La obesidad infantil es común en las hospitalizaciones por COVID-19

Por Mercola, 07 de enero del 2021.

El sobrepeso fue el factor más común en el 22 % de los niños que fueron hospitalizados con COVID-19, según un estudio publicado en Jama Pediatrics. En la investigación participaron 50 niños hospitalizados con COVID-19 entre el 1 de marzo y el 15 de abril de 2020, en un hospital infantil de la ciudad de Nueva York.

La obesidad también fue un problema subyacente en los niños con COVID-19 que necesitaban ventilación mecánica. Los investigadores concluyeron que la gravedad de la infección aumentaba con la obesidad.

De acuerdo con los CDC, cerca de 13.7 millones de niños y adolescentes padecen obesidad en los Estados Unidos. 

FUENTE:  Becker’s Hospital Review 

El ajenjo inhibe el SARS-CoV-2

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 07 de enero del 2021.

HISTORIA EN BREVE

  • Un tratamiento antipalúdico elaborado con la planta Artemisia annua (Ajenjo dulce) parece prometedor para el tratamiento contra el COVID-19
  • El medicamento artesunato, que contiene dos compuestos que se encuentran en la Artemisia annua: artemisia y dihidroartemisinina, es un tratamiento de primera línea para la malaria
  • En un reciente estudio in vitro se demostró que tanto el pretratamiento como el tratamiento con extractos de artemisia, artemisia sintética y el medicamento artesunato fueron capaces de inhibir la infección por SARS-CoV-2. Sin embargo, el artesunato fue el más potente en términos de tratamiento y, desde una perspectiva clínica, podría ser el único que vale la pena investigar
  • El mecanismo de acción del artesunato contra el SARS-CoV-2 aún se desconoce, pero la artemisia tiene actividad antiviral confirmada
  • La Organización Mundial de la Salud se opuso a los productos a base de ajenjo y advirtió que su uso puede reforzar las cepas de parásitos de la malaria resistentes a los medicamentos. Por esta razón, las personas que viven en áreas propensas a la malaria deben tener cuidado al usar este remedio vegetal

Hoy en día, se considera y evalúa un segundo tratamiento antipalúdico por su eficacia contra el COVID-19. El tratamiento se realiza a partir de la planta Artemisia annua, que la mayoría de las personas la conocen como Ajenjo dulce o artemisia. Otros nombres para esta planta incluyen Annual Sagewort y Sweet Annie.

Las investigaciones realizadas durante las últimas décadas demostraron todos los beneficios de esta hierba medicinal, que se ha usado desde hace siglos en la medicina popular. En 2015, el científico chino Tu Youyou recibió un premio Nobel parcial de fisiología o medicina por descubrir la artemisia y la dihidroartemisinina, ya que ambas tienen potentes propiedades para combatir la malaria.

De acuerdo con la Universidad de Kentucky, “El medicamento más conocido contra la malaria es el artesunato, se desarrolló a partir de esos compuestos y todavía se utiliza como tratamiento de primera línea para la enfermedad”.

El Ajenjo podría ser un remedio contra el COVID-19

Cabe destacar que además de tener una larga historia de uso como antiparasitario eficaz, también tiene propiedades anticancerígenas. Además, la artemisia annua tiene actividad antiviral que podría ser ideal contra el SARS-CoV-2.

En un comunicado de prensa del 8 de abril de 2020, Mateon Therapeutics informó que “el ajenjo es muy potente para inhibir la capacidad del virus causante del COVID-19 (SARS-CoV-2) ya que evita que se multiplique y al mismo tiempo tiene un excelente índice de seguridad”.

Después de probar los efectos antivirales de la planta en un laboratorio durante un par de años, los investigadores de la Universidad de Kentucky, Dinamarca y Alemania, también analizan su uso para el tratamiento del COVID-19. De acuerdo con la Universidad de Kentucky:

“Sorprendentemente, los resultados demostraron que las hojas de la planta, cuando se extraen con etanol o agua destilada, proporcionan más actividad antiviral que el medicamento en sí, lo que significa que un café o té mezclado con Artemisia annua podría ser mejor que tomar el medicamento”.

Con base en estos hallazgos, los investigadores decidieron analizar el ajenjo en pacientes diagnosticados con COVID-19. UK HealthCare implementó algunos de los primeros estudios en humanos, destinados a investigar tanto el extracto mezclado con café y té, como el medicamento artesunato.

Los investigadores de la Universidad de Kentucky fundaron una empresa llamada ArtemiFlow para desarrollar y fabricar el medicamento, en colaboración con el Centro de Investigación y Desarrollo del Tabaco de Kentucky. Una empresa afiliada llamada ArtemiLife, comercializa té y café Artemisia para recaudar fondos para la investigación.

El mecanismo de acción aún es desconocido

En cuanto a su mecanismo de acción, aún quedan por descubrir dichos detalles. C&EN explica:

“Al contrarrestar la malaria, la artemisia aprovecha el gusto del parásito por la hemoglobina en la sangre de su huésped. A medida que el parásito digiere la hemoglobina, libera el complejo hemo de porfirina de hierro de la proteína.

Debido a que este hemo es tóxico para el parásito, el organismo convierte el complejo en una forma cristalina más benigna. “Pero la artemisia corrompe esta vía de desintoxicación del hemo”, dice Paul O’Neill, químico medicinal de la Universidad de Liverpool.

Sin embargo, si la artemisia llegará a tener algún efecto contra el SARS-CoV-2, es probable que dependa de un mecanismo diferente del que usa contra el parásito de la malaria, dice el investigador de la malaria de Harvard, Dyann F. Wirth”.

Un estudio in vitro reporta resultados positivos

Un estudio in vitro que se publicó en el servidor de prepublicación bioRxiv, el 5 de octubre de 2020, observó la eficacia de los tratamientos hechos con artemisia contra el SARS-CoV-2, donde se obtuvieron resultados prometedores.

Tanto el pretratamiento como el tratamiento con extractos de artemisia, artemisia sintética y el medicamento artesunato fueron capaces de inhibir la infección por el SARS-CoV-2. Sin embargo, el artesunato fue el más potente en términos de tratamiento y, desde una perspectiva clínica, podría ser el único que valga la pena investigar.

El estudio fue una colaboración entre investigadores de Alemania, Dinamarca y Hong Kong, dirigido por Kerry Gilmore, Ph.D., del Instituto Max Planck de Coloides e Interfaces en Potsdam, Alemania.

Se analizaron tres extractos de artemisia, así como artemisia sintética pura, artesunato y arteméter. Durante el análisis inicial de la actividad antiviral, se utilizó una cepa alemana del SARS-CoV-2 que se obtuvo de Munich.

Más tarde, durante la fase de concentración-respuesta del ensayo, utilizaron una cepa danesa del SARS-CoV-2 de Copenhague. Se dice que estas dos cepas están “más relacionadas con la mayoría de las cepas del SARS-CoV-2 que circulan en todo el mundo que la cepa de Wuhan”.

