Todo lo que necesita saber sobre “El Gran Reinicio”

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 31 de octubre del 2020.

HISTORIA EN BREVE

  • “El Gran Reinicio” es un nuevo “contrato social” que busca crear una identificación electrónica relacionada a las cuentas bancarias y registros de salud de cada persona, así como una identificación de crédito que dictará cada faceta de sus vidas
  • Aunque la pandemia de COVID-19 se utiliza para justificar un reinicio, su propósito no está relacionado con la salud, sino con un plan a largo plazo para monitorear y controlar el mundo a través de la vigilancia digital y la inteligencia artificial
  • El Gran Reinicio y la Cuarta Revolución Industrial son términos que se utilizan para la tecnocracia y el antiguo “Nuevo Orden Mundial” fusionado con el movimiento transhumanista
  • La tecnocracia es un sistema económico para asignar recursos que gira en torno a la tecnología —en especial la inteligencia artificial, la vigilancia digital, la recopilación de macrodatos, y la digitalización de la industria y el gobierno— lo que a su vez permite automatizar la ingeniería social y el gobierno social, y elimina la necesidad de la elección de liderazgo de forma democrática
  • Aunque el plan real es marcar el comienzo de una distopía impulsada por la tecnología sin control democrático, se supone que este plan es una manera de regresar la armonía con la naturaleza

A estas alturas, es probable que haya escuchado a los líderes mundiales hablar sobre “El Gran Reinicio”, “la Cuarta Revolución Industrial” y el llamado a “Una Mejor Reconstrucción”. Un ejemplo entre muchos es este discurso de Matt Hancock, el ministro británico de Cultura, Medios de Comunicación y Deporte, llevado a cabo durante una reunión del Grupo Parlamentario de Todos los Partidos sobre la Cuarta Revolución Industrial en 2017:

“Una de las funciones del Parlamento es predecir y abordar los grandes desafíos de nuestro tiempo. La naturaleza de las tecnologías es diferente que antes. En el pasado, considerábamos el consumo como algo excepcional y en la inversión de capital como una adición.

Sin embargo, si colocamos los recursos en las redes que conectan a la mitad del mundo, o a la IA, los efectos son exponenciales. Me gusta hablar sobre esto junto a tantos colegas que realmente lo entienden, y junto al profesor Klaus Schwab quien ‘escribió un libro ‘sobre la cuarta revolución industrial.

Su trabajo, que reúne a las mejores mentes del planeta, ha mostrado nuestros planes. Nuestra estrategia digital, integrada en la estrategia industrial, establece los siete pilares sobre los que podemos construir el éxito.

Y eso encaja con nuestra estrategia 5G, como un conjunto de muñecas rusas. Nuestra estrategia cubre la infraestructura, las habilidades, las reglas, el uso de macrodatos, la seguridad cibernética, el apoyo al sector tecnológico, y la digitalización de la industria y del gobierno”.

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¿Qué es ‘El Gran Reinicio’?

El 16 de octubre de 2020, el periodista James Corbett desglosó e n el sitio web The Corbett Report el nuevo contrato social planeado para el mundo, también conocido como “El Gran Reinicio”.

El Gran Reinicio no solo busca crear una identificación electrónica relacionada a las cuentas bancarias y registros de salud de cada persona, sino también una identificación de “crédito social” que dictará cada faceta de sus vidas.

Aunque la pandemia de COVID-19 se utiliza para justificar El Gran Reinicio, su propósito no está relacionado con la salud, sino con un plan a largo plazo para monitorear y controlar el mundo a través de la vigilancia digital. Es decir, el mundo se restablecerá para depender de la tecnocracia digital dirigida por elitistas autoproclamados.

Es una toma de poder muy grande, e involucra la reestructuración de las clases sociales para desmantelar la democracia, borrar las fronteras nacionales y gobernar a las comunidades a distancia por parte de un grupo de líderes autoproclamados. Lo que en el pasado se conocía como el “Nuevo Orden Mundial” ahora se conoce como “El Gran Reinicio”.

Este Gran Reinicio busca crear una identificación electrónica relacionada a las cuentas bancarias y registros de salud de cada persona, así como una identificación de crédito que dictará cada faceta de sus vidas. Esta no es una teoría de conspiración, es la realidad. Está sucediendo ahora. Y necesita saber cómo combatirlo antes de que sea demasiado tarde.

En última instancia, es una agenda tecnocrática que busca integrar a la humanidad en un sistema de vigilancia supervisado por inteligencia artificial. Resulta paradójico que, aunque el plan es marcar el comienzo de una distopía impulsada por la tecnología sin control democrático, se supone que este plan es una manera de regresar la armonía con la naturaleza.

Si no está familiarizado con el término “tecnocracia”, es importante que lea mi artículo en el que hablé con Patrick Wood, autor de los libros Technocracy Rising: The Trojan Horse of Global Transformation y Technocracy: The Hard Road to World Order. Para mayor información consulte el sitio web de Wood, Technocracy.news.

Es decir, la tecnocracia es un sistema económico para asignar recursos que gira en torno a la tecnología, en especial la inteligencia artificial, la vigilancia digital, la recopilación de macrodatos, y la digitalización de la industria y el gobierno, lo que a su vez permite automatizar la ingeniería social y el gobierno social, y elimina la necesidad de una democracia.

Guía para “El Gran Reinicio”

De acuerdo con el Foro Económico Mundial, el Gran Reinicio “abordará la necesidad de un futuro más justo, sustentable y resiliente, así como un nuevo contrato social enfocado en la dignidad humana, la justicia social y donde el progreso no se vea opacado por el desarrollo económico”.

Qué es el Foro Económico Mundial Es una organización internacional para la cooperación público-privada que “involucra a los líderes políticos, empresariales, culturales y de la sociedad para establecer las agendas globales, regionales e industriales”.

El fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial es el profesor Klaus Schwab, quien, como lo mencionó Hancock en su discurso de 2017, escribió el libro sobre la Cuarta Revolución Industrial. Schwab anunció la Iniciativa del Gran Reinicio del Foro Económico Mundial en junio de 2020. En su informe, Corbett lo resume de la siguiente manera:

“Básicamente, el Gran Reinicio es una gran campaña de propaganda y publicidad para una nueva marca que la élite global está tratando de inculcar en la sociedad. Es solo una nueva propaganda en una farsa muy antigua. Este es el Nuevo Orden Mundial redefinido. Es solo un nuevo nombre para él”.

Y, como explicó Corbett, para los que se olvidaron del Nuevo Orden Mundial, éste se trataba de “enfocar el control en menos personas, así como la globalización y transformación de la sociedad a través de tecnologías de vigilancia”.

Es decir, es tecnocracia, donde nosotros —las personas— no sabemos nada sobre la élite gobernante, mientras que cada aspecto de nuestras vidas es vigilado, rastreado y manipulado para su beneficio. Cuatro conclusiones importantes de la investigación de Corbett sobre el Gran Reinicio son:

1.El Gran Reinicio NO está relacionado con el virus, la pandemia ni cualquier otra cosa relacionada con la salud pública.

2.El Gran Reinicio es una agenda que se ha estado gestando durante años. La pandemia solo se está utilizando para cubrir una agenda elitista y globalista que se ha planeado durante décadas.

3.El gran reinicio NO es el fin de la globalización. Por el contrario, es una globalización acelerada. Como señaló Schwab en el libro de políticas COVID-19: The Great Reset, coescrito con Thierry Malleret y citado en el informe de Corbett:

“Si ninguna potencia puede imponer el orden, nuestro mundo sufrirá una ‘falta de orden global’. A menos que las naciones y las organizaciones internacionales puedan encontrar soluciones para colaborar mejor a nivel global, corremos el riesgo de entrar en una ‘era de la entropía’ en la que la fragmentación, la ira y el provincianismo definirán cada vez más nuestro panorama, al hacerlo menos inteligible y más desordenado”.

Es decir, no hay lugar para el orden social que surge de manera espontánea y cuando las personas pueden interactuar de manera libre. En cambio, debe haber “un poder” para hacer cumplir el orden social-ambiental-económico-geopolítico que se desea.

4.Este proceso no está destinado a terminar. El fin de la pandemia no acabará con esta agenda totalitarista y de esclavitud digital. El plan no es “restablecer” el mundo a un estado que nos permitirá comenzar de nuevo con un medio ambiente más limpio y mejores estructuras sociales. El plan es eludir la democracia y establecer el totalitarismo global en manos de unos pocos.

Como señaló Schwab en “COVID-19: The Great Reset”:

“Al enfrentarlo, algunos líderes y ejecutivos podrían sentirse tentados a comparar el reinicio con una reanudación, con la esperanza de regresar a la normalidad y restaurar lo que funcionó antes: tradiciones, procedimientos y métodos para hacer las cosas, en resumen, un regreso a la normalidad.

Esto no sucederá porque no es posible. En su mayor parte, “el negocio como siempre” murió (o al menos fue infectado por) el COVID-19″.

Mapa de transformación del COVID-19

El video está disponible solo en inglés

¿Cómo sería la transformación? Como señaló Corbett, la siguiente ilustración, creada y publicada por el Foro Económico Mundial, demuestra el impacto de la pandemia en varios aspectos de la vida y cómo las respuestas pandémicas están transformando estas áreas.

