negro. Aunque la fruta también puede variar en cuanto a sabor y textura, dependiendo del tipo de planta de espino, son comestibles y, como ya mencioné, suele utilizarse como medicina herbal.

Dependiendo de la especie, las plantas pueden crecer como un arbusto redondeado más corto o un árbol que puede alcanzar hasta casi 8 metros de altura. Los árboles de espino pueden encontrarse en los viveros como plántulas o árboles injertados. Son plantas que necesitan los rayos del sol, ya sea total o parcial y son susceptibles a una serie de plagas.

Si decide plantar uno en su jardín, busque una variedad que sea resistente a las plagas. Si no quiere utilizarlo como barrera, evite plantar un árbol con espinas, ya que las espinas pueden crecer hasta 8 centímetros de largo. Aunque los árboles no necesitan poderse mucho, se recomienda eliminar las ramas que provienen de la base del tronco, ya que con el tiempo aumentan el tamaño y la densidad de la planta.

Durante una época, este árbol se conoció como el “árbol del pan y el queso” ya que las flores, las bayas y las hojas se comían de forma segura en tiempos de hambruna. A veces, las bayas también se utilizan para hacer vino, mermelada o almíbar.

Incorpore las bayas de espino en su alimentación

Las bayas de espino suelen ser difíciles de encontrar en los supermercados locales. Sin embargo, puede encontrarlas en mercados de agricultores, en línea o en tiendas especializadas de alimentos naturales. Hay varias formas diferentes de incorporarlas en su alimentación. Las bayas crudas tienen un sabor ligeramente dulce pero ácido y puede ser un excelente bocadillo.

Sin embargo, aunque las bayas no son venenosas, las semillas sí lo son. Las semillas contienen amigdalina, que se convierte en cianuro de hidrógeno que puede ser toxico para el intestino delgado. Un adulto puede tolerar una o dos semillas, pero en el caso de los niños, incluso esta pequeña cantidad podría ser letal.

También puede encontrar té de espino hecho con hojas o bayas, o puede secar las hojas y preparar su propio té. También hay suplementos de espino disponibles en el mercado. Según un artículo que se publicó en el Journal of the American College of Cardiology de Foundation Task Force on Clinical Expert Consensus Documents, la dosis mínima efectiva de extracto de espino para reforzar la salud cardíaca es de 300 mg al día.

En la mayoría de los ensayos que revisaron, los autores encontraron que el beneficio máximo se produjo después de seis a ocho semanas de tomar el suplemento. En varios estudios que revisaron, se demostró que también aumenta la tolerancia al ejercicio en personas con insuficiencia cardíaca congestiva. También se determinó que la preparación era “bien tolerada y segura”.

Los probióticos ayudan a combatir el COVID

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 10 de marzo del 2021.

HISTORIA EN BREVE

  • Una revisión de los registros de los pacientes reveló que las personas hospitalizadas por COVID-19 con síntomas gastrointestinales tenían mayor riesgo de desarrollar una enfermedad grave
  • Se administraron probióticos a pacientes que dieron positivo por COVID-19 y su síntoma de diarrea entró en remisión en un periodo de 72 horas
  • La disbiosis intestinal podría aumentar la gravedad de una infección Una de las causas principales de la disbiosis es una dieta rica en alimentos procesados y azúcar, y baja en fibra
  • Las comorbilidades relacionadas con la enfermedad grave, como la diabetes, la edad y las enfermedades cardiovasculares, también se asocian con una menor la diversidad del microbioma intestinal
  • Las bacterias beneficiosas necesitan fibra para prosperar; así que considere incorporar alimentos fermentados caseros, ricos en probióticos y fibra

En la actualidad, se están realizando ensayos clínicos para determinar si los probióticos pueden ayudar a reducir la gravedad de la enfermedad por COVID-19 y mejorar la recuperación, ya que el estado de la microbiota intestinal tiene un impacto importante en la salud en general En los últimos meses, los médicos e investigadores también descubrieron que las personas con mala salud intestinal tienen un mayor riesgo de sufrir una enfermedad grave por COVID-19.

Además de influir en la digestión y la inmunidad, los científicos descubrieron que tenemos un eje intestino-cerebro y un eje intestino-pulmón. El eje intestino-cerebro tiene comunicación bidireccional, por la que la microbiota ayuda a regular la función cerebral.

Por ejemplo, un estudio que se publicó en 2017 encontró que la cepa Bifidobacterium breve A1 ayuda a reducir la disfunción cognitiva que suele ser inducida por la beta amiloide en la enfermedad de Alzheimer.

En otro estudio, los investigadores encontraron una conexión entre un microbioma intestinal desequilibrado y el desarrollo de placas amiloides en el cerebro. Hace poco, otra investigación descubrió que también existe un eje intestino-pulmón, lo que demuestra que el estado de su microbiota influye en su sistema inmunológico, no solo a nivel local sino sistémico.