En resumen, descubrieron que tanto el pretratamiento como el tratamiento con extractos de artemisia, artemisia sintética y el medicamento artesunato fueron capaces de inhibir la infección por el SARS-CoV-2 de las células Vero E6 y las células Huh7.5 del hepatoma humano. Dicho esto, el artesunato fue el más potente en términos de tratamiento y, desde una perspectiva clínica, podría ser el único que vale la pena investigar.

La Organización Mundial de la Salud advierte sobre su uso

Aunque el mundo está ansioso por agregar otro remedio a su lista de Tratamientos para el COVID-19, la Organización Mundial de la Salud se opuso a los productos a base de artemisia. En un artículo del 27 de mayo de 2020, C&EN informó:

“Uno de los defensores más destacados del uso del remedio herbal contra el nuevo coronavirus es el presidente de Madagascar, Andry Rajoelina, quien ha promocionado Covid-Organics, un tónico que contiene A. annua que desarrolló el Instituto Malgache de Investigación Aplicada.

Pero los funcionarios de salud están muy preocupados por la promoción y el uso de estos remedios herbales por tres razones importantes. En primer lugar, no existe evidencia de que los extractos de A. annua pueden prevenir o curar el COVID-19.

En segundo lugar, las preparaciones de A. annua como tés, tónicos o cápsulas de hierbas contienen compuestos bioactivos y artemisia que pueden causar efectos secundarios como mareos, problemas de audición y vómitos.

En tercer lugar, y quizás lo más preocupante de todo, es que el uso generalizado de extractos de hierbas de A. annua podría reforzar las cepas de parásitos de la malaria resistentes a los medicamentos, como Plasmodium falciparum.

Para las personas que viven en regiones donde la malaria es endémica, la exposición a dosis subterapéuticas de artemisia en A. annua podría ser suficiente para matar algunos de los parásitos en sus cuerpos. Al eliminar los parásitos débiles se tiene más espacio para que proliferen los parientes resistentes a los medicamentos, lo que hace que los ACT vitales [terapias combinadas hechas de artemisia] sean ineficaces”.

De acuerdo con Pascal Ringwald, quien dirige la unidad de respuesta y resistencia a los medicamentos del Programa Mundial contra la Malaria de la OMS, la resistencia a la artemisia es un problema importante en el sudeste asiático, donde la artemisia crece muy fácil y se usa demasiado.

Dicho esto, este riesgo será muy bajo para las personas en Estados Unidos y en muchos otros países occidentales donde la malaria es muy rara. De acuerdo con C&EN, “Los científicos entrevistados por C&EN están de acuerdo en que, si bien uso va en contra de las recomendaciones de la OMS, no corre el riesgo de acelerar la resistencia porque hay muy pocos casos de malaria en los Estados Unidos”.

Las autoridades del Reino Unido no recomiendan la vitamina D para el COVID

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 06 de enero del 2020.

HISTORIA EN BREVE

  • De acuerdo con la nueva guía del COVID-19 del Instituto Nacional para la Excelencia en la Salud y la Atención, Public Health England y el Comité Asesor Científico sobre Nutrición, no hay evidencia suficiente para apoyar la recomendación de tomar vitamina D oral por la única razón de prevenir o tratar COVID-19
  • Aunque el panel acordó que los niveles bajos de vitamina D se relacionaron con resultados más graves de COVID-19, afirman que es imposible confirmar la causalidad debido a las inconsistencias entre los estudios y porque la deficiencia de vitamina D y las complicaciones de COVID-19 comparten muchos factores de riesgo
  • Con eso, regresan a las recomendaciones anteriores que se emitieron por funcionarios de salud británicos que, en noviembre de 2020, les recomendaron a las personas tomar suplementos de vitamina D este invierno para disminuir el riesgo de infecciones respiratorias, incluyendo el COVID-19
  • Aunque la nueva guía les recomienda a los británicos tomar un suplemento de vitamina D entre octubre y marzo, solo recomienda una dosis de 400 UIs al día, que es 10 veces menos de lo que la mayoría de las personas requeriría para gozar de buena salud y función inmunológica
  • Existe evidencia que sugiere que optimizar su nivel de vitamina D puede reducir su riesgo de COVID-19 y mejorar su resultado si se infecta

He escrito muchos artículos donde detallo el papel que desempeña la vitamina D en el COVID-19, desde cómo puede ayudar a prevenir la infección inicial, hasta cómo puede reducir el riesgo de complicaciones y muerte. Una de las razones por las que insisto en optimizar el nivel de la vitamina D para reducir los riesgos relacionados con esta infección es porque la evidencia es abrumadora.

Las autoridades sanitarias del Reino Unido desacreditan las afirmaciones sobre la vitamina D

Aunque las autoridades sanitarias del Reino Unido no están de acuerdo. De acuerdo con la nueva guía del COVID-19 del National Institute for Health and Care Excellence (NICE), Public Health England y el Scientific Advisory Committee on Nutrition (SACN), no hay evidencia suficiente que respalde la recomendación de tomar vitamina D por vía oral para prevenir o tratar el COVID-19.

Con eso, regresan a las recomendaciones anteriores que se emitieron por funcionarios de salud británicos que, en noviembre de 2020, les recomendaron a las personas tomar suplementos de vitamina D este invierno para disminuir el riesgo de infecciones respiratorias, incluyendo el COVID-19.

Es más, aunque la nueva guía les recomienda a los británicos tomar un suplemento de vitamina D entre octubre y marzo, solo recomienda una dosis de 400 UIs al día, que es 10 veces menos de lo que la mayoría de las personas requeriría para gozar de buena salud y función inmunológica.

Aunque el panel acordó que los niveles bajos de vitamina D se relacionaron con resultados más graves de COVID-19, afirman que es imposible confirmar la causalidad debido a las inconsistencias entre los estudios (como la dosis, entorno, poblaciones, duración y los resultados) y porque la deficiencia de vitamina D y las complicaciones de COVID-19 comparten muchos factores de riesgo.

De acuerdo con el profesor Ian Young, que preside la SACN, “esta revisión confirma que en la actualidad no hay suficiente evidencia para determinar que existe una relación causal entre la vitamina D y el COVID-19”.

Sin embargo, si la deficiencia de vitamina D y el COVID-19 comparten los mismos factores de riesgo, ¿no tendría más sentido recomendarles a las personas atender su deficiencia de vitamina D en lugar de usar esto como una justificación de por qué no se pueden recomendar los suplementos con vitamina D?

Es difícil imaginar que los científicos preocupados por la salud pública tengan este tipo de ideología, en especial cuando se consideran que los suplementos de vitamina D, en cualquier dosis, son necesarios para que su nivel supere los 40 ng/ml (100 nmol/L) (y no empeorarán su salud). No hay ningún inconveniente.

La vitamina D es importante para una función inmunológica óptima

En el video anterior, el Dr. Roger Seheult revisa el funcionamiento y beneficios de la vitamina D, tanto para las infecciones respiratorias como para al COVID-19.