Si visita el sitio original de la ilustración que aparece más abajo, también encontrará publicaciones, videos y datos relacionados con todos estos aspectos. Cerca del minuto 25, Corbett explica cómo es posible usar este mapa para comprender el alcance de la transformación que se está preparando, desde finanzas, negocios y educación hasta atención médica, derechos humanos y gobernanza global.

Es importante destacar que, la pandemia se está utilizando para destruir las economías locales, lo que permitirá que el Foro Económico Mundial “rescate” a los países endeudados.

Sin embargo, el precio de esta salvación es la libertad. El Foro Económico Mundial, a través de estas medidas, podrá controlar a la mayoría de los países del mundo. Y una parte del plan tecnocrático es eliminar las fronteras nacionales y el nacionalismo.

world economic forum covid-19

La Cuarta Revolución Industrial

Un término relacionado con el Gran Reinicio es “la Cuarta Revolución Industrial”. Esto se refiere a la fusión de sistemas digitales, físicos y biológicos. Como señaló Schwab, “No cambia lo que estamos haciendo, pero nos cambia a nosotros”.

Buscan crear un nuevo sistema económico construido alrededor de la fusión del cuerpo y la mente con las máquinas y la inteligencia artificial. Es decir, la tecnocracia, un sistema económico con base en recursos centralizados por una élite tecnocrática que tiene el conocimiento para programar los sistemas informáticos, dictará la vida de todos.

Por supuesto, se promociona como un medio para aprovechar y elevar el potencial humano, cuando en realidad hará todo lo contrario. En última instancia, no solo están tratando de cambiar la definición de lo que significa ser un humano, sino que están conspirando para alterar a la humanidad a través de la tecnología.

La Cuarta Revolución Industrial no es más que un cambio de imagen de la tecnocracia, fusionada con un movimiento transhumanista.

Para mayor información sobre Schwab, el representante de la tecnocracia moderna, consulte el artículo de Technocracy.news titulado “The Elite Technocrats Behind the Global ‘Great Reset” del 29 de junio de 2020 y el artículo del sitio web Off-Guardian titulado “Klaus Schwab & His Great Fascist Reset” del 12 de octubre de 2020.

De acuerdo con Off-Guardian, Schwab nos asegura que las tecnologías de macrodatos “ofrecerán formas innovadoras de servir a los ciudadanos y clientes” y tendremos que dejar de oponernos a que las empresas se beneficien de aprovechar y vender información sobre todos los aspectos de nuestras vidas”.

En ese artículo, también se cita a Schwab diciendo: “Será importante establecer confianza en los datos y algoritmos utilizados para tomar decisiones”, lo que resume la visión del “gobierno”.

Estrategia “cortocircuito” para manejar el COVID-19

En algunas partes del mundo, está resurgiendo el COVID-19 y, según algunos investigadores, la mejor manera de combatirlo es por medio de implementar medidas más estrictas a través de la estrategia conocida como “cortocircuito” para controlar la tasa de infección.

Mientras tanto, otros informes advierten que, aunque el COVID-19 puede ser mortal para una pequeña minoría de personas, también lo es el confinamiento, debido a la pobreza, el hambre y los desafíos de salud mental que provoca.

El confinamiento es un experimento fallido

De acuerdo con un artículo del 13 de octubre de 2020 en The Sun, las medidas implementadas para el COVID-19 “podrían causar ‘pobreza extrema’ en 90 millones de personas”, mientras que las naciones más pobres soportan la peor parte del colapso económico.

El New York Post también informó que “el confinamiento implementado por el COVID-19 fue un experimento arriesgado” que fracasó y podría ser más mortífero que el virus mismo.

“Ningún científico ético llevaría a cabo un experimento tan arriesgado sin considerar los peligros y monitorear los resultados, que han sido pésimos”, escribe el New York Post.

“Aunque los daños económicos y sociales han sido significativos, no está claro que el confinamiento haya traído beneficios de salud significativos más allá de lo que se logró con el distanciamiento social y otras medidas.

Al comparar 50 países, un equipo dirigido por Rabail Chaudhry de la Universidad de ­Toronto descubrió que el COVID-19 era más letal en los lugares con una mayor cantidad de ancianos y personas con obesidad (como Estados Unidos), pero la tasa de mortalidad no es menor en países que cerraron sus fronteras o impusieron medidas totales.

Después de analizar 23 países y 25 estados de los Estados Unidos con diferentes políticas, Andrew Atkeson de UCLA y otros economistas descubrieron que la tendencia era similar en todas partes una vez que la enfermedad obtuvo más poder´: La cifra de muertes diarias aumentó rápidamente durante 20 a 30 días y luego disminuyó.

El costo-beneficio se vuelve aún más sombrío si se busca determinar si un medicamento u otra intervención vale la pena: ¿Cuánto dinero gastará la sociedad por cada año que se salve?

De acuerdo con dicha determinación, el confinamiento debe ser la intervención más rentable en la historia de la salud pública, ya que muchos de los beneficiarios están cerca del final de su vida. En Estados Unidos, casi el 80 % de las víctimas de COVID-19 tenían más de 65 años y más del 40 % vivían en asilos, donde la esperanza de vida promedio después de la admisión es de solo cinco meses.

Nadie quiere que ­desaparezcan los ancianos, pero ellos y otras personas vulnerables pueden protegerse sin que se vea afectada el resto de la sociedad, como lo han demostrado Suecia y otros países.

Al comienzo de la pandemia, Scott Atlas de la Institución Hoover y los investigadores de la Universidad de Swansea calcularon que el confinamiento costaría más años de vida que el COVID-19 en Estados Unidos y Gran Bretaña, y parece seguro que la cifra de víctimas será peor en los países pobres.

El Banco Mundial estima que la recesión por el coronavirus podría llevar a 60 millones de personas a la pobreza extrema, lo que significa más enfermedades y muertes”.

La cura que es peor que la enfermedad

Ahora también estamos viendo informes de que “el exceso de muertes inexplicables en casa” está superando las muertes por COVID-19 en casi un 900 %, quizás porque las personas con enfermedades crónicas evitan la atención médica. Por desgracia, los médicos y los científicos continúan confundidos cuando se trata del camino más sano a seguir.

Como se señaló en un artículo del 6 de octubre de 2020 en The Conversation, aún se desconoce si la cura del coronavirus es peor que la enfermedad, ya que docenas de médicos que tienen diferentes opiniones.

Una historia reciente del sitio web Kaiser Health News también destaca el impacto del “estrés pandémico” en la salud pública, ya que cada vez más personas informan problemas que abarcan desde insomnio y dolores de cabeza insoportables hasta pérdida de cabello y daños en los dientes:

“A lo largo de la pandemia, las personas que nunca habían tenido el coronavirus han informado una serie de síntomas no relacionados: dolores de cabeza insoportables, pérdida de cabello, malestar estomacal durante semanas, brotes repentinos de herpes y brotes de trastornos autoinmunes.

Los síntomas dispares, a menudo en personas sanas, han desconcertado a los médicos y pacientes, lo que en ocasiones ha resultado en una serie de consultas a especialistas con pocas respuestas. El estrés crónico es una similitud entre muchas de estas afecciones, una que lleva meses en gestarse.

Aunque las personas a menudo subestiman la influencia de la mente en el cuerpo, algunas investigaciones demuestran que los altos niveles de estrés durante un tiempo prolongado pueden alterar la función física y afectar a casi todos los sistemas de órganos.

Ahora, al menos ocho meses después de la pandemia, junto con un ciclo electoral polémico y disturbios raciales, esos efectos se están manifestando en una variedad de síntomas. “Están surgiendo las consecuencias de salud mental de COVID”, explicó la Dra. Jennifer Love, psiquiatra de California”.

El fraude del coronavirus

Una red internacional de expertos legales y profesionales de la salud se está preparando para iniciar la demanda colectiva más grande de la historia, contra todos los responsables de las medidas globales, desde los responsables políticos locales hasta la Organización Mundial de la Salud.

De acuerdo con los cuatro abogados que fundaron el Corona Extra-Parliamentary Inquiry Committee en Alemania, que lidera el caso de responsabilidad civil, la pandemia de COVID-19 es “quizás el mayor crimen contra la humanidad jamás cometido”. Las medidas pandémicas estaban destinadas a difundir el miedo para permitir una transferencia masiva de riqueza, y se han utilizado pruebas fraudulentas para mantener el engaño.

En realidad, las estadísticas de mortalidad revelan que el COVID-19 no ha provocado tantas muertes como la norma anual, explica la acción propuesta, y no hay evidencia de que el confinamiento y las medidas económicas hayan generado resultados favorables.

Aunque el Corona Extra-Parliamentary Inquiry Committee no se ha referido a la pandemia como un medio para una revolución tecnocrática, destaca que se ha utilizado de manera fraudulenta como un medio para transferir la riqueza y eliminar los derechos humanos básicos.

