México y EU mueven a enero la discusión sobre freno a importación de maíz transgénico

Por Redacción Sin Embargo, Sin Embargo, 16 de diciembre de 2022.

México inició el debate cuando anunció planes para prohibir las importaciones de maíz transgénico para consumo humano, e incluso para alimentación animal.

México y Estados Unidos acordaron este viernes continuar en enero los diálogos para consolidar un acuerdo que permita poner fin a la disputa sobre las importaciones del maíz estadounidense que ha generado fricciones entre los dos países.

Las autoridades estadounidenses y mexicanas se reunieron el viernes en Washington y conversaron sobre la disputa comercial entre ambos países que surgió luego de la decisión del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador de prohibir la importación de maíz transgénico para consumo humano. La prohibición entrará en vigor en enero del 2024.

La Presidencia de México dijo en un comunicado que se escucharon las inquietudes del gobierno estadounidense y se decidió continuar en enero las conversaciones. El objetivo es “consolidar un entendimiento mutuo” que dé certidumbre jurídica a todas las partes, pero no se precisó cuándo será la próxima cita.

Ambos gobiernos esperaban definir una solución a la disputa comercial antes de la visita que realizará el 9 de enero a México el presidente Joe Biden junto con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, para la Cumbre de Líderes de América del Norte.

Estados Unidos, que es el principal socio comercial de México, ha expresado preocupación por la decisión del Gobierno de López Obrador contra el maíz transgénico y ha reconocido que la medida tiene potencial de “perturbar significativamente” el comercio y perjudicar a los agricultores de ambos países.

El secretario de Agricultura estadounidense, Tom Vilsack, expresó el mes pasado, tras una visita a México, que de no lograrse una resolución aceptable al asunto, Washington se vería forzado “a considerar todas las opciones, incluyendo la toma de medidas formales para hacer valer nuestros derechos legales” bajo el acuerdo de libre comercio entre Estados Unidos, México y Canadá, el T-MEC.

Ante la preocupación expresada por Vilsack, México ofreció este mes extender hasta el 2025 la entrada en vigencia de la prohibición de importación del maíz genéticamente modificado.

México ya tiene otra disputa comercial y de inversión con Estados Unidos cuando este país pidió activar su sistema de resolución de controversias del T-MEC sobre las políticas energéticas mexicanas que, según Washington, favorecen injustamente a las empresas estatales de electricidad y petróleo en detrimento de los competidores estadounidenses y los proveedores de energía limpia.

Las partes mantienen conversaciones que no han conducido hasta ahora a ninguna solución. Estados Unidos podría insistir en la reclamación y ésta podría acabar en sanciones comerciales contra México.

Foto de Wouter Supardi Salari en Unsplash

Urge Sin Maíz no hay País a impulsar la agroecología

Por Jared Laureles, La Jornada, 16 de diciembre de 2022.

La Campaña Nacional Sin Maíz no hay País sostuvo que es urgente la transición agroecológica, garantizar mayor presupuesto y fortalecer el marco regulatorio, para transitar hacia una agricultura libre de transgénicos y de plaguicidas altamente peligrosos (PAP).

Existe una visión retrógrada que defiende los intereses de la élite agroempresarial unida a las trasnacionales que controlan las semillas (híbridas y transgénicas), así como los plaguicidas, señaló en un posicionamiento ante la campaña desinformativa que pone en duda la viabilidad del decreto presidencial sobre la eliminación progresiva del uso del glifosato y del maíz transgénico para 2024.

Señaló que hay un enfrentamiento entre dos visiones sobre el rumbo que debe tomar la política alimentaria de México. Una de ellas es la mencionada y la otra es progresista, pues busca la soberanía alimentaria para garantizar los derechos a una alimentación sana, a alimentos producidos en el país sin maíz transgénico y eliminar de manera gradual el uso de PAP.

Los plaguicidas, enfatizaron, pueden causar daños irreversibles a la salud, como cáncer, malformaciones, alteraciones hormonales, además de daños ambientales como la contaminación de los suelos y del agua, la muerte de las abejas y otros insectos polinizadores.