Es importante destacar que la vitamina D es una hormona esteroidea que puede atravesar las membranas celulares hasta el núcleo y controlar la expresión de los genes. Entonces, además de ser una vitamina que se requiere como cofactor. De hecho, puede modificar el comportamiento y funcionamiento de sus células.

Los receptores de vitamina D se encuentran en muchos tejidos y células diferentes, incluyendo las células inmunológicas. Esto significa que la vitamina D desempeña un papel importante en su función inmunológica. Si no tiene la suficiente cantidad de vitamina D, afectará su sistema inmunológico, lo que a su vez lo hará más susceptible a infecciones de todo tipo. Como señaló Seheult, la vitamina D:

  • Estimula “la respuesta inmunológica innata, que brinda protección de primera línea contra agentes infecciosos”
  • Aumenta la expresión de péptidos antimicrobianos en sus monocitos y neutrófilos, los cuales desempeñan un papel muy importante en el COVID-19
  • Mejora la expresión de un péptido antimicrobiano llamado catelicidina humana, “que es muy importante en las defensas del huésped contra patógenos del tracto respiratorio”

Beneficios de la Vitamina D para el COVID-19

Aunque Seheult también revisa varios estudios que analizan la vitamina D en relación con enfermedades respiratorias diferentes al COVID-19, las investigaciones específicas del SARS-CoV-2 encontraron:

•El COVID-19 es mucho más común en personas con deficiencia de vitamina D — En un estudio, El 82.2 % de los pacientes con COVID-19 tenían deficiencia de vitamina D, en comparación con el 47.2 % de los controles poblacionales. (Los niveles promedio de vitamina D fueron 13.8 ± 7.2 ng/ml, en comparación con 20.9 ± 7.4 ng/ml en los controles).

También descubrieron que los niveles de vitamina D en sangre se correlacionaban de forma inversa con los niveles de dímero D (una medida de la coagulación sanguínea). Muchos pacientes con COVID-19 tienen niveles elevados de dímero D, los cuáles se relacionan con los coágulos de sangre.

•El estado de vitamina D influye en la gravedad del COVID-19 — Los pacientes con COVID-19 que tienen niveles más altos de vitamina D tienden a tener una enfermedad más leve y mejores resultados. Un estudio descubrió que el riesgo de complicaciones y muerte debido al COVID-19 prácticamente desaparecía cuando los niveles de vitamina D estaban por encima de los 30 ng/mL (75 nmol/L).

En otro estudio, los pacientes con COVID-19 con un nivel de vitamina D entre 21 ng/mL (50 nmol/L) y 29 ng/mL (75 nmol/L) tenían un riesgo de muerte 12.55 veces mayor que aquellos con un nivel superior a 30 ng/mL. Tener niveles inferiores a 20 ng/ml se relacionó con un riesgo de muerte 19.12 veces mayor.

Mi reseña científica titulada: “Evidence Regarding Vitamin D and Risk of COVID-19 and Its Severity“, publicada el 31 de octubre de 2020, también enumera datos de 14 estudios observacionales que demuestran que los niveles de vitamina D están inversamente correlacionados con la incidencia o gravedad del COVID-19.

Esto tiene sentido si se considera que la vitamina D regula la producción de citoquinas inflamatorias, que es una característica letal del COVID-19, y es un regulador importante de su sistema inmunológico. La desregulación del sistema inmunológico es otra característica de las complicaciones del COVID-19.

Seheult también revisa estudios que demuestran que los resultados del COVID-19 parecen estar relacionados con la exposición a los rayos UVB. Por ejemplo, en uno de esos estudios, descubrieron una marcada variación en la mortalidad que dependía de si los pacientes vivían por encima o por debajo de los 35 grados de latitud norte. Como señalaron los autores:

“La hipótesis no es que la vitamina D proteja contra la infección por SARS-CoV-2, sino que podría ser muy importante para prevenir la tormenta de citoquinas y el síndrome de dificultad respiratoria aguda que suele causar la muerte”.

Ahora, como señaló Seheult, también es posible que el COVID-19 sea causado por los bajos niveles de vitamina D que se observaron en estos pacientes. Esto fue revisado en una carta al editor titulada: “Vitamin D Deficiency in COVID-19: Mixing Up Cause and Consequence”, publicada en Metabolism: Clinical and Experimental, el 17 de noviembre de 2020, lo que encontraron fue que a medida que aumentaban los niveles de citoquinas plasmáticas en los pacientes con COVID-19, los niveles de vitamina D descendían.

•La vitamina D influye en el riesgo de infección — La vitamina D también se ha relacionado con una menor probabilidad de dar positivo al COVID-19.

El estudio observacional más grande hasta la fecha, que analizó los datos de 191 779 pacientes en Estados Unidos, descubrió que en los que tenían un nivel de vitamina D por debajo de los 20 ng/ml (deficiencia), el 12.5 % dio positivo para SARS-CoV-2, en comparación con el 8.1 % de los que tenían un nivel de vitamina D entre los 30 y 34 ng/ml (adecuado) y 5.9 % de los que tenían un nivel óptimo de vitamina D de 55 ng/ml o más. De acuerdo con los autores:

“La positividad del SARS-CoV-2 tiene una relación estrecha e inversa con los niveles circulantes de 25 (OH) D, una relación que persiste sin importar la latitud, raza, etnia, sexo y rangos de edad”.

Cómo mejorar la absorción de vitamina D

La dosis específica que se requiere para mantener un nivel óptimo de vitamina D puede variar en cada persona dependiendo de muchos factores, incluyendo la edad y el peso. Su salud intestinal también puede desempeñar un papel importante en qué tan bien absorbe la vitamina D que toma, según una investigación reciente.

Cuando tiene un intestino sano, las bacterias beneficiosas producen butirato al descomponer la fibra alimenticia. El butirato, a su vez, ayuda a incrementar el nivel de vitamina D, por lo que cuanto más butirato tenga, más vitamina D podrá absorber su cuerpo.

Otro factor que puede influir en su absorción de vitamina D es su nivel de magnesio. El magnesio es necesario para convertir la vitamina D en su forma activa. De acuerdo con una revisión científica publicada en 2018, es posible que hasta el 50 % de las personas que toman suplementos de vitamina D no obtengan ningún beneficio adicional ya que la vitamina D se almacena en su forma inactiva, ya que tienen niveles insuficientes de magnesio.

La investigación más reciente de GrassrootsHealth demuestra que necesita un 146 % más de vitamina D para alcanzar un nivel en sangre de 40 ng/ml (100 nmol/L) si no toma magnesio suplementario, en comparación con tomar su vitamina D con al menos 400 mg de magnesio por día.

Su consumo de vitamina K2 también puede afectar la dosis de vitamina D necesaria. De acuerdo con GrassrootsHealth, “tomar magnesio en combinación con vitamina K2 tiene un mayor efecto sobre los niveles de vitamina D”, y “mientras que las personas que toman suplementos de magnesio y vitamina K2 tienen mayores niveles de vitamina D que las que toman magnesio, vitamina K2 o ninguno”.