Como se señaló en el artículo de Technocracy.news titulado “The Elite Technocrats Behind the Global ‘Great Reset” del 29 de junio de 2020:

“Se afirma que la Agenda del 2030 de la ONU con sus Objetivos de Desarrollo Sustentable ‘asegura la paz y la prosperidad para las personas y el planeta’. Se dice que estas acciones abordan la pobreza y el hambre, mejoran la salud y la educación, reducen las desigualdades y salvan los océanos, los bosques y el clima. ¿Quién puede argumentar contra esas metas tan benévolas?

Pero eso tiene un precio: Eliminar nuestra libertad personal. Los principales socios del proyecto de los Objetivos Globales de las Naciones Unidas revelan el verdadero objetivo tecnocrático que se esconde detrás de esta fachada, el cual implica integrar a la humanidad en un aparato de vigilancia tecnológica supervisado por una poderosa IA.

El actual miedo a la pandemia ha sido un detonante perfecto para impulsar estos objetivos. El Foro Económico Mundial y su presidente Klaus Schwab consideran la crisis del COVID-19 como el detonante perfecto para implementar su plan tecnocrático. Las grandes compañías tecnológicas llegaran a rescatar el mundo.

Esto se integrará en la agenda del G20 y de la Unión Europea, de una manera no democrática, sin ningún debate público o investigación, al ser renombrada como el Gran Pacto Verde.

Como era de esperar, Klaus Schwab no menciona su propio papel y el de sus compinches en crear este desastre económico global, ya que fue ‘previsto’ con precisión en el Evento 201 de Bill Gates (octubre 2019) del Foro Económico Mundial y en los escenarios del Informe de la Fundación Rockefeller para el futuro de la tecnología y el desarrollo internacional (2010)”.

Como analicé en “La conquista global ha comenzado“, la tecnocracia es una sociedad tecnológica dirigida por ingeniería social, mientras que la censura de las grandes tecnologías es parte integral de esto. Es decir, la tiranía médica y la censura que ha surgido durante esta pandemia también son parte del plan, y si cree que está mal ahora, espere hasta que todo el sistema sea electrónico.

La pura idea de disentir se convertirá en un pensamiento del pasado, porque su vida, salud, oportunidades educativas y laborales, finanzas e identidad, estarán tan entrelazadas con la infraestructura tecnológica que cualquier búsqueda de libertad resultará en un bloqueo o eliminación del sistema, al dejarlo sin capacidad para aprender, trabajar, viajar o comprar nada.

Suena descabellado, pero cuando sigue el plan tecnocrático hasta el final, eso es lo que obtiene. Las señales de advertencia están a nuestro alrededor, si estamos dispuestos a observarlas por lo que realmente son. La única pregunta ahora es si suficientes personas están dispuestas a resistirse para marcar la diferencia.

Cómo se manipulan los ensayos de la vacuna contra el COVID-19

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 30 de octubre del 2020.

HISTORIA EN BREVE

  • Aunque los fabricantes de vacunas insisten que cualquier vacuna contra el COVID-19 que llegue al mercado habrá pasado por pruebas rigurosas, la forma en que se diseñan los protocolos de prueba sugiere que estas vacunas no tendrán un impacto significativo en las tasas de infección, hospitalización o muerte
  • Es sorprenderte que prevenir la infección con SARS-CoV-2 no es un criterio de valoración en los ensayos de estas vacunas. El único criterio para que una vacuna contra el COVID-19 se considere exitosa es si reduce los síntomas que comparte con el resfriado común
  • En el caso de AstraZeneca, el análisis temporal incluye a 50 receptores de vacunas. La vacuna se considerará exitosa si 12 o menos desarrollan síntomas después de la exposición al SARS-CoV-2, en comparación con 19 en el grupo de control
  • En el ensayo de AstraZeneca se documentaron al menos dos casos de mielitis transversa (inflamación de la médula espinal), por lo que, en septiembre de 2020, la compañía lo detuvo temporalmente. En octubre, Johnson & Johnson también detuvo su ensayo debido a que uno de sus participantes desarrolló una “enfermedad inexplicable” que mantuvieron en secreto
  • Si la vacuna no puede reducir la tasa de infección, hospitalización o muerte, entonces no puede poner fin a la pandemia, lo que significa que vacunarse no servirá de nada

Existe un debate sobre si es seguro apresurar el desarrollo de una vacuna contra COVID-19. Aunque los fabricantes de vacunas insisten que cualquier vacuna contra el COVID-19 que llegue al mercado habrá pasado por pruebas rigurosas, la forma en que se diseñan los protocolos de estos ensayos sugiere que estas vacunas tal vez no cumplan con las expectativas.

Según lo reportado por William Haseltine, colaborador de Forbes y ex profesor de la Facultad de Medicina y Escuela de Salud Pública de Harvard, aunque en una extraña muestra de transparencia, Moderna, Pfizer, AstraZeneca y Johnson & Johnson publicaron los protocolos de sus ensayos, “al inspeccionarlos solo causan muchas preguntas”.

En pocas palabras, los ensayos están diseñados de tal manera que obtendrán una calificación aprobatoria. incluso si la eficacia de las vacunas es mínima, también es importante considerar los efectos secundarios de las vacunas, y ya he escrito varios artículos sobre los muchos problemas de seguridad.

Los ensayos de las vacunas contra el COVID-19 se manipulan para aprobar la prueba de eficacia

Como señaló Haseltine, prevenir la infección debería ser uno de los principales criterios de valoración de cualquier ensayo de vacuna. En otras palabras, es muy importante que cuando se vacune, su riesgo de infección se reduzca de manera significativa.

Por esta razón, es sorprendente que, en ninguno de estos ensayos, prevenir la infección es un criterio para el éxito de la vacuna. El único criterio para que una vacuna contra el COVID-19 se considere exitosa es si reduce los síntomas, e incluso en ese caso, se requiere de una reducción mínima.

“En caso de infección, todos esperamos una vacuna eficaz para prevenir enfermedades graves. De acuerdo con Haseltine, tres de los protocolos de la vacuna, Moderna, Pfizer y AstraZeneca, no requieren que su vacuna prevenga enfermedades graves, solo síntomas moderados que puedan ser tan leves como tos o dolor de cabeza”, escribe Haseltine. Además, señala que:

“Las compañías farmacéuticas tienen la intención de realizar ensayos que incluyan de 30 000 a 60 000 participantes. Esta escala de estudio sería suficiente para probar la eficacia de la vacuna.

Si leemos detalladamente, la primera sorpresa con la que nos encontramos en los protocolos, es que cada estudio tiene la intención de completar análisis primarios y temporales que incluyen 164 participantes como máximo.

Es probable que estas compañías tengan la intención de solicitarle a la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) una autorización de uso de emergencia (EUA, por sus siglas en inglés) a partir de sus resultados preliminares que son muy limitados”.

Para obtener una calificación de “aprobado” en el análisis temporal limitado, una vacuna debe mostrar una eficacia del 70 %. Pero, le repito una vez más, esto no significa que evitará la infección en 7 de cada 10 personas. Como lo explica Haseltine:

“Para Moderna, el análisis temporal inicial se basará en los resultados de infección de solo 53 personas. La conclusión que se obtenga del análisis temporal depende de la diferencia en el número de personas con síntomas; es decir, entre el grupo vacunado y el grupo no vacunado. Moderna considera que su vacuna es exitosa si 13 o menos de esos 53 participantes desarrollan síntomas, en comparación con los 40 o más del grupo de control”.

Los otros fabricantes de vacunas basan sus resultados en un protocolo similar, en el que solo un número limitado de participantes vacunados se exponen al virus con el fin de evaluar el alcance de sus síntomas.

El análisis temporal de Johnson & Johnson incluirá los resultados de 77 receptores de la vacuna que se infectaron con SARS-CoV-2 y la vacuna se considerará exitosa si menos de 18 de ellos desarrollan síntomas de COVID-19, en comparación con 59 en el grupo de control.

En el caso de AstraZeneca, el análisis temporal incluye a 50 receptores de vacunas. La vacuna se considerará exitosa si 12 o menos desarrollan síntomas después de la exposición al SARS-CoV-2, en comparación con 19 en el grupo de control de 25 participantes.

El análisis temporal de Pfizer es el más pequeño, con solo 32 receptores de vacunas. Su margen de éxito es de siete o menos en el grupo de prueba y 25 en el grupo de control. En el análisis primario, la eficacia se establece en alrededor del 60 % y en ese análisis se incluirán 164 voluntarios como máximo.

Otro dato preocupante es que los receptores de vacunas en estos ensayos son personas jóvenes y sanas que no tienen un alto riesgo de morir por COVID-19. Esto hace que los resultados de estos ensayos sean muy cuestionables cuando se trata de la población de personas de edad avanzada que es mucho más vulnerable.

Los ensayos solo prueban si la vacuna reduce los síntomas del resfriado común

Por si fuera poco, la calificación mínima para que se considere un “caso de COVID-19” se basa solo en una prueba de PCR positiva y uno o dos síntomas leves, como dolor de cabeza, fiebre, tos o náuseas leves. Como señaló Haseltine, “Esto está lejos de ser suficiente”.

Todo lo que están haciendo es ver si la vacuna contra el COVID-19 minimizará los síntomas del resfriado común. Así que como podemos ver, no garantizan que la vacuna prevenga complicaciones graves del COVID-19. El ensayo de Johnson & Johnson es el único que requiere que el análisis temporal incluya al menos cinco casos graves de COVID-19.