La organización reconoció la voluntad política del gobierno federal para dejar de importar maíz transgénico y prohibir gradualmente el uso de PAP en los campos mexicanos. Incluso, aseguró que el acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, T-MEC, no nos obliga a la importación de transgénicos o productos de la biotecnología moderna, como lo llaman en el tratado (artículo 3.14), por lo que no es un impedimento para el cierre de importaciones.

A principios de este mes, México ofreció a Estados Unidos extender a 2025 el plazo para iniciar la prohibición en el país del maíz transgénico, informó la Secretaría de Economía.

“Es innegable que el maíz transgénico y los PAP que los acompañan son la punta del iceberg de un modelo agroindustrial depredador basado en monocultivos que erosionan los suelos, sobrexplotan y contaminan el agua”, expuso.

Mercola responde: ¿Qué alimentos debería comer o evitar para preservar la salud de su páncreas?

Por Dr. Mercola, Mercola, 15 de diciembre de 2022.

HISTORIA EN BREVE

  • El páncreas desempeña un papel importante tanto en el sistema digestivo como endocrino. Si su páncreas no funciona de manera correcta, dificulta la capacidad de su cuerpo para digerir y regular el nivel de azúcar en la sangre
  • Existen ciertos alimentos y bebidas que requieren más enzimas para poder digerirlas, o insulina para mantener equilibrados los niveles de azúcar en la sangre, lo que significa más trabajo para el páncreas, y algo que podría causar daños permanentes con el tiempo
  • El páncreas es uno de los principales órganos que se ven afectados por el consumo de alcohol. De hecho, el consumo excesivo crónico de alcohol representa alrededor del 70 % de los casos de pancreatitis
  • El consumo frecuente de alimentos y bebidas con alto contenido de azúcar podría aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de páncreas

Por el Dr. Mercola

El páncreas se encuentra ubicado en su abdomen, entre el estómago y la columna vertebral y desempeña un papel muy importante tanto en el sistema digestivo como el sistema endocrino. Alrededor del 95 % de este órgano son tejidos exocrinos que funcionan en el lado digestivo, producen enzimas pancreáticas (lipasa, proteasa y amilasa) y ayudan a descomponer las grasas, proteínas y los almidones.

El 5 % restante es igual de importante, ya que está compuesto de células endocrinas que producen y liberan hormonas en el torrente sanguíneo. Dos de las principales hormonas pancreáticas son la insulina y el glucagón, las cuáles ayudan a equilibrar los niveles de azúcar en la sangre. Otras hormonas pancreáticas se encargan de estimular los ácidos estomacales, regular el apetito y vaciar el estómago.

¿Qué sucede cuando el páncreas no funciona de manera correcta?

Si su páncreas no funciona de manera correcta, dificulta la capacidad de su cuerpo para digerir y regular los niveles de azúcar en la sangre, lo que podría causar graves problemas como deficiencias de nutrientes, diabetes y pancreatitis. Existen varios factores que podrían predisponerlo a desarrollar pancreatitis, incluyendo el tabaquismo, genética, envejecimiento y afecciones preexistentes como la obesidad, diabetes y los problemas de la vesícula biliar.

La alimentación también desempeña un papel importante en la función del páncreas, por tanto debe considerar su alimentación para reducir el riesgo de desarrollar enfermedades relacionadas con este órgano. A continuación, hablo sobre los alimentos y bebidas que debe evitar para mantener su páncreas saludable, así como los nutrientes que podrían ayudar a mejorar la salud de su páncreas y sus mejores fuentes de alimentos.

4 alimentos que debe evitar para preservar la salud del páncreas

Ciertos alimentos y bebidas requieren más enzimas para que se puedan digerir o insulina para mantener equilibrados los niveles de azúcar en la sangre, lo que significa más trabajo para el páncreas. Con el tiempo, esto podría dañar de manera permanente el órgano y ponerlo en riesgo de desarrollar enfermedades relacionadas. Estos son algunos de los alimentos y bebidas que pueden afectar el páncreas, por lo que debe eliminarlos:

1. Alcohol. El páncreas es uno de los principales órganos que se ven afectados por el consumo de alcohol. De hecho, de acuerdo con un estudio publicado en World Journal of Gastroenterology, el consumo excesivo de alcohol representa alrededor del 70 % de los casos de pancreatitis. También se descubrió que las personas que han bebido al menos cuatro o cinco vasos de alcohol al día durante más de 5 años tienen un riesgo mayor, independiente del tipo de alcohol que consumieron. Un artículo en el sitio web Medscape explica:

“El páncreas metaboliza el alcohol y provoca estrés oxidativo en la glándula; también promueve la síntesis de enzimas digestivas pancreáticas y desestabiliza las membranas intracelulares, lo que predispone a la glándula a la autodigestión”.