Los datos de casi 3 000 personas revelaron que se necesitaba un 244 % más de vitamina D por vía oral para que el 50 % de la población alcanzara un nivel de vitamina D de 40 ng/ml (100 nmol/L) si no tomaban magnesio y vitamina K2 al mismo tiempo.

Proteja su sistema inmunológico con vitamina D

En resumen, si no puede exponerse a los rayos del sol en cantidades suficientes para mantener un nivel de vitamina D en sangre de 40 ng/ml (100 nmol/L) a 60 ng/ml (150 nmol/L), se recomienda tomar un suplemento de vitamina D3. Solo recuerde que el factor más importante aquí es su nivel en sangre, no la dosis, por lo que antes de comenzar, debe realizarse la prueba para conocer su nivel.

Si vive en el hemisferio norte, ahora es el momento de verificar su nivel de vitamina D y comenzar a tomar medidas para aumentarlo si está por debajo de los 40 ng/ml (100 nmol/L).

Esto le ayudará a determinar su dosis ideal, ya que puede variar de una persona a otra. También recuerde que puede minimizar sus necesidades de vitamina D al asegurarse de consumir suficiente magnesio y vitamina K2. Estoy convencido de que optimizar su nivel de vitamina D puede ser de gran ayuda para minimizar sus posibilidades de contraer una infección respiratoria, ya sea un resfriado común, influenza estacional o COVID-19.

“Si vive en el hemisferio norte, ahora es el momento de verificar su nivel de vitamina D y comenzar a tomar medidas para aumentarlo si está por debajo de los 40 ng/ml (100 nmol/L)”. Los expertos recomiendan un nivel de vitamina D entre 40 y 60 ng/mL (100 a 150 nmol/L).

Una forma fácil y económica de medir su nivel de vitamina D es ordenar el Kit de prueba de vitamina D de GrassrootsHealth.

Una vez que conozca su nivel actual de vitamina D, use la Calculadora de vitamina D de GrassrootsHealth para determinar cuánta vitamina D podría necesitar para alcanzar su nivel objetivo. Vuelva a analizar su nivel de vitamina D en tres o cuatro meses para asegurarse de que ha alcanzado su objetivo. Si es así, sabrá que tomó la dosis correcta. Si todavía tiene niveles bajos (o ha alcanzado un nivel superior a 80 ng/mL), deberá ajustar su dosis según lo requiera y volver a realizarse la prueba en otros tres o cuatro meses.

La vacuna contra el COVID dio positivo en las pruebas del VIH

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 05 de enero del 2020.

HISTORIA EN BREVE

  • En la urgencia por producir una vacuna eficaz contra el COVID-19, se descartó una vacuna desarrollada en la Universidad de Queensland, Australia, cuando los científicos descubrieron que los participantes desarrollaron una prueba falsa positiva para el VIH después de recibirla
  • Los investigadores que utilizaron el vector de adenovirus recombinante tipo 5 (Ad5) hace 10 años para una vacuna contra el VIH-1 advirtieron sobre el uso del mismo proceso para el desarrollo de una vacuna contra el COVID-19, ya que aumentaba el riesgo de infección por VIH
  • Es difícil desarrollar una vacuna para los coronavirus, ya que el proceso siempre ha fracasado porque aumenta el riesgo de enfermedad grave cuando se expone al virus
  • Los datos actuales demuestran que no es necesario lanzar una ley que obligue la vacunación masiva; las empresas farmacéuticas están protegidas de responsabilidad por daños causados por las vacunas. Analice sus riesgos y beneficios personales antes de tomar una decisión

Existen muchas vacunas contra el COVID-19 que están en desarrollo y algunas han llegado a ensayos en humanos. Uno de los últimos desafíos que se demostraron de algunas vacunas es la relación que tienen con el VIH, ya sea al provocar una prueba de falso positivo o aumentar el riesgo de infección por VIH.

El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) provoca el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA). El VIH es un retrovirus, que algunos expertos creen que es la base de varias enfermedades crónicas, incluyendo el síndrome de fatiga crónica, la encefalomielitis miálgica crónica (EM) y el autismo. Aunque algunos retrovirus pueden infectar sus células reproductivas, y por lo tanto se transmiten a su descendencia, no se cree que el VIH tenga esa capacidad.

El primer caso de VIH se reportó en 1981. Durante los siguientes 35 años, la infección generó pánico en algunas comunidades, aumentó el riesgo de muerte y generó muchos programas de salud pública. A medida que los científicos tuvieron una mejor comprensión de la infección, desarrollaron mejores métodos de tratamiento para las personas infectadas.

En 2019, los cirujanos del Johns Hopkins Medical Center en Estados Unidos, realizaron el primer trasplante de riñón de un donante vivo con VIH a un receptor con VIH. El tiempo, esfuerzo y la ciencia dieron lugar al tratamiento, ya que ahora el VIH se considera como una enfermedad crónica y no como una sentencia de muerte.

Australia rechaza la vacuna después de falsos positivos en las pruebas del VIH

En la urgencia por producir una vacuna eficaz contra el COVID-19, se descartó una vacuna desarrollada en la Universidad de Queensland, Australia, cuando los científicos descubrieron que los participantes desarrollaron una prueba falsa positiva para el VIH después de recibirla. Esto afectó a un pedido planificado de $ 750 millones para la vacuna.

Los investigadores creyeron que la vacuna parecía segura y efectiva, pero sugirieron que la prueba de falso positivo para el VIH debilitaría la confianza del público. El primer ministro Scott Morrison habló con los reporteros y dijo:

“No podemos crear desconfianza y menos ahora, como nación, con una buena cartera de vacunas, podemos tomar estas decisiones para proteger mejor a los australianos”.

The New York Times llama a esto un “paso en falso” “Eso puede ocurrir de forma inevitable cuando los científicos, durante una pandemia, aceleran el proceso habitual de muchos años para desarrollar vacunas sólo en cuestión de meses”.

La vacuna se desarrolló en colaboración entre la Universidad de Queensland y la empresa de biotecnología CSL. El problema eran dos fragmentos de proteína del VIH que los científicos utilizaron para producir una “pinza” molecular en la proteína Spike del coronavirus. La pinza estaba destinada a estabilizar el virus y permitir que el sistema inmunológico de una persona desarrollará anticuerpos de manera efectiva después de la exposición a la vacuna.

Aunque los investigadores pensaron que la vacuna de Queensland no corría ningún riesgo de infectar al voluntario con el VIH, la pinza hizo que el cuerpo de la persona produjera anticuerpos que las pruebas del VIH reconocieron como una respuesta positiva.

Para continuar con el desarrollo y uso de esta vacuna, sería necesario rediseñar la prueba del VIH actual para diferenciar entre los que dieron positivo y los que tenían el virus.

La vacuna de la Universidad de Queensland fue una de las que utilizaba una proteína que provocó una respuesta del sistema inmunológico humano. Estos tipos de vacunas se utilizaron y tienen un historial conocido, en comparación con las vacunas de ARNm más nuevas en desarrollo.