“Una de las preguntas más importantes que debe responder un ensayo es si una vacuna previene la infección. Si se administra la vacuna podría ser menos probable contraer el virus?

Todos estos ensayos se centran en eliminar los síntomas de COVID-19 y la infección en sí. En estos ensayos, la infección asintomática se enumera como un objetivo secundario, cuando se trata de un aspecto de vital importancia.

Parece que todas las compañías farmacéuticas asumen que la vacuna nunca prevendrá la infección. Su criterio de aprobación es la diferencia de síntomas entre un grupo de control infectado y un grupo infectado pero vacunado. No tienen como objetivo principal analizar la diferencia entre infección y no infección”, escribe Haseltine.

En estos ensayos, la enfermedad grave y la muerte también son objetivos secundarios y ninguno de ellos incluye la imposibilidad de prevenir la hospitalización o la muerte como una barrera importante para el éxito.

Así que el sentido común, que por cierto cada vez es más escaso, debería decirnos que, si la vacuna no puede reducir la tasa de infección, hospitalización o muerte, entonces no puede poner fin a la pandemia, lo que significa que vacunarse no servirá de nada.

Algunos ensayos no utilizan placebos inertes

Además de todo eso, algunos ensayos de la vacuna contra el COVID-19 están utilizando otras vacunas como “placebo” y no sustancias biológicamente inertes como la solución salina, esto hace que sea mucho más fácil ocultar los efectos secundarios de la vacuna. Mientras Moderna utiliza una solución salina como placebo, AstraZeneca inyecta una vacuna antimeningocócica en lugar de un placebo inerte.

Otra forma en que AstraZeneca enmascara los posibles efectos secundarios es al administrar la vacuna junto con ciertos medicamentos. En uno de los grupos de estudio, los participantes tomaron acetaminofén cada seis horas durante las primeras 24 horas después de recibir la vacuna. Este medicamento para reducir el dolor y la fiebre podría enmascarar y aminorar efectos secundarios como dolor, fiebre, dolor de cabeza o malestar general.

Además de enmascarar los efectos secundarios, también es bien sabido entre los médicos especialistas en medicina natural que utilizar acetaminofén durante las infecciones virales agudas no es una estrategia inteligente, ya que reduce la capacidad de la respuesta inmunológica para combatir la infección.

Según el sitio web Wired:

“El comunicado de prensa sobre los resultados de los ensayos de la vacuna de Oxford describió una mayor frecuencia de “efectos secundarios leves” entre los participantes. Sin embargo, el artículo real revela que esto es pura publicidad.

Ya que, aunque las reacciones leves fueron mucho más comunes que las graves. Los daños moderados o graves, que se definieron como lo suficientemente graves como para interferir con la vida diaria o necesitar atención médica, también eran comunes.

Cerca de un tercio de las personas que recibieron la vacuna contra el COVID-19 sin acetaminofén experimentaron escalofríos moderados o severos, fatiga, dolor de cabeza, malestar y fiebre.

Cerca del 10 % experimentó fiebre de al menos 100.4 grados, y un poco más de un cuarto desarrolló dolores musculares moderados o severos. Esta es una cantidad elevada en un grupo de personas jóvenes y saludables, mientras que el acetaminofén no fue de gran ayuda para la mayoría de esos problemas”.

Dos ensayos se detuvieron por motivos de seguridad

El 6 de septiembre de 2020, AstraZeneca detuvo su ensayo de fase 3 debido a una “probable reacción adversa grave e inesperada” en un participante del Reino Unido. Al principio, la compañía no divulgó la naturaleza de la reacción adversa, pero desde entonces se ha revelado que el voluntario desarrolló una inflamación grave de la médula espinal, conocida como mielitis transversa.

El 12 de septiembre de 2020, la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios Británica le autorizó a AstraZeneca reanudar su ensayo de fase 3 en el Reino Unido, después de que una revisión independiente determinara que era “seguro hacerlo”. Según un portavoz de AstraZeneca, el incidente fue un caso de esclerosis múltiple no diagnosticada.

Días después, el 19 de septiembre de 2020, The New York Times informó que había ocurrido un segundo caso de mielitis transversa en el ensayo de AstraZeneca. Según un experto consultado por The New York Times, la ocurrencia representó un “patrón peligroso”, y que una tercera incidencia podría detener el ensayo de la vacuna de forma indefinida.

Sin embargo, AstraZeneca afirma que es “poco probable que los dos casos estén relacionados con la vacuna” y que no hay “pruebas suficientes para decir con certeza que las enfermedades se hayan relacionadas o no con la vacuna”.

El 21 de octubre de 2020, se informó que uno de los voluntarios en el ensayo brasileño de AstraZeneca había muerto por complicaciones de COVID-19, pero que el ensayo no se detendría.

El 12 de octubre de 2020, Johnson & Johnson detuvo su ensayo debido a una “enfermedad inexplicable” en uno de sus participantes. Al igual que AstraZeneca, Johnson & Johnson no ha hecho públicos los detalles de la enfermedad y ha dicho que “es importante tener todos los hechos antes de compartir información adicional”.

Los efectos secundarios son más que habituales

Es una sorpresa que no se hayan detenido más ensayos si consideramos la tasa de efectos secundarios que ocurren en voluntarios perfectamente sanos. Como se informó en el artículo: “Bill Gates intenta justificar los efectos secundarios de la vacuna creada apresuradamente“, después de la primera de dos dosis de la vacuna contra el COVID-19 de Moderna, el 80 % de los participantes del ensayo de fase 1 que recibieron la dosis de 100 microgramos (mcg) desarrolló efectos secundarios sistémicos.

Después de la segunda dosis, el 100 % reportó efectos secundarios que van desde fatiga (80 %), escalofríos (80 %), dolor de cabeza (60 %) y mialgia o dolor muscular (53 %).

A pesar de eso, se eligió una dosis de 100 mcg para los ensayos de fase 3. En el grupo de 250 mcg, todos los participantes sufrieron efectos secundarios después de la primera y la segunda dosis. Tres de las 14 personas (21 %) en el grupo de 250 mcg sufrieron “uno o más efectos adversos graves”.

El 1 de octubre de 2020, la cadena CNBC publicó un reporte que analiza las experiencias de cinco participantes en los ensayos de las vacunas contra SARS-CoV-2 de Moderna y Pfizer. Uno de los participantes en el ensayo de la vacuna de Pfizer “se despertó con escalofríos, temblando tan fuerte que se le partió un diente después de tomar la segunda dosis”.

Un participante del ensayo de Moderna dijo para CNBC que tuvo fiebre baja y malestar durante varios días después de su primera inyección. Ocho horas después de su segunda inyección estaba “postrado en la cama con una fiebre de más de 101, temblores, escalofríos, un fuerte dolor de cabeza y dificultad para respirar.

Dijo que le dolía el brazo en el que le pusieron la inyección y sentía “una gran protuberancia en su hombro’. Apenas durmió esa noche, y registró que su temperatura estuvo por encima de los 100 grados durante cinco horas”.

Otros dos reportaron efectos secundarios similares y un tercero avisó que tendría que tomarse el día libre después de la segunda inyección. CNBC también señaló que “mientras las compañías avanzaban en sus ensayos clínicos, varios fabricantes de vacunas dejaron de producir sus dosis más altas después de recibir reportes de reacciones graves”.

¿Algunas vacunas contra el COVID-19 podrían aumentar el riesgo de SIDA?

Resulta perturbador que un grupo de investigadores estén expresando su preocupación sobre el hecho de que algunas de las farmacéuticas candidatas a desarrollar la vacuna contra el COVID-19 podrían poner a ciertas personas en mayor riesgo de contraer VIH, el virus que causa el SIDA.

Los investigadores explican que el adenovirus modificado genéticamente, Ad5, que se utilizó en los ensayos de la vacuna contra el VIH, otro ejemplo de un intento fallido para crear una vacuna, es el mismo virus que están utilizando cuatro de las farmacéuticas candidatas en los Estados Unidos, Rusia y Pakistán.

Cuando falló la vacuna contra el VIH, los científicos no pudieron identificar la razón exacta por la que el Ad5 parecía aumentar el riesgo de contraer el VIH; simplemente lo hizo de manera inexplicable. El Dr. Anthony Fauci fue el autor principal del estudio del VIH, en el que cuestionó “si el problema se extiende a algunos o todos los demás vectores recombinantes actualmente en desarrollo o bien, a otras vacunas basadas en vectores”.

Al reflexionar sobre esa pregunta, los investigadores dicen que decidieron hacer pública esta información ahora, porque las vacunas de Ad5 para el COVID-19 pronto podrían probarse en poblaciones con alta prevalencia de VIH, y creen que el consentimiento informado sobre el riesgo de VIH/SIDA debería ser parte de los estudios clínicos de COVID-19.

¿La vacuna contra el COVID-19 será obligatoria?

Según una encuesta de septiembre de 2020, solo el 51 % de las personas que viven en Estados Unidos respondieron que “definitivamente o probablemente” se administraría la vacuna contra el COVID-19 cuando salga.