Dicho esto, evite el consumo del alcohol y manténgase hidratado con agua, ya que la investigación descubrió que la deshidratación puede causar pancreatitis aguda.

2. Comida azucarada. De acuerdo con el American Journal of Clinical Nutrition, el consumo frecuente de alimentos y bebidas con alto contenido de azúcar, incluyendo refrescos, jugos de frutas endulzados e incluso azúcar añadida en el café, el té o los cereales, podría aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de páncreas “al inducir hiperglucemia posprandial frecuente, aumentar la demanda de insulina y disminuir la sensibilidad a la insulina”.

3. Carbohidratos refinados. Los carbohidratos refinados, que se encuentran en pasteles, pastas, pan, arroz, cereales para el desayuno y pizza, se metabolizan en glucosa en su cuerpo. Comer demasiado de estos alimentos sobrecarga al páncreas, ya que bombea más insulina. Un estudio en Annals of Epidemiology destaca que cuantos más alimentos con alto índice glucémico coma, mayor será su riesgo de desarrollar cáncer de páncreas.

4. Alimentos procesados y comida rápida. Si sigue una dieta occidental, que por lo general consiste en alimentos procesados cocinados en aceites vegetales, es probable que consuma demasiadas grasas omega-6, lo que aumenta el riesgo de que el páncreas se inflame y desarrolle cáncer.

Las comidas rápidas, como el pollo frito, donas y las papas fritas, también podrían contener niveles muy altos de grasas trans, que promueven la inflamación, interfieren con la señalización de la insulina y aumentan el riesgo de desarrollar diabetes y obesidad, todos los cuales son factores de riesgo de pancreatitis.

8 nutrientes que podrían ayudar a mantener un páncreas saludable

Para gozar de buena salud es esencial comer sano, en especial si desea mantener una función normal del páncreas o controlar los síntomas de una enfermedad preexistente. Agregue las siguientes fuentes alimentarias de estos nutrientes a su alimentación para optimizar la salud del páncreas:

1. Grasas omega-3. A los pacientes con pancreatitis a menudo se les advierte que no coman grasas, pero recuerde que las grasas siguen siendo una parte esencial de sus necesidades nutricionales. No todas las grasas son malas, por lo que, en lugar de eliminarlas por completo de su alimentación, solo debe tener en cuenta los tipos de grasas que consume.

Como se mencionó, se deben evitar las grasas trans y los alimentos ricos en omega-6. En su lugar, coma alimentos que sean ricos en ácidos grasos omega-3, en particular fuentes de origen marino como el salmón salvaje de Alaska, las sardinas y el aceite de kril. Los estudios han demostrado que consumir ácidos grasos omega-3 podría ayudar a reducir el riesgo de desarrollar cáncer de páncreas. Se descubrió que las grasas omega-3 en pacientes con pancreatitis aguda ayudan a disminuir la inflamación, el daño tisular crónico, la mortalidad, las complicaciones infecciosas y la duración de la estancia hospitalaria.

2. Aceite MCT. Los triglicéridos de cadena media (MCT), que puede obtener del aceite MCT, son otra buena fuente de grasas saludables para las personas que buscan mejorar la salud del páncreas. Lo que hace que esto sea beneficioso para el páncreas es que evita los requisitos habituales para la absorción de grasa, ya que su cuerpo puede absorberla muy rápido sin la necesidad de enzimas pancreáticas o ácidos biliares, lo que ayuda a reducir la carga en su páncreas.

3. Vitamina C. Las propiedades antioxidantes de la vitamina C podrían beneficiar a los pacientes con pancreatitis aguda, ya que ayuda a bloquear la peroxidación de lípidos en plasma y mejora la función inmunológica celular. Como lo sugirió un estudio publicado en Scientific Reports, consumir mucha vitamina C podría ayudar a reducir el riesgo de cáncer de páncreas al reducir la inflamación crónica y proteger contra el daño del ADN. Las frutas cítricas, fresas, pimientos, tomates y los vegetales crucíferos son algunas buenas fuentes de vitamina C.