Los ejemplos de vacunas a base de proteínas incluyen las que se administran para la tosferina, Haemophilus influenzae tipo B y hepatitis B. Los científicos también utilizaron virus genéticamente modificados para incitar al sistema inmunológico a crear anticuerpos contra un patógeno. La técnica de modificación del adenovirus ha estado en desarrollo desde hace casi tres décadas en varias vacunas.

Advertencia, la vacuna contra el virus modificado podría aumentar el riesgo de contraer el VIH

Hoy en día, la idea es modificar un adenovirus, que normalmente causa un resfriado común, con genes del SARS-CoV2. Esto engaña al sistema inmunológico y le hace creer que ha sido infectado y luego producir anticuerpos contra la infección.

Los investigadores creen que los adenovirus son vectores excelentes con varias ventajas sobre otros virus, incluyendo la facilidad de manipulación genética y la capacidad de inducir respuestas robustas de células T y anticuerpos. Sin embargo, existen importantes inconvenientes al utilizar adenovirus en terapia génica y vacunas.

Los investigadores que usaron el vector de adenovirus recombinante tipo 5 (Ad5) hace 10 años para una vacuna contra el VIH-1 advirtieron sobre el uso del mismo proceso para el desarrollo de una vacuna COVID-19. En The Lancet se publicaron los desafíos que enfrentaron en dos ensayos en humanos con la vacuna contra el VIH-1 vectorizada con Ad5.

Los datos de ambos estudios sugirieron que la vacuna incrementó el riesgo de que los hombres contrajeran el VIH del medio ambiente, y que la infección era más probable después de recibir la vacuna. No se determinó el mecanismo de esta mayor susceptibilidad, pero estudios exploratorios posteriores sugirieron que la vacuna Ad5 promovió la reproducción del VIH en las células T CD4, lo que podría hacerlas más susceptibles a una infección por VIH.

Los resultados del ensayo Step demostraron que el riesgo de contraer el VIH era mayor en hombres no circuncidados que realizaban sexo anal sin protección con una pareja seropositiva con VIH. Los datos del estudio Phambili sugirieron que los hombres que eran heterosexuales y estaban vacunados, también tenían un mayor riesgo de infección.

Los resultados fueron tan convincentes que en 2014 los Institutos Nacionales de Salud reconocieron que las vacunas recombinantes Ad5 podrían tener un problema importante, ya que podrían “incrementar la susceptibilidad a la infección por VIH. Esto también cuestionó si el problema se extiende a algunos o todos los demás vectores recombinantes de adenovirus actualmente en desarrollo o bien, a otras vacunas basadas en vectores”.

El autor principal del artículo fue el Dr. Anthony Fauci. Quién está en “contra del uso adicional de Ad5 como vector en las vacunas contra el VIH”, según Forbes. Estas preocupaciones también fueron reiteradas por los investigadores de los estudios originales de la vacuna contra el VIH-1, quienes escribieron en The Lancet:

“De acuerdo con estos hallazgos, nos preocupa que el uso de un vector Ad5 para inmunizar contra el síndrome respiratorio agudo severo del coronavirus 2 (SARS-CoV-2) podría aumentar de manera similar el riesgo de contraer el VIH-1 entre los hombres que reciben la vacuna.

Tanto la pandemia del VIH como la del COVID-19 afectan de manera desproporcionada a las poblaciones más vulnerables a nivel mundial. Desplegar a nivel global una vacuna eficaz contra el SARS-CoV-2 significa que podría administrarse a personas en riesgo de infección por el VIH, lo que podría incrementar el riesgo de contraer el VIH-1”.

Las vacunas de emergencia contra el COVID podrían provocar efectos secundarios masivos

Los esfuerzos para vacunar contra otros coronavirus han demostrado serias preocupaciones desde hace varios años. Las vacunas desarrolladas para el coronavirus del síndrome respiratorio agudo severo (SARS-CoV), el coronavirus del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS-CoV) y el virus sincitial respiratorio (RSV) tendían a provocar una mejora dependiente de anticuerpos (ADE).

Esto significa que para algunas personas que recibieron la vacuna, tiene un efecto paradójico y aumenta el riesgo de una infección grave si se expone al virus. La vacuna mejora la capacidad del virus para ingresar a sus células, lo que da como resultado una enfermedad más grave.

Este proceso podría manifestarse de diferentes formas, que incluyen ADE e inflamación alérgica causada por inmunopatología Th2. Dado lo que se conoce hoy en día sobre el virus y el comportamiento en el cuerpo, algunos científicos argumentaron que el ADE es solo una patología de mejora inmunológica que podría causar una respuesta desregulada y potencialmente peligrosa a una vacuna contra el COVID-19.

En mayo de 2020 entrevisté a Robert Kennedy Jr., quien describió los peligros conocidos de las vacunas contra el coronavirus y resumió la historia del desarrollo de la vacuna contra el coronavirus. En 2002, después de tres brotes consecutivos de SARS, inició la investigación de vacunas. Diez años después, en 2012, científicos chinos, estadounidenses y europeos trabajaban en una vacuna contra el SARS y tenían alrededor de 30 candidatos prometedores.

De ellos, los cuatro mejores candidatos para las vacunas fueron hurones, que son el análogo más cercano a las infecciones pulmonares humanas. Aunque los hurones demostraron una respuesta de anticuerpos, que es la métrica utilizada para la licencia de vacunas, una vez que el virus los atacó, todos se enfermaron muy grave y murieron.

Lo mismo sucedió cuando intentaron desarrollar una vacuna contra el VSR en la década de 1960. El VSR es una enfermedad de las vías respiratorias superiores muy similar a la causada por los coronavirus. En ese momento, se saltaron las pruebas con animales y fueron de forma directa a las pruebas con humanos. Kennedy relata el experimento y dice:

“Lo probaron en 35 niños, y sucedió lo mismo. Los niños desarrollaron una respuesta positiva de anticuerpos, fuerte y resistente. Era perfecta [pero] cuando los niños estuvieron expuestos al virus natural, todos se enfermaron. Dos de ellos murieron. Renunciaron a la vacuna. Fue una vergüenza para la FDA y los NIH”.

Pfizer reconoció en su protocolo clínico que la mejora de la enfermedad de COVID-19 es un riesgo real después de algunas vacunas. A pesar de años de investigación y estrategias de desarrollo alternativo, persisten las preocupaciones sobre el ADE y, como explicó Kennedy, las vacunas contra el coronavirus son conocidas por crear una mejora inmunológica paradójica.

Los coronavirus producen dos tipos de anticuerpos

Los coronavirus producen más que anticuerpos neutralizantes. En su lugar, causan dos respuestas de anticuerpos en su cuerpo. Esta diferencia podría ser la razón por la que las vacunas para prevenir las infecciones por coronavirus han sido ineficaces y, a veces, peligrosas.