Otra encuesta encontró que solo el 44 % se administraría la vacuna de primera generación incluso si se les pagara $ 100 dólares. Con cada vez más personas indecisas sobre el uso de vacunas, un artículo publicado el 1 de octubre de 2020 en el New England Journal of Medicine sugiere que la respuesta está en hacer que la vacuna sea obligatoria.

Y los autores también recomiendan que para obligar a la población a cumplir con esta norma se deben implementar sanciones severas por incumplimiento, como suspensión laboral o arresto domiciliario.

Un artículo del 19 de octubre de 2020 de Wisconsin Public Radio también advierte que los empleadores deberían tener el derecho a obligar a sus trabajadores a vacunarse. Las posibles excepciones pueden incluir ciertos problemas médicos, objeciones religiosas de buena fe y ciertos contratos sindicales que prohíben los requisitos de vacunas.

Hace poco, la “Operació Warp Speed” seleccionó a las cadenas de farmacias Walgreens y CVS como socios a nivel nacional para distribuir las vacunas. Y una vez disponible, los asilos y casa hogar en todo el país pueden optar por inscribirse para que cualquiera de estas compañías vaya y administre la vacuna a sus residentes y personal.

Los denominados “pasaportes de salud” también se están convirtiendo en una realidad. Por ejemplo, Irlanda, ya puso en práctica este experimento. La iniciativa “Health Passport Ireland” utiliza una aplicación para rastrear y mostrar los resultados de las pruebas de COVID-19. Y además mostrará su estado de vacunación oficial, una vez que la vacuna esté disponible.

También se están gastando cantidades considerables de dinero en programas para etiquetar, seguir y rastrear a la población humana en nombre de la salud y la seguridad pública.

Según un artículo de la revista JAMA, tan solo en los Estados Unidos, el costo total de la pandemia de COVID-19 relacionado con la pérdida de producción y la reducción de la salud asciende a más de 16 000 millones de dólares, es decir, alrededor del 90 % del producto interno bruto anual de dicho país.

“Por esta razón, las políticas que pueden reducir materialmente la propagación del SARS-CoV-2 tienen un valor social enorme”, afirma el artículo. Sin embargo, las reglas de prueba, rastreo y aislamiento, todas las cuales se promueven en este artículo, también tienen un precio, y es uno que cualquier persona sensata rechazaría, en otras palabras, la pérdida de privacidad y libertad.

Como informó el sitio web The Last American Vagabond, los gobiernos están vendiendo nuestra libertad en nombre de la salud pública. Realmente quiere vivir en un “estado de bioseguridad”. Quieren que creamos que estas estrategias de robo de libertad son el camino de regreso a la normalidad, pero la realidad será todo menos normal.

Como se detalla en el artículo “La conquista global ha comenzado“, la pandemia y la respuesta global a ella están lejos de ser por casualidad. De manera abrumadora, la evidencia apunta que forma parte de un plan mucho más grande para implementar las últimas etapas de una adquisición tecnocrática. 

Ya he hablado sobre muchos de los aspectos de los intereses globalistas en otros artículos, incluyendo: “Milmillonarios de la tecnología se aprovechan de la humanidad durante la pandemia”; “Los milmillonarios tecnológicos intentan crear una moneda global”; “Erudita de Harvard expone a Google y Facebook”; y, “Cómo la tecnocracia médica hizo posible la pandemia”.

La pandemia de COVID-19 ha aumentado la disparidad económica entre la gente promedio y la élite rica, y el futuro se ve sombrío, ya que parece que esta disparidad solo empeorará.

El plan globalista no se trata de crear un mundo mejor para la persona promedio, se trata de esclavizarnos para que no podamos rechazar o negarnos a lo que está por venir. Las vacunas obligatorias son solo un aspecto de este plan que debemos evitar a toda costa.

Por qué el COVID-19 no es la tercera causa principal de muertes

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 29 de octubre del 2020.

HISTORIA EN BREVE

  • De acuerdo con el Dr. Thomas Frieden, antiguo director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), el COVID-19 es la tercera causa principal de muerte en los Estados Unidos, ya que ha matado a 170 000 personas de los 5.4 millones de personas en los Estados Unidos que obtuvieron un resultado positivo hasta agosto de 2020
  • Las investigaciones demuestran que entre 250 000 y 440 000 personas en los Estados Unidos mueren cada año por errores médicos evitables, una cifra mucho mayor que el COVID-19, en especial si se excluye a las personas que padecen ciertas comorbilidades. Aunque no se reconoce, la negligencia médica es la tercera causa de muerte en los Estados Unidos
  • Muchas personas que murieron de COVID-19 fueron víctimas de errores médicos. En mayo de 2020, el 42 % de todas las muertes por COVID-19 en los Estados Unidos habían sucedido en hogares de ancianos, en especial en estados donde los gobernadores habían obligado a estas instalaciones a aceptar personas infectadas, lo cual fue un error
  • De acuerdo con los CDC, solo el 6 % del total de muertes relacionadas con el COVID-19 padecían la infección como la única causa de muerte en el certificado de defunción
  • Los tratamientos médicos que podrían ser prometedores han sido censurados e incluso prohibidos según estudios falsos, lo que aumenta el número de muertos

De acuerdo con el Dr. Thomas Frieden, antiguo director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), el COVID-19 es la tercera causa principal de muerte en el país, al matar a más personas que “accidentes, lesiones, enfermedades pulmonares, diabetes, Alzheimer y muchas otras causas”.

Se dice que esta afirmación se basa en los datos de la Universidad Johns Hopkins que, en el momento en que Frieden hizo esa declaración en agosto de 2020, informó que habían muerto cerca de 170 000 personas de los 5.4 millones que obtuvieron un resultado positivo.

Al momento de escribir este artículo, Johns Hopkins informa que se registraron 7 916 099 de pruebas positivas y 216 872 muertes relacionadas con COVID-19 en los Estados Unidos.

Casos y mortandad por país

La negligencia médica sobrepasó al COVID-19

Existen muchas razones para no entrar en pánico por lo que dice Frieden. A continuación, mostrare las estadísticas de mortandad, pero, primero quiero resaltar una causa principal de muerte que continúa siendo ignorada, que es la negligencia médica, ya que también es un factor importante en la cifra de muertes atribuidas al COVID-19.

En 2016, un estudio de Johns Hopkins encontró que más de 250 000 personas mueren cada año por errores médicos prevenibles, lo que convierte a la medicina moderna en la tercera causa principal de muerte en los Estados Unidos. Publiqué estos hallazgos en mi artículo “Negligencia médica sigue siendo la tercera causa principal de muertes“.

En 2017, se descubrió que los errores médicos afectaban a 1 de cada 5 personas. Los ejemplos comunes de negligencia médica incluyen recibir el medicamento incorrecto, realizar un procedimiento incorrecto, despertarse durante una cirugía o adquirir una infección relacionada con el hospital.

Otra investigación estimó que la cantidad de personas que mueren por negligencia médica en realidad puede llegar a 440 000. La razón de esta discrepancia en las cifras es porque la negligencia médica rara vez aparece en los certificados de defunción, mientras que los certificados de defunción son importantes para compilar las estadísticas de defunción de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).

Como resultado, se desconoce la gravedad del problema. De cualquier manera, ya sean 250 000 o 440 000 muertes, la negligencia médica continúa cobrando más vidas que el COVID-19, las cuales suceden cada año.

La negligencia médica podría ser responsable de la mayoría de las muertes por COVID-19

Es importante recordar que una gran parte de las personas que murieron por COVID-19 fueron víctimas de negligencia médica. Como informé en mi artículo “Enfermera comparte su experiencia con el COVID-19“, el Elmhurst Hospital Center en Queens, Nueva York, que fue el epicentro de la pandemia de COVID-19 en los Estados Unidos, no trataron a los pacientes con COVID-19 de manera adecuada, lo que provocó su muerte.

De acuerdo con Erin Olszewski, una enfermera que trabajó en Elmhurst durante el apogeo de la pandemia, los administradores del hospital y los médicos cometieron una larga lista de errores, entre los cuales incluyo colocar a todas las personas con COVID-19, incluyendo los casos sospechosos con ventilación mecánica en lugar de utilizar procedimientos menos invasivos.

Durante su estadía, la mayoría de las personas que ingresaron al hospital terminaron siendo tratadas por COVID-19, sin importar si padecían el virus o no, y solo una persona sobrevivió. El hospital tampoco separó a las personas con COVID de las personas con un resultado negativo, lo que fomento una mayor propagación de la enfermedad entre las personas no infectadas que llegaban con otros problemas de salud.

Al tratar a las personas negativas con ventilación mecánica, el hospital aumento la carga de casos y la tasa de mortandad. Es inquietante que, al parecer, los incentivos financieros fueron el factor. De acuerdo con Olszewski, el hospital recibe 29 000 dólores adicionales por cada persona que recibe ventilación mecánica junto con otros tratamientos.

En agosto de 2020, el director de los CDC, Robert Redfield, admitió que es probable que los incentivos de los hospitales hayan elevado las tasas de hospitalización y el número de muertes en todo el país.