4. Vitamina E. Los estudios han relacionado la deficiencia de vitamina E con un riesgo mayor de desarrollar pancreatitis. Además, un metaanálisis publicado en la revista Medical Science Monitor sugirió que optimizar los niveles de vitamina E podría ser un “factor protector para las poblaciones en riesgo de desarrollar cáncer de páncreas”. Algunas buenas fuentes de esta vitamina antioxidante incluyen almendras, semillas de girasol, hojas de betabel, col berza, espinacas y calabaza, entre otras.

5. Selenio. Este es un mineral antioxidante que se obtiene mejor de la carne de res y órganos de animales alimentados con pastura, frutos secos, mariscos, aves de corral camperas y huevos orgánicos de gallinas camperas. Un artículo publicado en Bioscience Reports sugiere que un consumo mayor de selenio podría ayudar a reducir el riesgo de desarrollar cáncer de páncreas, ya que ayuda a estimular la reparación del ADN, induce la apoptosis e inactiva los radicales libres.

6. Betacaroteno y betacriptoxantina. De acuerdo con un estudio publicado en el International Journal of Food Sciences and Nutrition, un consumo mayor de estos carotenoides se “relacionó con un menor riesgo de desarrollar cáncer de páncreas”. Las fuentes más ricas de betacaroteno incluyen frutas y vegetales de color amarillo, naranja y verde, como zanahorias, calabazas y vegetales de hoja verde. Mientras tanto, la beta-criptoxantina por lo general se encuentra en frutas, como mandarinas, naranjas y caquis.

7. Magnesio. Las investigaciones demostraron que aumentar los niveles de este mineral podría ser una prevención primaria y beneficiosa contra el cáncer de páncreas. Las personas que ya padecen pancreatitis también podrían beneficiarse de un mayor consumo de magnesio, ya que la deficiencia de magnesio es común en los pacientes con la enfermedad crónica. Algunas buenas fuentes de este mineral incluyen nibs de cacao sin procesar, aguacates, semillas y frutos secos, pescado graso y vegetales de hojas verdes, como espinacas, acelgas, brócoli y col rizada.

8. Vitamina B6 y folato. Un estudio publicado en el European Journal of Clinical Nutritionrelacionó el alto consumo de folato con un riesgo 69 % menor de desarrollar cáncer de páncreas. Cuando se combinan con la vitamina B6, estos dos nutrientes pueden reducir aún más el riesgo hasta en un 76 %. Algunas de las mayores fuentes de folato incluyen la espinaca, hígado, coles de Bruselas y los espárragos. La vitamina B6, por otro lado, se encuentra en el hígado de pollo, el salmón salvaje de Alaska y las frutas y vegetales como las espinacas, plátanos, zanahorias y los aguacates.

El efecto del ayuno para regenerar su páncreas

Además de comer los alimentos correctos, programar el consumo de alimentos también podría ayudar a optimizar la salud del páncreas. De acuerdo con un estudio con animales publicado en la revista Cell, una alimentación que simulaba el ayuno ayudó a regenerar una célula llamada célula beta impulsada por Ngn3 en el páncreas, que es la responsable de detectar el azúcar en la sangre y producir insulina. De acuerdo con el Dr. Valter Longo, uno de los coautores del estudio e investigador y director del Instituto de Longevidad de la Universidad del Sur de California (USC):

“Nuestra conclusión es que al hacer que los ratones lleguen a un estado extremo y luego regresarlos, privándolos de hambre y luego alimentándolos de nuevo, las células del páncreas se activan para usar algún tipo de reprogramación del desarrollo que reconstruye la parte del órgano que ya no funciona”.

La alimentación que simula el ayuno tiene como objetivo imitar los efectos beneficiosos del ayuno solo con agua, como la producción de cetonas, la activación de células madre, la autofagia y más. Sin embargo, este método es más fácil y seguro de implementar, ya que aún puede disfrutar de sus comidas, solo tiene que restringir su consumo de calorías a 800 a 1100 calorías por día durante cinco días cada mes. Si planea emplear este protocolo, le recomiendo primero consultarlo con su médico para obtener orientación correcta.