Aunque su intestino y pulmones son anatómicamente distintos, cada vez más evidencia revela que la comunicación entre los sistemas ayuda a mantener la homeostasis de su sistema inmunológico. Con base en este conocimiento, los investigadores ahora están investigando una relación potencial y probable entre la salud de su microbioma intestinal y el riesgo potencial de una enfermedad más grave por COVID-19.

Los casos graves de COVID-19 se relacionan con una mala salud intestinal

Una revisión de más de 1000 registros de pacientes demostró que las personas que ingresaron al hospital con síntomas gastrointestinales (GI) y sospecha de infección por COVID-19 tuvieron peores resultados que los pacientes sin síntomas GI. Cuando los investigadores de Rush University Medical Center en Chicago realizaron esta revisión, clasificaron a los pacientes con una puntuación de cero a tres.

Incluso después de ajustar las comorbilidades, la demografía y otros síntomas clínicos, los resultados siguieron siendo los mismos. Uno de los investigadores habló con un periodista de MedPage Today y le dijo:

“Sabíamos que los síntomas gastrointestinales podrían ser parte de la infección, pero no sabíamos si marcaban una diferencia y representaban un mayor riesgo. Así que queríamos analizar el impacto de los síntomas gastrointestinales iniciales para ver si se relacionaban con una enfermedad más grave y descubrimos que los pacientes con síntomas gastrointestinales también tenían factores de riesgo establecidos para la gravedad, como edad avanzada, diabetes, obesidad e hipertensión”.

De los pacientes que evaluamos, el 22.4 % reportó haber experimentado al menos un síntoma gastrointestinal, los más comunes eran náuseas y vómitos. Los investigadores también descubrieron que las personas con síntomas gastrointestinales tenían un mayor índice de masa corporal, una mayor prevalencia de diabetes y presión arterial alta, así como edad avanzada. Aunque este grupo tuvo una mayor tasa de ingreso en la UCI e intubación, el estudio no consideró la tasa de mortalidad.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades también descubrieron que, aunque los síntomas de COVID-19 pueden variar, durante el transcurso de la enfermedad, muchas personas experimentan síntomas respiratorios, fiebre, pérdida del gusto y del olfato y síntomas gastrointestinales. Esto indica que los síntomas gastrointestinales se encuentran entre los más reportados ante los CDC.

SciTech Daily reportó que los resultados de las autopsias y otros estudios sugieren que un número considerable de personas con enfermedad grave por COVID-19 también tienen problemas gastrointestinales. En enero de 2021 se publicó un estudio que plantea que los síntomas gastrointestinales que pueden predecir una enfermedad grave por COVID-19 se desencadenan por una mala salud intestinal.

Heenam Stanley Kim, Ph.D., de la Universidad de Corea examinó la evidencia y propuso que la disbiosis intestinal puede aumentar la gravedad de la infección. Esta hipótesis está respaldada por una revisión de varios estudios que se realizó desde el inicio de la pandemia y que también demuestra que la falta de diversidad microbiana se relaciona con una enfermedad más grave.

Un estudio preliminar de pacientes que ingresaron al hospital de Stanford del 4 al 24 de marzo de 2020 también encontró que el 31.9 % de los pacientes presentaban síntomas gastrointestinales al momento de su hospitalización.

El estado de la diversidad del microbioma también influye en el riesgo de la enfermedad

La relación entre la microbiota intestinal alterada y las enfermedades crónicas se estableció mucho antes de que apareciera el COVID-19. Uno de los factores subyacentes que afectan la diversidad de su microbioma intestinal es la dieta occidental, que es rica en alimentos procesados y azúcar y una baja en frutas y vegetales.

Esta combinación aumenta la inflamación crónica y se relaciona con varias enfermedades crónicas de alta prevalencia, como diabetes, enfermedad cardiovascular y obesidad. Kim comenzó a analizar estudios y a conectar todos estos puntos cuando se dio cuenta que los países con buenas infraestructuras médicas eran de los más afectados por esta enfermedad.

Estos países consumían una dieta occidental baja en fibra, y según él “una dieta baja en fibra es una de las causas principales de la microbioma intestinal alterada, lo que se conoce como disbiosis, que a su vez provoca enfermedades crónicas”.

Este patrón, promueve una respuesta inflamatoria en el cuerpo y se relaciona con un marcado aumento en las tasas de “enfermedades occidentales”, de hecho, un estudio observacional de 1 000 hombres y mujeres sanos encontró que consumir alimentos procesados reduce de manera significativa de la diversidad del microbioma intestinal.