Las decisiones a nivel estatal han causado muchas muertes

Otro error importante que elevó la cifra de muertos fueron las decisiones de colocar a las personas infectadas en hogares de ancianos, en contra de los lineamientos federales. De acuerdo con un análisis realizado por el Foundation for Research on Equal Opportunity, que incluyó datos recopilados hasta el 22 de mayo de 2020, un promedio del 42 % de todas las muertes por COVID-19 en los Estados Unidos ocurrieron en hogares de ancianos, viviendas de asistencia y otros centros de atención a largo plazo.

Esto es extraordinario cuando consideramos que este grupo representa solo el 0.62 % de la población En general, los hogares de ancianos no están equipados para atender a personas infectadas con COVID-19.

Aunque están hechos para atender a personas de edad avanzada, ya sea que estén sanos o padezcan algún problema de salud, estas instalaciones no están equipadas para aislar y cuidar a personas con enfermedades muy infecciosas.

Es lógico suponer que las personas infectadas con enfermedades no infecciosas en un hogar de ancianos darían lugar a mayores tasas de mortandad, ya que las personas mayores son mucho más propensas a morir por cualquier infección, incluyendo el resfriado común. También aprendimos, desde el principio, que las personas mayores eran mucho más vulnerables a padecer una infección grave por SARS-CoV-2.

Sin embargo, varios gobernadores demócratas ordenaron que las personas infectadas ingresaran en hogares de ancianos, que es la población más vulnerable, los cuales incluyen: Andrew Cuomo, gobernador de Nueva York; Tom Wolf, gobernador de Pensilvania; Phil Murphy, gobernador de Nueva Jersey; Gretchen Whitmer, gobernadora de Michigan; y, Gavin Newsom, gobernador de California.

ProPublica publicó una investigación el 16 de junio de 2020, que compara un asilo en Nueva York que siguió la orden de Cuomo y uno que se negó y opto por seguir los lineamientos federales. La diferencia fue notable.

Para el 18 de junio, el asilo Diamond Hill, que siguió los lineamientos de Cuomo, había reportado 18 muertes, por no implementar medidas de aislamiento y control de la infección. La mitad del personal (cerca de 50 personas) y 58 personas también contrajeron la infección.

En comparación, Van Rensselaer Manor, un asilo para 320 personas mayores ubicado en el mismo condado que Diamond Hill, no había registrado ni una sola muerte, ya que se negó a seguir los lineamientos del estado y no admitió a ninguna persona con caso sospechoso de COVID-19. Se observó una tendencia similar en otras áreas.

La cifra de muertos por COVID-19 podría haber sido insignificante, si no fuera por un mal tratamiento médico en ciertos hospitales y la toma de decisiones por parte de algunos gobernadores estatales.

Consideraciones adicionales al evaluar la cifra de mortandad del COVID-19

También debemos recordar que la gran mayoría de las personas murió con la infección del SARS-CoV-2, y no a causa de ella, mientras que los tratamientos médicos que podrían ser prometedores han sido censurados e incluso prohibidos debido a estudios falsos y con graves defectos.

De acuerdo con los datos publicados por los CDC el 26 de agosto de 2020, solo el 6 % del total de muertes relacionadas con el COVID-19 padecían la infección como la única causa de muerte en el certificado de defunción.

El 6 % de 201 141 (el número total de muertos informado por los CDC al 14 de octubre de 2020) es igual a 12 068 personas. Es decir, la infección por SARS-CoV-2 fue la responsable de 12 000 muertes de personas sanas. El 94 % restante tenía un promedio de 2.6 problemas de salud que contribuyeron a su muerte.

Comienza a parecer una crisis fabricada cuando sumamos todos estos factores: el mal manejo de la infección en zonas como Nueva York, la decisión de aceptar personas infectadas en asilos, el hecho de que pocas personas sanas murieron a causa de la infección y la represión de posibles tratamientos médicos.

Tasa de mortandad por infecciones al mismo nivel que la gripe

Aunque Frieden afirma que el COVID-19 es la tercera causa principal de muerte, y Scientific American considera que su tasa de letalidad es similar a la de la gripe, yo recomiendo investigar la tasa de letalidad para una persona promedio, excluyendo a las personas que residen en asilos y otras instalaciones de atención a largo plazo.

La tasa general de letalidad por infección fue del 0.26 %, mientras que las personas con menos de 40 años tenían una tasa de letalidad por infección del 0.01 % y las de 60 años o más tenían una tasa de mortandad por infección del 1.71 %. ~ Annals of Internal Medicine 2 de septiembre de 2020

El artículo del 2 de septiembre de 2020 en Annals of Internal Medicine señala que, debido a que muchas personas con SARS-CoV-2 permanecen asintomáticas, es muy difícil estimar la verdadera tasa de infección, mientras que es más fácil sobreestimar la tasa de mortandad cuando se calculan con los “casos” confirmados (es decir, pruebas positivas). De acuerdo con los autores:

“Para calcular una tasa real de letalidad por infección, se necesitan datos de prevalencia poblacional de grandes áreas geográficas donde también existen datos confiables de muerte. Combinamos estimaciones de prevalencia de una muestra aleatoria en todo el estado de Indiana con datos de estadísticas de muertes confirmadas por COVID-19.

En resumen, nuestra muestra aleatoria consistió en residentes estatales de 12 años o más. Se excluyó a los fallecidos y a los reclusos. Debido a que los asilos estaban limitando la capacidad de los residentes para salir y volver a ingresar a las instalaciones, su participación era poco probable.

Se evaluó a los participantes del 25 al 29 de abril de 2020 para detectar una infección viral activa y anticuerpos contra el SARS-CoV-2, lo que indicaría una infección previa. Calculamos el IFR por edad, raza, sexo y etnia sobre la cifra acumulada de muertes por COVID-19 al 29 de abril de 2020, dividido por el número de infecciones.

Aunque no se evaluó a los residentes de los asilos, representaron el 54.9 % de las muertes de Indiana. Por lo tanto, excluimos a los residentes de los asilos de todos los cálculos (es decir, muertes e infecciones).

Para tener en cuenta todas las infecciones, añadimos el número de personas hospitalizadas con COVID-19 durante el período de prueba y las muertes por COVID-19 no institucionalizadas.

Nuestro estudio estimó 187 802 infecciones acumuladas, a las que se sumaron 180 hospitalizaciones. La edad promedio entre todos los fallecidos fue de 76.9 años.

La tasa general de letalidad por infección fue del 0.26 %, mientras que las personas con menos de 40 años tenían una tasa de letalidad por infección del 0.01 % y las de 60 años o más tenían una tasa de mortandad por infección del 1.71 %.

La tasa estimada de mortandad por infección de la influenza estacional es del 0.8 %, según este documento. Otras fuentes aumentan dichas cifras. Por lo tanto, las únicas personas para las que la infección por SARS-CoV-2 es más peligrosa que la influenza, son las personas mayores de 60 años.

Todas las demás personas tienen un menor riesgo de morir de COVID-19 que de gripe. Dicho de otra manera, si tiene menos de 60 años, sus probabilidades de morir a causa de la gripe son mayores que sus probabilidades de morir por el COVID-19.

La coordinadora del grupo de trabajo sobre el coronavirus de la Casa Blanca, la Dra. Deborah Birx, también confirmó esta tasa de mortandad de la que se informa cuando, a mediados de agosto de 2020, declaró que “se vuelve cada vez más difícil” lograr que las personas cumplan con el uso de cubrebocas “cuando las personas comprenden que el 99% sobrevive”.

Además de que el COVID-19 tiene una letalidad similar a la gripe (para la una persona promedio menor de 60 años):

  • Los datos también demuestran que la mortandad general por todas las causas se mantuvo estable este año y no se desvía de la norma. En otras palabras, el COVID-19 no ha matado a más personas de las que habrían muerto en otro año por cualquier causa
  • Varios estudios sugieren que la inmunidad contra la infección por SARS-CoV-2 está mucho más extendida de lo que se esperaba
  • El umbral de inmunidad colectiva parece ser mucho menor de lo estimado previamente

De acuerdo con lo informado por British Sky News, el 7 de octubre de 2020, muchos científicos ahora solicitan un enfoque de inmunidad colectiva para la pandemia, lo que significa que los gobiernos deberían permitir que las personas que no corren un riesgo significativo de enfermedad grave por COVID-19 vuelvan a la vida normal.

Al 18 de octubre de 2020, la Declaración de Great Barrington había sido firmada por 10 601 científicos médicos y de salud pública y 29 296 médicos.

Protocolos efectivos de tratamiento

En esta etapa, existen muchos motivos para el optimismo. Además de los datos que demuestran que el COVID-19 no es tan letal como se sospechaba en un inicio, ahora tenemos varios tratamientos seguros y efectivos. Los más importantes son los siguientes:

Peróxido de hidrógeno nebulizado. Este es un remedio casero que recomiendo para todos, ya que en muchos casos puede mejorar los síntomas en cuestión de horas. Incluso se demostró que es excelente durante las últimas etapas de la enfermedad.

El Dr. David Brownstein, que trato con éxito a más de 100 personas con peróxido de hidrógeno nebulizado, publicó un artículo de caso sobre este tratamiento en la edición de julio de 2020 de Science, Public Health Policy and The Law.