Fuentes y Referencias

Imagen de congerdesign en Pixabay

Importaciones de maíz transgénico o Soberanía Alimentaria

Por Viridiana Lázaro Lembrino, Milenio, 11 de diciembre de 2022.

El decreto presidencial que marca el fin del glifosato y el maíz transgénico en nuestro país es un hito y el primer paso para transformar nuestro sistema agroalimentario y debe servir para impulsar el cambio de modelo agrícola; de uno agroindustrializado basado en agroquímicos dependiente de las empresas transnacionales como Bayer-Monsanto, a uno agroecológico que ofrece soluciones a problemas de fertilidad de suelos y plagas locales, permite diversificar los cultivos, proteger la biodiversidad y la salud de las campesinas, campesinos y personas consumidoras.

A través de la regeneración de suelos y el uso de técnicas como el manejo de arvenses o la implementación del uso de bioinsumos que promueve la agroecología, se pueden tener suelos sanos, aumentar los rendimientos en la producción, hacer frente a las amenazas del cambio climático y ofrecer alimentos nutritivos y de bajo impacto ambiental a las y los consumidores.

Actualmente, en México nos encontramos en un momento de cambios decisivos, cambios de raíz que están tocando intereses económicos muy grandes y justo por eso es que el gobierno federal no debe retroceder ni ceder ante las presiones de Estados Unidos. La eliminación del glifosato y los transgénicos es una tendencia mundial, varios países han decidido ponerle fin al uso de este herbicida, tal es el caso de Austria,varias ciudades de Estados Unidos, Argentina, Canadá, Escocia, España y Nueva Zelanda, entre otras. Esto es debido a que el glifosato tiene potencial cancerígeno tal como lo demuestran los más de mil estudios científicos que la Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC por sus siglas en inglés), de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revisó para clasificarlo como probable carcinógeno en humanos. Asimismo, el maíz transgénico ha demostrado tener efectos negativos en la salud; las proteínas transgénicas pueden desencadenar reacciones alérgicas en humanos y ciertas moléculas presentes en el maíz transgénico actúan como radicales libres y promueven el estrés oxidativo, asociado con diversas enfermedades crónicas y degenerativas, como el cáncer y la diabetes.

Desde el inicio empresas transnacionales que promueven la agricultura industrial han realizado acciones en contra del decreto, como los más de 26 juicios de amparo en contra del mismo o las campañas de marketing tomando en cuenta únicamente argumentos económicos que benefician a unos cuantos.

En ese contexto, senadores de Estados Unidos han pedido a México replantear la prohibición de las importaciones de maíz transgénico, apelando al tratado de libre comercio (T-MEC).Debido a esta situación, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo una reunión con el secretario de estado Antony Blinken y la secretaria de Comercio de Estados Unidos, Gina Raimondo hace unos días. Pero las negociaciones no terminan ahí ya que, esa misma semana, la secretaria de economía, Raquel Buenrostro, acudió a reuniones para continuar las negociaciones del T-MEC.

Si bien México es autosuficiente en maíces blancos (híbridos y nativos) que son los que se usan en la alimentación mexicana, el maíz amarillo transgénico se utiliza principalmente para abastecer a la agroindustria y a la alimentación del ganado. Las industrias de alimentos procesados suponen graves problemas de salud y sobrepeso en la población.

Debe quedar claro que México no está prohibiendo las importaciones de maíz amarillo a Estados Unidos per se, lo que se busca es evitar que las mexicanas y los mexicanos consuman transgénicos; y México está en todo su derecho de velar por los derechos humanos de la población. Además, las y los agricultores estadounidenses son capaces de producir maíz que no sea genéticamente modificado a precios comparables, de acuerdo a una investigación de una red de productores en Estados Unidos (spectrum Non-GMO) por lo que el decreto podría alentar el desarrollo de un mercado sin Organismos Genéticamente Modificados (OGMs) en los Estados Unidos para el maíz no transgénico, algo que los consumidores estadounidenses han estado pidiendo desde hace mucho tiempo.

El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador debe defender la soberanía alimentaria de México, mantenerse firme y no ceder ante las presiones de Estados Unidos, y las corporaciones agroindustriales que buscan mantener el statu quo del cual solo unas pocas empresas se ven beneficiadas.