La edad también influye en el estado de su microbiota intestinal Los investigadores plantean la hipótesis de que la edad también podría contribuir con el desarrollo de enfermedades crónicas. Los cambios en el microbioma intestinal que ocurren con la edad podrían ir de la mano con los cambios en la alimentación, el estilo de vida y el uso de medicamentos.

A medida que se recopiló más información sobre el progreso del COVID-19, los científicos identificaron grupos de personas con comorbilidades que tenían un mayor riesgo de enfermedad grave. Y parece que la mala salud intestinal podría ser un factor subyacente entre los grupos de personas que padecen enfermedades graves.

El Dr. Giancarlo Ceccarelli, especialista en enfermedades infecciosas de la Universidad de Roma, y sus colegas, administraron probióticos a 70 pacientes que dieron positivo por COVID-19, los resultados de su investigación se publicaron en Frontiers in Medicine. El grupo de control recibió hidroxicloroquina, antibióticos y tocilizumab, un medicamento inmunosupresor.

El grupo de prueba recibió la misma terapia junto con un probiótico multicepa oral. En 72 horas, la diarrea del grupo de prueba estaba en remisión en comparación con menos de la mitad del grupo de control.

Además, esta intervención redujo ocho veces el riesgo de desarrollar insuficiencia respiratoria, mientras que los participantes del grupo de control tuvieron un mayor riesgo de mortalidad. Ceccarelli comentó los resultados del estudio.

“Nuestros resultados preliminares mostraron una mayor tasa de supervivencia y un menor riesgo de requerir reanimación intensiva en los pacientes que recibieron probióticos, en comparación con los pacientes que recibieron el tratamiento estándar. Las bacterias intestinales tienen un impacto inmunológico de largo alcance en el sistema inmunológico pulmonar.

Nuestros resultados enfatizan la importancia del eje intestino-pulmón en el control de la enfermedad por COVID-19. La bacterioterapia podría ayudar a complementar el tratamiento de esta grave enfermedad”.

Los probióticos deberían formar parte del tratamiento contra el COVID-19

Kim señala que la disbiosis en la microbiota intestinal puede ser el factor subyacente que permite que el SARS-CoV-2 acceda a las células de la mucosa intestinal que de otro modo estarían bien protegidas. En última instancia, esto permite que el virus se filtre al cuerpo y afecte los órganos internos, lo que puede explicar la disfunción multiorgánica que ocurre en los casos graves de esta enfermedad.

Kim propone que la salud intestinal podría ser un factor muy importante al momento de predecir los síntomas. Los pacientes con enfermedad grave por COVID-19 tienen una menor diversidad bacteriana, incluyendo el tipo de bacterias que producen butirato. Este ácido graso de cadena corta que es muy importante para reforzar la función de barrera intestinal.

La microbiota alterada produce intestino permeable, lo que puede contribuir con estos síntomas gastrointestinales y permitir que el virus acceda a sus órganos internos. El SARS-CoV-2 interactúa con las enzimas ACE2 que se encuentran en la superficie de muchos de estos órganos. Esto promueve la entrada en las células huésped y la replicación, lo que daña el tejido y promueve la gravedad de la enfermedad.

Además de proteger la función de la barrera de la mucosa e inhibir la invasión de bacterias patógenas, la evidencia también demuestra que la microbiota intestinal tiene un impacto directo sobre las bacterias de los pulmones. Al estudiar la sepsis, los investigadores encontraron una gran cantidad de Bacteroides sp. en los pulmones, lo que puede indicar que la composición de su microbioma intestinal podría ser una herramienta predictiva.

Aunque Canadá ya empezó el primer ensayo para estudiar esto más a fondo, los médicos en China han estado utilizando probióticos con otros tratamientos contra el COVID desde febrero de 2020. El objetivo del ensayo PROVID-19 es evaluar si los probióticos podrían ser una opción de tratamiento para reducir la duración y síntomas de pacientes que han dado positivo en la prueba del virus y no están hospitalizados.

Gastroenterology publicó un estudio piloto de la Universidad China de Hong Kong. Los investigadores recopilaron datos de 150 pacientes con COVID-19 y 1500 individuos sanos. Se comparó la información del microbioma y después se creó un suplemento de cepas de prebióticos y bifidobacterias.

El documento reveló que “en comparación con los pacientes que recibieron atención estándar, un número significativo de pacientes que recibieron la fórmula lograron superar los síntomas y reducir los marcadores inmunes proinflamatorios”.

Los probióticos necesitan prebióticos

La fórmula que desarrollaron los científicos chinos aumenta el potencial de que las bacterias beneficiosas crezcan en su microbioma intestinal al proporcionarles los nutrientes que necesitan para desarrollarse. Los prebióticos y probióticos son inmunomoduladores En otras palabras, ambos estimulan y suprimen el sistema inmunológico, lo que ayuda a mantener la homeostasis en el sistema.