Analicé parte de la ciencia básica sobre cómo funciona el peróxido de hidrógeno, así como algunos de los estudios que evalúan su potencial terapéutico, en mi artículo de abril de 2020: “¿El peróxido de hidrógeno podría tratar el coronavirus?“.

El protocolo MATH+, desarrollado por el grupo de trabajo Front Line COVID-19 Critical Care (FLCCC, por sus siglas en inglés). Ahora existen protocolos MATH + para prevenir la infección, tratar los síntomas leves en casa y un protocolo de cuidados intensivos intrahospitalarios. El grupo publicó varias actualizaciones desde abril de 2020, por lo que es importante descargar las últimas versiones del sitio COVID Care for Clinicians de la Eastern Virginia Medical School.

Por último, existe evidencia que demuestra que las personas con niveles adecuados de vitamina D tienen muchas menos probabilidades de contraer el SARS-CoV-2, menos probabilidades de desarrollar síntomas y menos probabilidades de sufrir complicaciones, enfermedades graves o la muerte.

En general, es importante mejorar los niveles de vitamina D para minimizar su riesgo. Para obtener más información, puede responder mi cuestionario sobre su riesgo de COVID-19 para evaluar su riesgo general. Además, tendrá acceso a mi reporte sobre la vitamina D.

La interconectividad entre la ansiedad e inflamación

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 28 de octubre del 2020.

HISTORIA EN BREVE

  • La ansiedad es la respuesta fisiológica ante una amenaza que incrementa los niveles de citoquinas inflamatorias. Si tiene inflamación, sentirá ansiedad
  • Las citoquinas son pequeñas proteínas que sirven para regular diferentes tejidos y existen citoquinas proinflamatorias y antiinflamatorias. Las citoquinas tienen una relevancia específica para el COVID-19, ya que modulan su sistema inmunológico y su función
  • Al reducir o resolver el estrés y la ansiedad, los niveles de citoquinas inflamatorias disminuyen, lo que permite que su sistema inmunológico funcione mejor
  • Los alimentos procesados provocan inflamación, ya que incrementan la resistencia a la insulina; esto, a su vez, aumenta la producción de citoquinas inflamatorias, ya que contienen aceites de semillas vegetales con omega-6. Dichos aceites son proinflamatorios y procesados de forma industrial
  • Las estrategias que activarán el nervio vago, inducen la relajación y reducen los marcadores inflamatorios, incluyen la escritura expresiva, dormir bien, practicar el perdón, comer con restricción de tiempo y cetonas exógenas

El Dr. David Hanscom, un cirujano ortopédico a quien entrevisté antes sobre estrategias para tratar el dolor crónico de espalda, dejó su práctica para enseñarle a otras personas cómo dejar de sentir dolor sin la necesidad de una cirugía. Hace poco, después de sobrevivir al COVID-19, centró su atención en la prevención y la supervivencia, que es un tema importante en esta conversación.

Desde hace tiempo sabemos que, con la alimentación, el ejercicio y otras intervenciones, puede reducir su riesgo de contraer COVID-19. El enfoque de la prevención del COVID-19 de Hanscom es fortalecer la función inmunológica al reducir el estrés y la ansiedad, y tiene recomendaciones muy específicas y precisas sobre cómo hacerlo.

Como explica Hanscom, el dolor es en un síntoma de estrés y ansiedad, que a su vez se basa más en la inflamación que en factores psicológicos.

“Tiene que sentirse bien. Cuando se sienta bien, notará un cambio profundo en la química de su cuerpo. Pasará de la adrenalina, cortisol, histaminas y las citoquinas inflamatorias a la hormona del crecimiento, dopamina, serotonina y el GABA, y todas son hormonas y [compuestos] antiinflamatorios increíbles. Descubrirá un gran cambio en la química del cuerpo y el dolor desaparecerá. Las personas aprenden a controlar el dolor. Y el dolor desaparece”.

Citoquinas, ansiedad, dolor y mala función inmunológica

Las citoquinas son pequeñas proteínas que sirven para regular diferentes tejidos. Existen citoquinas proinflamatorias y antiinflamatorias. Las citoquinas tienen una relevancia específica para el COVID-19, ya que modulan su sistema inmunológico y su función.

La ansiedad es la respuesta fisiológica ante una amenaza. Todo su cuerpo está en una guerra. Necesita reducir la ansiedad, las citoquinas y la respuesta al estrés. Si su cuerpo está inflamado, sentirá ansiedad.

Al reducir o resolver el estrés y la ansiedad, los niveles de citoquinas inflamatorias disminuyen, lo que permite que su sistema inmunológico funcione mejor. Hanscom ha creado un grupo de trabajo que se reúne una vez a la semana para discutir y compartir información.

Existe otros miembros en el grupo incluyendo a Stephen Porges, Ph. D., un neurocientífico del comportamiento que desarrolló Polyvagal 30, y el Dr. David Clawson, un podólogo que tiene mucho conocimiento sobre las citoquinas.

“Las citoquinas se encuentran en todas partes. Cada célula del cuerpo tiene citoquinas. Y esa es la forma en la que se comunican entre ellas. Al parecer las células gliales en su cerebro, se conectan con tejido del cerebro y producen citoquinas. Al igual que las células endoteliales y los revestimientos de los vasos sanguíneos.

Cuando existe una amenaza (los cirujanos piensan en términos de tensión muscular, sudoración y frecuencia cardíaca), que para nosotros es una respuesta ante una amenaza, frente a la seguridad en la que se relaja y se regenera. Lo que no sabía es que la amenaza activa el sistema inmunológico, y con decir “amenaza”, me refiero a todo tipo de cosas, como virus, bacterias, células cancerosas, un agresor, un jefe difícil y también pensamientos, emociones normales o reprimidas.

La neurociencia nos ha demostrado que esos pensamientos y emociones se procesan en el cerebro de la misma manera que una amenaza física. Resulta que todas las enfermedades degenerativas, como dice Clawson, pertenecen a la misma clase. En otras palabras, sabemos que las enfermedades cardíacas, vasculares, diabetes en la edad adulta, obesidad, Parkinson y el Alzheimer solo son ejemplos de trastornos inflamatorios. Todo está relacionado con la inflamación”.

La ansiedad es un síntoma de inflamación

Cuando su sistema nervioso autónomo se desregula, puede (como hizo Hanscom) sentirse bien un día y tener un ataque de pánico al día siguiente. Explica que:

“Resulta que la ansiedad, el trastorno bipolar, la depresión y la esquizofrenia son procesos inflamatorios. Esa una consecuencia de la inflamación. No es psicológico. Recuerde, la ansiedad es la respuesta ante una amenaza. [La amenaza] es la causa.

La amenaza crea una respuesta corporal, que incluye a su sistema inmunológico, y la sensación generada por la adrenalina, el cortisol y las citoquinas inflamatorias, es la sensación de ansiedad. Dado que el cerebro inconsciente procesa alrededor de 20 millones de bits de información por segundo, y el cerebro consciente solo procesa 40, la mente no tiene la capacidad de procesar todo.

Fui a un psiquiatra durante 13 años y hablé tanto que empeoré. Y llegué a la conclusión de que la solución para el dolor crónico es cambiar su cerebro para tomar una dirección diferente. Si habla del problema, lo refuerza.

La mejor forma de disminuir la ansiedad es reducir la respuesta al estrés. Y se puede lograr a través de medios directos como practicar la atención plena, meditación, relajación o seguir una dieta antiinflamatoria. La dieta antiinflamatoria es muy importante, ya que cuando recibe una amenaza constante, es decir, una inflamación que incluye alimentos procesados, estas células inflamatorias comienzan a destruir su cuerpo.

Lo más importante que quiero que comprendan, es que la ansiedad es la respuesta fisiológica ante una amenaza. Todo su cuerpo está en una guerra. Necesita reducir la ansiedad, las citoquinas y la respuesta al estrés. De nuevo, si su cuerpo está inflamado, sentirá ansiedad”.

Con respecto a la alimentación, existen varias razones por las cuales los alimentos procesados causan inflamación.

Para empezar, tienden a ser muy ricos en carbohidratos refinados que, cuando se consumen en exceso, causan resistencia a la insulina, lo que aumenta la producción de citoquinas inflamatorias e incrementa el riesgo de contraer COVID-19. También contienen aceites vegetales omega-6 procesados de forma industrial, que son proinflamatorios.

Reducir la inflamación mejora la supervivencia del COVID-19

De acuerdo con Hanscom, eliminar la amenaza y crear una sensación de seguridad reduce los marcadores inflamatorios, elimina el dolor y además mejora la capacidad de su sistema inmunológico para responder de forma correcta a los invasores extraños, ya sea el SARS-CoV-2 o cualquier otro patógeno.

“El virus, por supuesto, es una amenaza, [y] lo que desea es que su sistema inmunológico responda. La mayoría de personas combaten el virus muy rápido, pero el factor obvio que requiere atención, es que casi todas las personas que mueren por COVID-19 tienen ‘factores de riesgo’, [y] casi todos tienen marcadores inflamatorios elevados.

La idea es que, si toma control de su salud y reduce esos marcadores inflamatorios, logrará un aumento normal de citoquinas. En otras palabras, las citoquinas son su defensa contra el virus. Tenemos este aumento normal de citoquinas que se mantiene por debajo del umbral.