Maíz, ombligo mexicano

Por Omar Vidal, El Universal, 11 de diciembre de 2022.

“Lo mascaron los dioses y lo pusieron en nuestra boca para robustecernos”*

Cuenta la leyenda del México prehispánico que en tiempos remotos cinco soles aparecieron y de ellos cuatro desaparecieron.

El primer Sol, nahui ocellotl (4 tigre), duró 676 años y a los primeros moradores los devoraron los tigres. El Sol nauhuecatl (4 viento) fue de 364 años y a los segundos moradores se los llevó el viento y se volvieron monas. El Sol nahui quiyahuitl (4 lluvia) fue de 312 años y a los terceros moradores los quemó el fuego que llovió y se volvieron gallinas. Y el Sol nahui atl (4 agua) duró 676 años y los que por cuarta vez moraron se anegaron y se volvieron peces, porque llovió 52 años.

Antes de la creación del quinto Sol, naollin (4 movimiento)—en el que hoy moramos— Quetzalcóatl (la Serpiente Emplumada), convertido en hormiga negra, siguió a una hormiga colorada que a regañadientes le reveló cómo llegar a Tonacatépetl o Montaña de los Mantenimientos. Allí recolectaron el maíz desgranado que Quetzalcóatl trajo consigo para asegurar el sustento de los hombres que acababa de crear.

Pensar en el maíz es imaginar Aztlán, México-Tenochtitlan. Es vivir la milpa nacional, nuestra esencia e idiosincrasia. Porque no hay mesa mexicana sin tortillas. Porque el maíz es lo íntimo, lo cotidiano, lo sagrado. La tortilla como alimento vivificador de las tropas insurgentes—acompañada de teporingos, armadillos, jumiles, charales o quelites—y el maíz como testigo y protagonista de la Revolución Mexicana.

El maíz como poder religioso, cultural, político, económico. El maíz, fruto de los experimentos e ingeniería genética de nuestros antepasados que hace 10,000 años domesticaron a su pariente silvestre cercano—el teocintle. El maíz como sostén de los millones de pequeños y medianos productores y sus familias que hoy lo continúan manejando, cultivando y seleccionando para aportar 75% de la producción nacional.

El maíz (Zea mays, del griego zeo = vivir), pasto de noches largas en donde la divinidad, la leyenda y la ofrenda milenaria se esconden entre hojas enrolladas al tallo del que brota la mazorca—el olote cubierto por filas de granos blancos.

Pero las 59 razas de maíces nativos de México tienen granos con muchas gamas de colores y de formas. Los hay azules, negritos, conejos, anchos, bofos, blandos, cónicos, cristalinos, dulces, tabloncillos y reventadores. Siete razas–las palomeras–nos regalan las milenarias momochtli, también conocidas como palomitas de maíz en este quinto Sol (4 movimiento).

El maíz que comemos–tierno o maduro–en tortillas, tacos, quesadillas, sopes, chalupas, guaraches, corundas, chilaquiles, enchiladas, gorditas, tlacoyos, sopa de tortilla, itacates, tamales, pozole, tlayudas, panuchos, pinole, esquiles y huitlacoche. El maíz que bebemos–frío o caliente–como atole, tejuino, téjate, pozol, tascalate, guarapo, cacapote, chorote, piznate, chilatole, pozol, tanchuca, taxcalate y batari.

La planta de maíz en la que cohabitan las inflorescencias de lo femenino y lo masculino. La milpa como homenaje a la fertilidad, la identidad, la diversidad, la cultura y la innovación tecnológica. El maíz, orgullo y símbolo de resistencia contra propios y extraños. El maíz de los nahuas, mayas, zapotecas, olmecas, mixtecas, purépechas, totonacas, mazatecas, chinantecas, zoques y muchos otros pueblos originarios.

El maíz, nuestro ombligo—y México centro de origen, domesticación y diversificación de estos granos que los dioses mascaron y pusieron en nuestra boca para robustecernos.

*Códice Chimalpopoca: Anales de Cuauhtitlán y Leyenda de los Soles. UNAM. Traducción del náhuatl por Primo Feliciano Velázquez.
Tercera edición 1992 UNAM IIH – Códice Chimalpopoca. Anales de Cuauhtitlan y Leyenda de los Soles

Imagen de Hawksky en Pixabay