  • Los anticuerpos neutralizantes se unen al virus de una manera que bloquea la capacidad del patógeno para infectar sus células.
  • Los anticuerpos de unión (también conocidos como anticuerpos no neutralizantes) se producen durante una infección, pero no son capaces de prevenir una infección viral.

Los anticuerpos de unión también pueden causar una respuesta inmunológica anormal. Otra forma de ver esto es que, en lugar de protegerlo, la vacuna crea una respuesta anormal, lo que hace que su sistema inmunológico se vuelva contraproducente y desarrolle una enfermedad grave a causa de la infección.

Muchas de las vacunas actuales contra el COVID-19 que están en desarrollo utilizan ARNm para provocar una respuesta inmunológica al instruir a las células para que produzcan la proteína Spike del SARS-CoV-2. La idea es crear la proteína Spike para que su cuerpo produzca anticuerpos, sin enfermarlo en el proceso. La pregunta clave es, ¿cuál de los dos tipos de anticuerpos se produce en este proceso?

Analice sus riesgos y beneficios personales antes de tomar una decisión

Independientemente de cuán efectivas o ineficaces sean las vacunas contra el COVID-19, es probable que tenga que tomar la decisión de recibir una en poco tiempo. Las empresas atraviesan un proceso que por lo regular tarda años para garantizar alguna medida de seguridad.

De manera irónica, los datos que ahora tenemos ya no respaldan la orden judicial sobre las vacunas masivas, ya que, en las personas menores de 60 años, la letalidad por COVID-19 es menor que la gripe. Si tiene menos de 40 años, su riesgo de morir a causa del COVID-19 es solo del 0.01 %, lo que significa que tiene un 99.99 % de sobrevivir a la infección. Y eso podría mejorar aún más si es metabólicamente flexible y tiene niveles óptimos de vitamina D.

Por desgracia, a los participantes en los ensayos actuales de la vacuna COVID-19 y a las personas que ya la han recibido no se les informa sobre el riesgo que corren al recibir la vacuna, ni tampoco que podrían terminar con un caso de COVID-19 más grave, si se infectan con el virus. La velocidad a la que se producen y liberan las vacunas podría crear una segunda ola de complicaciones y muertes por intervenciones médicas.

Sin embargo, las compañías farmacéuticas no estaban dispuestas a seguir adelante con el desarrollo a menos que estuvieran protegidas de la responsabilidad si la vacuna producía lesiones. Como dijo un alto ejecutivo de AstraZeneca: “Esta es una situación única en la que nosotros, como empresa, no podemos correr el riesgo…”

Sin embargo, la industria está protegida por la Ley de Preparación para Emergencias y Preparación del Público (PREP) de 2005 que prohíbe las reclamaciones contra las empresas que desarrollan y lanzan productos para una emergencia de salud pública. La Corte Suprema también ha confirmado fallos que protegen a los fabricantes de vacunas, sin ningún respeto aparente por las personas dañadas.

Su decisión de vacunar o no contra el COVID-19 es una elección personal. Antes de tomar una decisión, considere sopesar sus riesgos y beneficios, al evaluar la investigación y los resultados de los ensayos de vacunas y el peligro de muerte en sus circunstancias personales. Además, considere tomar medidas importantes para mejorar su flexibilidad metabólica y optimizar los niveles de vitamina D para reducir su riesgo de enfermedad grave.

Cómo el ayuno intermitente le puede ayudar a vivir más saludable y por más tiempo

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 04 de enero del 2021

HISTORIA EN BREVE

  • El ayuno tiene una serie de beneficios para la salud, incluyendo: mejor salud cardiovascular, menor riesgo de cáncer, reparación de genes y aumento de la longevidad
  • La investigación demuestra que una persona puede obtener la mayoría, o los mismos beneficios de la restricción calórica severa a través del ayuno intermitente, en el cual ayuna algunos días y reduce las calorías en los otros
  • Uno de los principales mecanismos que hacen que el ayuno intermitente tan benéfico para la salud tiene que ver con el impacto en su sensibilidad a la insulina
  • El ayuno intermitente ayuda a restablecer su cuerpo para quemar grasa como combustible
  • Existe evidencia que demuestra que cuando su cuerpo se adapta a la quema de grasa en lugar del azúcar como su principal combustible, reduce drásticamente el riesgo de enfermedades crónicas
  • Las personas que no tienen recomendado ayunar son las que viven con estrés crónico (fatiga suprarrenal) y los que tienen desregulación de cortisol. Las mujeres embarazadas o en lactancia también deben evitar el ayuno

En el documental Eat, Fast, and Live Longer, el Dr. Michael Mosley documenta su viaje mientras decide probar con el ayuno, para ver si puede mejorar su salud.

Al principio, su análisis de sangre reveló que estaba al borde de la diabetes y que su colesterol era alto, el cual su médico quería tratar con medicamentos.

Preocupado por este diagnóstico, sobre todo cuando considera que tiene algo de experiencia en estrategias convencionales de salud, el Dr. Mosley se dispuso a investigar sus alternativas.

“Siempre me he interesado en la auto-experimentación como un dispositivo de investigación porque muchos de los descubrimientos más importantes vienen de científicos y médicos que se utilizan ellos mismos como prueba,” dice el Dr. Mosley, “pero yo nunca antes había realizado una serie de ensayos en mi propia salud.”

Su viaje lo llevo por muchos lugares de Estados Unidos, donde se reunió tanto con personas saludables y de muchos años de edad, como con expertos en longevidad para aprender los secretos de su éxito.

Su cuerpo fue desarrollado para tener ciclos periódicos de “abundancia y escasez”

Resulta que el ayuno tiene una serie de beneficios para la salud que la mayoría de las personas busca: desde mejorar la salud cardiovascular y reducir el riesgo de cáncer, hasta la reparación de genes y la longevidad.

En resumen, él descubrió que parte de lo que parece estar impulsando el proceso de la enfermedad es el hecho de que estamos comiendo con demasiada frecuencia. Cuando está constantemente comiendo, su cuerpo en realidad renuncia a todo su “proceso de reparación y rejuvenecimiento natural.”

Es cierto que la restricción calórica severa promueve tanto la pérdida de peso como la longevidad en modelos animales, pero este tipo de “dieta de hambre” no es una estrategia muy atractiva para la mayoría de la gente.

Sin embargo, la investigación más reciente demuestra que puede obtener la mayoría, o incluso todos los mismos beneficios de la restricción calórica severa a través del ayuno intermitente, es decir, un horario de comidas, en el cual come en algunos días y reduce dramáticamente las calorías en otros.

Esto imita eficazmente los hábitos alimenticios de nuestros antepasados, que no tenían acceso a los súper mercados o alimentos durante todo el día. Ellos tenían un ciclo de períodos de abundancia y escasez. La investigación moderna demuestra que este ciclo produce una serie de beneficios bioquímicos. En resumen, al modificar lo que come y la hora en que come, usted bien puede alterar dramáticamente la manera en que su cuerpo funciona. Y eso es una gran noticia.

