Alimentos orgánicos: aliados naturales para combatir el tránsito lento

El estreñimiento afecta a un buen porcentaje de la población. Si bien muchos productos prometen una solución mágica al asunto, según los profesionales tener una alimentación saludable es la clave de una auténtica mejoría.

Por Lorena Farina y Daniela Ortega

Las publicidades televisivas son más que elocuentes cuando promocionan productos que prometen soluciones rápidas a un mal que afecta a un buen porcentaje de la población: el tránsito lento. Lo cierto es que dentro de ese abultado grupo que sufre de estreñimiento, las mujeres duplican el número de hombres víctimas de esta dolencia. “Para prevenir problemas intestinales y mantener una buena salud es fundamental tener una alimentación variada, nutritiva y consumir mucho líquido”, aporta la Licenciada en Nutrición Daniela Ortega.

Es que, de no tratarse de un problema crónico, el tránsito lento bien puede prevenirse o “alivianarse” mediante un cambio radical en la forma de comer. “Mucha gente que ha tenido que modificar sus hábitos alimenticios se ha acercado a consultar sobre los beneficios de los productos orgánicos. Yo siempre les digo que es cuestión de probar para darse cuenta de que a nuestro cuerpo hay que nutrirlo con alimentos de excelente calidad. Entonces, qué mejor que aquellos que en ninguno de sus procesos ha sido contaminado por sustancias químicas”, contó Lorena Farina, propietaria de Vida Plena, el primer delivery on line de productos orgánicos en Cuyo.

“De hecho –agregó la nutricionista- la alimentación orgánica sería lo ideal para empezar a combatir el estreñimiento. Ya que al no presentar ningún aditivo, conservante o químico son alimentos que protegen más nuestra salud y no sólo a nivel intestinal, sino de una manera mucho más completa. Siempre lo más natural, resultará mucho más sano y beneficioso para nuestro organismo”. Y siguió: “Mucha gente tiene un hábito alimenticio que -sin saber- los perjudica. Por ejemplo, algunos comen carne de manera excesiva, y la acompañan con una ensalada de papa o arroz o fideos. Por supuesto, que si nuestra rutina alimentaria se desarrolla de esa manera estaremos colaborando con el tránsito lento. Incluso, algunos que sufren de esta dolencia, para incluir verduras en sus dietas, comen brócoli o coliflor o repollo; lo cierto es que estas verduras producen inflamación, y acrecientan los síntomas incómodos del estreñimiento”.

Claro que sería imposible pensar en que la solución recaerá solamente en el consumo de alimentos saludables. Para lograr resultados verdaderos, también se requiere beber líquidos y hacer ejercicios. “Es cuestión de estar convencidos de que queremos un cambio radical en nuestra calidad de vida en lo que respecta a la salud”, remarcó Farina.

(+) Causas y consecuencias

Algunos profesionales aseguran que entre el 30% y 40% de los pacientes que se acercan a un gastroenterólogo, lo hacen porque están sufriendo colon irritable y, por lo tanto, desorden en el tránsito intestinal. Es que si bien, por lo general, el origen de los síntomas es funcional, puede ser indicativo de alguna alteración de tipo orgánica por lo que resulta fundamental la consulta al gastroenterólogo para identificar la causa en cada caso particular y adecuar el tratamiento.

Claro que si se descarta una causa originada en el organismo, el estreñimiento puede darse por una conjunción de factores relacionados con la alimentación y el estilo de vida de cada uno. El estrés, desorden en horario de comidas (muchas veces se cuenta con pocos minutos para almorzar, por ejemplo), postergación de necesidades biológicas, alimentación no saludable, falta de actividad física, sobrepeso y consumo excesivo de laxantes y de ciertos medicamentos pueden ser causas del mal funcionamiento del tránsito intestinal.

“El intestino es un órgano que se acostumbra; por lo que si consumimos –por ejemplo- laxantes no recetados o productos comerciales como yogures que prometen regularizar el intestino, luego de un tiempo puede que ya no hagan efecto. Por eso es importante y recomendable ir cambiando el estímulo permanente; con una alimentación sea variada y saludable”, recomendó la Licenciada Daniela Ortega.

(+) Cuatro claves “orgánicas” en busca de una solución saludable

1. Para combatir el tránsito lento, no hay alimentos prohibidos, si hay alimentos que deben disminuir su consumo aquellas personas que presenten problemas intestinales, como pueden ser quesos -sobre todos los más duros-, arroz, o alimentos que produzcan inflamación porque pueden empeorar los síntomas.

2. Viene muy bien consumir todos aquellos alimentos que sean ricos en fibra, como frutas (mejor si se pueden consumir con la cáscara), verduras (variando tipo y color) y por lo menos una porción de verduras crudas en el día. También cereales integrales (pan de salvado, harinas integrales, entre otros), legumbres, semillas (priorizando las de lino).

3. Es importante tener en cuenta que la fibra solamente surte el efecto deseado con la combinación de líquidos, por lo que es fundamental acompañar una alimentación rica en fibra con bastante agua, y actividad física.

4. Reeduca el hábito evacuatorio; es decir, trata de ir al baño unos minutos luego del desayuno o la primera comida del día, que es cuando se estimula con mayor intensidad el reflejo gastrocólico.