Cómo los Probióticos podrían ayudarlo a controlar su peso

Por El Dr. Mercola, febrero de  2014

Su tracto gastrointestinal alberga casi 100 trillones de bacterias- cerca de dos o tres libras en peso. En general, las bacterias superan en número a las células de su cuerpo en 10 a 1.

Sus bacterias intestinales forman parte de su sistema inmunológico y los investigadores están descubriendo que los microbios de todo tipo desempeñan un papel fundamental en un sinnúmero de áreas de su salud. Por ejemplo, las bacterias benéficas, también conocidas como probióticos, han demostrado:

Las bacterias benéficas también controlan el crecimiento de bacterias que causan enfermedades compitiendo por los nutrientes y los sitios de adherencia en su colon. Esto es de suma importancia, ya que si las bacterias patogénicas y otros microbios menos benéficos llegan a ganar la partida, podrían causar daños en su salud. También puede afectar su peso, como lo verá más adelante.

Por todas estas razones y más, siempre recomiendo una alimentación rica en alimentos enteros y sin procesar junto con el consumo de alimentos fermentados o cultivados. Un suplemento de probióticos de alta calidad también puede servir como aliado para restablecer el equilibrio en su microbiota- especialmente cuando toma antibióticos.

Conexión entre la Alimentación, las Bacterias y el Peso

El desequilibrio bacteriano en su intestino puede empeorar gracias a los alimentos procesados y a los alimentos que han sido pasteurizados o esterilizados. Otros factores que afectan la flora intestinal incluyen el lugar en dónde vive, su edad, su nivel de estrés y cualquier problema de salud que pueda tener. Al igual que los alimentos procesados, el azúcar también promueve el crecimiento de hongos y levaduras causantes de enfermedades.

Los síntomas del crecimiento excesivo de levadura (cándida) incluyen fatiga, depresión, irritabilidad, dolores de cabeza, problemas de concentración, debilidad muscular, infecciones vaginales y del tracto urinario, pie de atleta, tiña inguinal, ardor estomacal persistente, indigestión, estreñimiento, hinchazón en las articulaciones, congestión nasal y dolor de garganta.1

En caso de que aún no tenga la razón suficiente para re-evaluar su consumo de azúcar y fructosa, aquí otro giro en la conexión entre el azúcar y la obesidad: los investigadores han descubierto una diferencia en las bacterias intestinales entre las personas con sobre peso y las personas de peso normal.2

En las personas obesas, se encuentra en mayor abundancia una cepa bacteriana conocida como firmicutes, en comparación con las personas delgadas. Las personas con peso normal, tienen mayor abundancia de la cepa bacteroidetes.

La bacteria firmicutes parece ser mucho mejor que la cepa bacteroidetes en cuanto a la conversión de calorías de los azucares complejos en grasa. A medida que las personas con sobrepeso comienzan a bajar de peso, el equilibrio entre las bacterias cambia y las firmicutes dejan de predominar, haciendo que ahora los predominantes sean las bacteroidetes. La investigación publicada el año pasado descubrió que hasta un 20 por ciento de la pérdida de peso sustancial lograda por el bypass gástrico, una popular cirugía para bajar de peso, en realidad se debe al cambio en el equilibrio de las bacterias en su tracto digestivo.3

Las Bacterias Pueden Afectar Su Antojo por los Alimentos y el Éxito en la Pérdida de Peso

De acuerdo con el estudio más reciente, una cepa de bacterias amigables llamada Lactobacillus Rhamnosus también parece ser bastante útil para la pérdida de peso en mujeres.4 Como lo informó el artículo presentado:

“La prueba clínica controlada se creó para que las primeras 12 semanas las mujeres fueran guiadas para comer menos alimentos y a algunas de ellas también se les dio Lactobacillus Rhamnosus. Después de 12 semanas la cantidad de peso que habían perdido fue mucho mayor en el grupo de mujeres que había recibido el suplemento benéfico para la flora intestinal.

Durante las siguientes 12 semanas se implementaron restricciones en la alimentación y la flora benéfica continuó. Las mujeres que no tomaron Lactobacillus Rhamnosus habían subido de peso, mientras que el grupo de mujeres con una buena flora intestinal continuó bajando de peso. El beneficio de la pérdida de peso está relacionado con el perfil bacteriano del tracto digestivo. Este es el más reciente estudio en demostrar que el equilibrio de poder en el tracto digestivo es una variable metabólica de suma importancia y no debe de ser ignorado, ya que debe formar parte de un exitoso plan para bajar de peso a largo plazo.”