Beneficios del ayuno intermitente

El ayuno, históricamente es algo común, ya que ha sido parte de la práctica espiritual por milenios. Pero, la ciencia moderna ha confirmado que hay muchas razones convincentes para ayunar, incluyendo los siguientes:

Normaliza la sensibilidad a la insulina y leptina, al igual que impulsa la eficiencia energética de las mitocondrias: Uno de los principales mecanismos que hacen que el ayuno intermitente sea tan benéfico para la salud se relaciona con su impacto en la sensibilidad a la insulina.

Mientras que el azúcar es una fuente de energía para su cuerpo, también promueve la resistencia a la insulina cuando se consume en las cantidades que se encuentran en nuestra alimentación moderna, que consiste de alimentos chatarra. La resistencia a la insulina, a su vez, es un motor principal de las enfermedades crónicas, desde enfermedades cardíacas hasta el cáncer.

El ayuno intermitente ayuda a resetear su cuerpo para que utilice la grasa como combustible principal y la creciente evidencia confirma que cuando su cuerpo se adapta a la quema de grasa en lugar de azúcar como combustible principal, reduce drásticamente el riesgo de enfermedades crónicas.

Normaliza los niveles de grelina, también conocida como “la hormona del hambre”.

Promueve la producción de la hormona del crecimiento humano (HGH): La investigación ha mostrado que el ayuno puede elevar la HGH hasta en un 1300 % en las mujeres y 2000 % en los hombres, lo cual juega un papel importante en la salud, en el ejercicio y ralentiza el proceso de envejecimiento. La HGH es también una hormona de quema de grasa, lo que ayuda a explicar por qué el ayuno es tan eficaz para la pérdida de peso.

Disminuye los niveles de triglicéridos y mejora de otros marcadores biológicos de la enfermedad.

Reduce el estrés oxidativo: El ayuno reduce la acumulación de radicales oxidativos en las células y por lo tanto previene el daño oxidativo a las proteínas celulares, lípidos y ácidos nucleicos asociados con el envejecimiento y la enfermedad.

También hay muchas investigaciones que evidencian que el ayuno tiene un efecto benéfico sobre la longevidad en los animales. Hay una serie de mecanismos que contribuyen a este efecto. La normalización de la sensibilidad a la insulina es el principal, pero el ayuno también inhibe la vía mTOR, que desempeña una parte importante en el proceso de envejecimiento.

El ayuno intermitente es sin duda alguna, la forma más eficaz que conozco para eliminar la grasa no deseada y eliminar los antojos de azúcar. Dado que la mayoría de nosotros tenemos exceso de grasa que simplemente no podemos quemar, esto es un beneficio muy importante. Cuando el azúcar no es necesaria como combustible principal, su cuerpo tampoco la deseará cuando sus reservas de azúcar se hayan agotado.

Como se mencionó anteriormente, los otros mecanismos que hacen que el ayuno sea tan eficaz para la pérdida de peso es el hecho de que impulsa la secreción de la hormona HGH, una hormona que quema la grasa y que tiene muchos beneficios bien documentados tanto para el “anti-envejecimiento” como para el ejercicio.

Por último, pero no menos importante, el ayuno intermitente también ha sido catalogado como un aliado potente para la prevención o tratamiento de la demencia. En primer lugar, las cetonas son liberadas como un subproducto de la quema de grasa, y las cetonas (no la glucosa) en realidad son el combustible preferido de su cerebro.

Además de eso, el ayuno intermitente aumenta la producción de una proteína llamada factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF), que activa las células madre del cerebro para convertirlas en nuevas neuronas y desencadena otras numerosas sustancias químicas que promueven la salud neuronal. También protege a las células del cerebro de los cambios asociados con la enfermedad de Alzheimer y con la enfermedad de Parkinson. La investigación del Dr. Mark Mattson, un investigador líder del Instituto Nacional sobre el Envejecimiento, sugiere que el ayuno cada tercer día (restringir su consumo de alimentos en los días de ayuno a alrededor de 600 calorías), puede aumentar el BDNF entre un 50 % y 400 %, dependiendo de la región del cerebro.

El plan de ayuno intermitente 5:2

Ayuno intermitente es un término general que abarca una amplia gama de horarios de ayuno. Como regla general, se trata de reducir las calorías en su totalidad o en parte, ya sea un par de días a la semana, cada dos días, o incluso todos los días. El Dr. Mosley se convenció tanto de los beneficios de salud del ayuno intermitente que escribió un libro sobre el tema, llamado The Fast Diet: Lose Weight, Stay Healthy, and Live Longer with the Simple Secret of Intermittent Fasting.

El horario de ayuno que él recomienda en su libro (después de probar un par de variaciones en el documental), es comer normalmente durante cinco días a la semana y ayunar en los otros dos. Este horario a menudo se le conoce como el “Plan de Ayuno Intermitente 5: 2”. En los días de ayuno, él recomienda reducir sus alimentos hasta una cuarta parte de sus calorías diarias normales, o alrededor de 600 calorías en los hombres y aproximadamente 500 en las mujeres, además de mucha agua y té. El Dr. Mosley afirma haber perdido 19 libras en dos meses al implementar el “Plan de Ayuno Intermitente 5: 2”.

plan de ayuno intermitente

Ayuno día de por medio, otra alternativa

Otra variación que es bastante común es el ayuno día de por medio. Este protocolo de ayuno es exactamente tal como suena: un día de ayuno y un día de descanso. Cuando incluye el tiempo de sueño, el ayuno puede llegar a ser tan largo como 32 a 36 horas. El inconveniente es que tendrá que irse a la cama con el estómago vacío cada día de ayuno, lo que puede ser difícil para la mayoría de las personas, al menos al principio.

Sin embargo, según la Dra. Krista Varady, autora del libro The Every-Other-Day Diet: The Diet That Lets You Eat All You Want (Half the Time) and Keep the Weight Off, el horario de ayuno un día de por medio tiene una tasa de cumplimiento mucho más elevada que muchos otros horarios de ayuno. Al final, el mejor horario de ayuno es el que mejor respete. Si está constantemente haciendo trampa, no funcionará.

La investigación de la Dra. Varady muestra que el ayuno un día de por medio, en el cual consume alrededor de 500 calorías en los días de ayuno y puede comer lo que quiera en días que no ayuna, funciona igual de bien para la pérdida de peso que el ayuno completo y es mucho más fácil de mantener este tipo de régimen de ayuno modificado.

En un estudio, los participantes comieron su comida baja en calorías en el día de ayuno a la hora del almuerzo o en la cena. Dividir la comida de 500 calorías en múltiples comidas pequeñas durante todo el día no fue tan efectivo como comer una sola comida, una vez al día. El principal problema se relaciona con el cumplimiento. Si en realidad está consumiendo solo 500 calorías en un día, perderá de peso. Pero al comer pequeñas cantidades de comida varias veces al día, usted es mucho más propenso a querer comer más, por lo que la tasa de engaño aumentará dramáticamente.