Después de evaluar las investigaciones que demuestran el poderoso efecto que tiene su microbioma intestinal en el sistema inmunológico, junto con el conocimiento actual de que el microbioma influyen en el desarrollo de COVID-19 grave, un científico escribió:

“En caso de que no se desarrolle una vacuna, se cree que el mejor enfoque para combatir la infección por COVID-19 es fortalecer el sistema inmunológico con probióticos y prebióticos que tienen el potencial de reducir la inflamación que causa la infección por COVID-19″.

Esta es una estrategia que puede implementar de forma inmediata sin la necesidad de recurrir a ningún medicamento. Los estudios han confirmado que consumir grandes cantidades de azúcar aumentará el número de de bacterias dañinas en el intestino y, al mismo tiempo, reducirá la población de bacterias beneficiosas.

Las bacterias beneficiosas ayudan a reforzar la función de la barrera intestinal y a reducir los efectos de las endotoxinas que liberan las bacterias dañinas. La inulina es un tipo de fibra soluble en agua que se encuentra en los espárragos, el ajo, los puerros y las cebollas. Los siguientes alimentos lo ayudarán a aumentar su consumo de fibra prebiótica, lo que refuerza la salud de su microbioma y mejora su salud en general:

EspárragosPlátanoBetabel
Leche maternaRaíz de bardanaAnacardos
Raíz de achicoriaCuscúsBulbo de hinojo
AjoChícharosAlcachofas de Jerusalén
JícamaRaíz de KonjacPuerros
NectarinasCebollaCaqui
PistachosGranadaCol de Saboya
Algas marinasChalotesTirabeques
Tomate de árbol

Los alimentos fermentados son sabrosos y suelen ser ricos en fibra

A lo largo de la historia, la fermentación se ha utilizado para preservar los alimentos. Con el tiempo, muchas culturas incorporaron alimentos fermentados en sus dietas diarias y algunas compartieron sus valiosas preparaciones con el mundo. Por ejemplo, el natto japonés, el kimchi coreano y el chucrut alemán son populares en muchas áreas fuera de sus lugares de origen.

Los alimentos fermentados tienen enormes beneficios. De hecho, la industria del yogurt ha querido sacar ventaja de los recientes descubrimiento sobre los probióticos para vender más productos. Y aunque el yogurt que compra en el supermercado tiene bacterias probióticas, también es rico en azúcar que alimenta las bacterias dañinas en su intestino. Esta es solo una de las razones por las que no recomiendo comer yogurt comercial.

En los Estados Unidos, es cada vez más popular consumir alimentos fermentados. Sin embargo, prepararlos no es muy común. Los alimentos ricos en probióticos, como los vegetales fermentados, aumentarán la población de bacterias beneficiosas, lo que a su vez reduce las colonias potencialmente patógenas. Preparar su propio yogurt es una manera fácil de comenzar con alimentos fermentados.

Para preparar yogurt solo necesita un cultivo iniciador de alta calidad y leche sin pasteurizar de vacas de pastoreo. En “Beneficios del Yogur Casero Versus el Yogur Comercial” podrá encontrar instrucciones que lo guiarán paso a paso. También puede fermentar casi todos los vegetales. Los pepinos (pepinillos) y la col (chucrut) se encuentran entre los más populares. Aunque al principio puede parecer todo un desafío, una vez que domine el método todo será más fácil.

Como menciono en “Consejos para la Fermentación en Casa“, existen varios pasos que puede seguir para facilitar un poco el proceso. Comience con ingredientes frescos y orgánicos y asegúrese de lavarlos bien con mucha agua fría. La idea es eliminar las bacterias, enzimas y otros desechos, ya que esto puede afectar el resultado.

Elija frascos de vidrio con tapas autosellantes. La mayoría de los vegetales fermentados deben cubrirse con salmuera. Recomiendo utilizar un cultivo iniciador rico en vitamina K2 disuelto en jugo de apio. Permita que los frascos se asienten en un área cálida durante varios días. La temperatura ideal debería ser de alrededor de 72 grados Fahrenheit.

Durante los meses de verano, los vegetales estarán listos en tres o cuatro días. En invierno, pueden tardar hasta siete días. La única manera de saber si ya está listo es, abrir el frasco y probarlos.

Cuando esté satisfecho con el sabor y la consistencia, meta los frascos en el refrigerador. La refrigeración detiene la fermentación y es posible mantenerlos por meses. Recuerde que no debe comer directamente del frasco porque contaminará el resto del lote con las bacterias de su boca. Es importante que los vegetales estén cubiertos con salmuera antes de volver a taparlos.