Mi recomendación personal

Una tercera versión del ayuno intermitente y que recomiendo porque personalmente la uso, es simplemente restringir su alimentación diaria a un lapso de tiempo específico, como un lapso de tiempo de ocho horas. He experimentado con versiones diferentes de alimentación programada en los últimos tres años y este es mi preferido, ya que es muy fácil de cumplir una vez que su cuerpo ha pasado del modo quema de azúcar al modo quema de grasa como combustible principal.

Dado que la grasa es un combustible que se quema lentamente, le permite seguir adelante en su día sin sufrir de los choques energéticos dramáticos asociados con el azúcar. Y, si no tiene hambre, entonces no comer por varias horas no será un problema. Esto se hace todos los días hasta que su resistencia a la insulina/leptina haya mejorado (hasta que se normaliza su peso, presión arterial, proporción de colesterol o diabetes). Entonces lo continúa haciendo tan a menudo como sea necesario para mantener su estado de salud. Utilicé un tiempo de seis horas hasta que empecé a quemar la grasa como combustible y ahora puedo comer en un lapso de 9 a 10 horas. Mis snacks son nueces de macadamia durante ese período. Rara vez como algo durante las cuatro o más horas antes de irme a la cama.

El cumplimiento siempre es un factor crítico en cualquiera de estos enfoques y parece que este es uno de los horarios más fáciles de ayuno intermitente que puede implementar. Esto es más que increíble para mí ver como los antojos de alimentos, literalmente desaparecen una vez que recupera la capacidad de quemar grasa como combustible. Usted no necesita tener una fuerza de voluntad de acero o tener enormes niveles de auto-disciplina para mantener este horario de comidas. Sí, por supuesto que le dará hambre, pero su hambre será apropiada y se sorprenderá de la cantidad tan diminuta de comida que lo llenará por completo una vez que recupere su flexibilidad metabólica. Ya no tendrá que depender de azúcar almacenada en su cuerpo como su combustible principal.

¿Qué debe comer en los días que no ayuna?

Yo tendría cuidado con una versión de ayuno intermitente que le de la libertad de comer todo tipo de alimentos chatarra cuando no está ayunando, ya que esto parece terriblemente contraproducente. Desde mi punto de vista yo simplemente no puedo estar de acuerdo con esta idea o con promoverla.

Me enfoco en el ayuno intermitente como estilo de vida, no como una dieta y eso significa elegir alimentos saludables cada vez que come. Su objetivo es tratar de imitar los patrones de alimentación de nuestros antepasados, que era un patrón de abundancia y escasez constante. Además, si la combinación de comida chatarra y ayuno puede producir resultados metabólicos favorables, sólo imagine los beneficios para la salud que obtendría si estuviera eligiendo alimentos saludables cada vez que come.

Desafortunadamente, la Dra. Varady no destaca los peligros de los alimentos procesados y de las grasas trans particularmente. Su trabajo se centra principalmente en la cantidad, no en la calidad de las calorías. Una dieta saludable incluye minimizar alimentos procesados ricos en carbohidratos y reemplazarlos con grasas saludables como el aceite de coco, aceite de oliva, aceitunas, mantequilla, huevos, aguacates y frutos secos (las nueces de macadamia son particularmente benéficas, ya que son ricas en grasa y bajas en proteínas). También recomiendo tener cuidado con el consumo de proteínas y, además, asegurarse que la carne y otros productos de origen animal como los productos lácteos y los huevos provengan de animales orgánicos, criados con pastura.

También quiero advertirle sobre comer enormes cantidades de fruta, creo que sería mejor si la mayoría de las personas se restringieran de comer cantidades excesivamente grandes de fruta, por lo menos hasta que su peso y salud se hayan normalizado. Si bien una dieta rica en frutas puede funcionar en algunas personas, al final es necesario tener en mente sus parámetros metabólicos y una estrategia más apropiada para obtener sus vitaminas y antioxidantes a través de vegetales.

Hablando de azúcar, si le encantan los dulces o los postres, no se desespere. Normalmente toma varias semanas para cambiar a la quema de grasa como combustible principal, pero una vez que lo logre, sus antojos de alimentos poco saludables y carbohidratos desaparecerán automáticamente. Le repito, esto se debe a que ahora puede quemar la grasa almacenada y no tiene que depender de nuevos carbohidratos que se queman rápidamente como combustible. Una vez que haya logrado su peso corporal ideal y no tenga diabetes, presión arterial alta o niveles anormales de colesterol, puede ser menos riguroso con su ayuno. No obstante, lo ideal sería que incorporara algún tipo de régimen de alimentación programado de vez en cuando, para asegurarse de no volver a caer en los hábitos pasados.

¿Quién debería tener cuidado con el ayuno o evitarlo por completo?

El ayuno intermitente es apropiado para la mayoría de las personas, pero si tiene diabetes o hipoglucemia, tiene que tener mucho cuidado. Las personas que deberían evitar el ayuno incluyen aquellos que viven con estrés crónico (fatiga suprarrenal) y los que tienen desregulación de cortisol. Las mujeres embarazadas o en lactancia también deben evitar el ayuno. Su bebé necesita gran cantidad de nutrientes, durante y después del nacimiento, y no hay ninguna investigación que apoye el ayuno durante este momento tan importante.

En cambio, mi recomendación sería enfocarse en mejorar su nutrición. Una alimentación con muchos alimentos crudos, orgánicos y ricos en grasas saludables, en combinación con proteínas de alta calidad, le darán a su bebé un buen estado de salud. También asegúrese de incluir muchos alimentos fermentados para optimizar su flora intestinal y la de su bebé.

La hipoglucemia es una condición caracterizada por un nivel anormalmente bajo de azúcar en la sangre. Comúnmente está relacionada con la diabetes, pero puede tener hipoglucemia incluso si no tiene diabetes. Los síntomas comunes de un choque hipoglucémico incluyen dolor de cabeza, debilidad, temblores, irritabilidad y hambre. A medida que sus niveles de glucosa en la sangre continúan bajando, se pueden presentar síntomas más severos, incluyendo:

  • Confusión y/o comportamiento anormal
  • Trastornos visuales, como visión doble y visión borrosa
  • Convulsiones
  • Pérdida del conocimiento

Una de las claves para eliminar la hipoglucemia es eliminar los azúcares, sobre todo de la fructosa de su alimentación. También será útil eliminar los granos y reemplazarlos con una gran cantidad de proteínas de calidad y grasas saludables. Puede utilizar el aceite de coco para resolver algunos de estos problemas, ya que es una grasa que se metaboliza rápidamente y que puede sustituir al azúcar. De igual manera, puede ser utilizado durante su ayuno. Sin embargo, tomará algún tiempo para que su nivel de azúcar en la sangre se normalice.

Póngale mucha atención a los signos y síntomas de hipoglucemia, si usted sospecha que está teniendo un choque bajo, asegúrese de comer algo, como aceite de coco. Idealmente, evite ayunar si tiene hipoglucemia, primero haga cambios en su alimentación general para normalizar sus niveles de azúcar en la sangre. Luego intente versiones menos rígidas de ayuno.