Si alcanza cierto umbral, la respuesta inflamatoria se vuelve muy fuerte y puede inundar sus pulmones. Se ahoga en sus propios fluidos ya que todo se inflama. Casi todas las personas que han fallecido a causa del COVID-19 han tenido algún factor de riesgo en el que este proceso inflamatorio se sale de control”.

El nervio vago

Como explicó Hanscom, su nervio vago, que es el décimo nervio craneal y es la parte principal de su sistema nervioso parasimpático, actúa como un freno en su sistema nervioso simpático. Su sistema nervioso simpático se activa ante las amenazas, mientras que su sistema nervioso parasimpático se activa a través de la respuesta de relajación.

“El nervio vago analiza toda esta información y decide qué hacer con su cuerpo. Existe un efecto directo sobre el metabolismo, el sistema endocrino, los niveles de azúcar en sangre y las citoquinas. Cuando existe una amenaza, el freno parasimpático se desactiva, pero existen dos partes en el nervio vago. La parte ventral está conectada a los músculos faciales y los del cuello. Permite que los humanos socialicen. Se llama corregulación.

Por instinto somos una especie competitiva; ya que todo el tiempo queremos seguir vivos. Si me acerco a usted, puedo ver sus expresiones faciales, usted ve las mías y hacemos lo que se llama corregulación, que es aquello que relaja el sistema nervioso autónomo. El problema con el COVID-19 es que usamos cubrebocas. No podemos vernos la cara y estamos socialmente aislados. Como señala Porges, desregula el sistema nervioso autónomo.

Cuando sufrí un ataque de pánico, fue porque mi sistema nervioso autónomo estaba desregulado, y había una enorme carga simpática de citoquinas inflamatorias. Existen algunas dudas sobre si el ataque de pánico fue causado por una tormenta de citoquinas, y después, jamás pude volver a controlarlo.

De nuevo, son 20 millones de bits de información por segundo, en comparación con 40. El nervio vago es el centro de todo esto. Me asusta un poco la idea de que consideramos el estrés como una construcción psicológica, y no lo es. Recuerde, el manejo del estrés es un nombre inapropiado, porque el estrés que es más estresante es el que no se puede manejar. Es un estrés crónico.

Lo que sucede es que, cuando está bajo una amenaza crónica, su sistema inmunológico se activa. Por lo consiguiente, las personas se vuelven socialmente aisladas, lo que activa aún más el sistema inmunológico. No se puede equilibrar ya que está socialmente aislado, su conducción nerviosa se duplica, siente más dolor y cuando mantiene esta respuesta autónoma, ocurren más de 30 síntomas físicos.

Y yo tenía 17 síntomas. Tenía migraña, zumbidos en los oídos, erupciones cutáneas, problemas estomacales, dolor de espalda y de cuello, ardor en los pies, entre otros. No tenía la menor idea de que sucedía. Una vez más, la sensación de ansiedad, no es psicológica, es fisiológica.

El estrés no es el problema. Sino la respuesta fisiológica ante una amenaza. Y la forma de calmar la ansiedad es reducir la química del cuerpo. Eso es lo que aprendí por accidente, y luego Porges resolvió mis dudas.

Cuando realizo actividades como la atención plena, me ayuda a bajar mis citoquinas. No es algo psicológico, ya que puedo notar un verdadero efecto en mi cuerpo. Lo mismo ocurre con la alimentación.

Cuando pueda relacionar cosas como la alimentación, relajación y la calma del sistema nervioso con sus citoquinas inflamatorias, notará una gran diferencia. Esa es una respuesta larga a una pregunta simple sobre cómo relacionar estas respuestas con la química de su cuerpo”.

Cómo activar la respuesta de relajación y reducir la inflamación

Entonces, ¿cómo se activa esta respuesta vagal para provocar la relajación y reducir los marcadores inflamatorios? En la entrevista, Hanscom habla sobre varias estrategias para lograrlo, incluyendo las siguientes:

Escritura expresiva. Según Hanscom, existen más de 1000 artículos de investigación que demuestran que la escritura expresiva reduce la carga viral y los marcadores inflamatorios. Cómo hacerlo: simplemente escriba sus pensamientos y luego rompa las hojas. De acuerdo con Hanscom:

“No puede escapar de sus pensamientos, pero si puede separarse de ellos. Y tiene que romper las hojas por dos razones. La primera es que escribe con libertad, ya sea de forma positiva o negativa.

La segunda y la más importante, es no analizar lo que escribió, porque solo son pensamientos. Si los analizará y tratará de solucionarlos, solo los reforzaría. Lo que debe intentar hacer es estimular la neuroplasticidad [a través de] la conciencia, la separación y luego la redirección”.

Sueño de calidad. Para obtener docenas de consejos sobre higiene del sueño, consulte el artículo “El sueño: por qué es necesario y 50 maneras de optimizarlo“.

Practicar el perdón. el antídoto contra la ansiedad es el control. Si pierde el control, su cuerpo segrega más hormonas de estrés y citoquinas, lo que provoca ira y ansiedad.

“Descubrieron que el 90 % de las personas con dolor crónico no han superado la situación que causó el problema en primer lugar, pero resulta curioso que, no se han perdonado a ellos mismos”, dice Hanscom.

“Descubrimos que, en este proceso de curación, la ira y el perdón es el punto clave. Cuando siente enojo o entusiasmo, significa que está enfrentando una amenaza constante. Cuando se siente encerrado por cualquier cosa, en especial por algún dolor crónico o de estar aislado en su casa a causa del COVID, significa que se siente frustrado. Y es muy lógico que eso aumente sus citoquinas inflamatorias”.

Ayuno intermitente o alimentación con restricción de tiempo. Existen varias formas de hacerlo. Algunos de los horarios de alimentación con restricciones de tiempo más comunes se resumen en el artículo “El ayuno intermitente puede prevenir la diabetes“.

Una de las más fáciles es restringir su periodo de alimentación de 6 a 8 horas cada día, y no consumir alimentos al menos tres horas antes de acostarse. La investigación ha demostrado que comer con restricción de tiempo reducirá sus marcadores inflamatorios.

Cetonas exógenas. Aunque las comidas con restricciones de tiempo y el ayuno intermitente aumentarán la producción de cetonas, también puede usar un suplemento de cetonas. Las cetonas catalizan las vías metabólicas que reducen la inflamación. Por ejemplo, inhiben el inflamasoma NRLP3 y activan NRF2.

Como explicó Hanscom, a los virus tampoco les gustan las cetonas: les gusta el azúcar, por lo que pueden ayudar a reducir la reproducción viral. Su grupo de trabajo ha desarrollado un protocolo nutricional que podría ayudar a resolver la pandemia, ya que afecta cada paso de la etapa viral.

“En lo que respecta al COVID-19, es necesario consumir vitamina B y C. La vitamina D es muy importante. Es la deficiencia número uno en el mundo. Además, debe tomar zinc y magnesio para que sus enzimas funcionen”, dice Hanscom.

Los siguientes consejos le ayudaran a activar su nervio vago, lo que desencadenará la respuesta de relajación y disminuirá los marcadores inflamatorios que incluyen las siguientes. Para saber cómo funcionan, escuche la entrevista o lea la transcripción.

Ejercicios de respiración profundaAtención plena
MeditaciónRelajación
TararearEscuchar canciones de cuna
Un paño frío en la frenteAcupuntura

Información adicional

Para obtener más información, asegúrese de leer el manual “Thrive and Surviver” de Hanscom disponible en el sitio web BackInControl.com (solo en inglés). Allí también puede encontrar guías gratuitas que detallan la escritura expresiva y otros consejos para el tratamiento del dolor. Hanscom también es autor del libro Do You Really Need Spine Surgery? que está disponible en su librería local o en línea.

Por último, Hanscom lanzará una aplicación basada en una suscripción llamada DOCjourney, diseñada para ayudarle a resolver el dolor crónico sin cirugía. DOC significa “dirija su propio cuidado” (por sus siglas en inglés). La suscripción incluye coaching grupal virtual, seminarios en vivo, contenido exclusivo y más.

“La aplicación lo guiará a través de los pasos de lo que llamamos trabajo semántico de calmar las cosas, respirar, etc. Es muy preciso y creo que será muy eficaz”, dice Hanscom.

Para terminar, me gustaría reiterar uno de los mensajes clave para llevar a casa que Hanscom destacó en esta entrevista, “la ansiedad es una respuesta fisiológica ante una amenaza. Si tiene inflamación, sentirá ansiedad”. Y la solución para la ansiedad, estrés, dolor y la salud del sistema inmunológico general, es implementar estrategias que reduzcan las respuestas al estrés, que lo hagan sentir bien y disminuyan la inflamación.

La conquista global ha comenzado

Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 27 de octubre del 2020.

HISTORIA EN BREVE-

  • De acuerdo con el Foro Económico Mundial, para 2030, los ciudadanos no poseerán ningún bien y serán felices por ello
  • Términos como “la cuarta revolución industrial” y “una mejor reconstrucción” se refieren a la misma agenda a largo plazo para desmantelar la democracia y las fronteras nacionales en favor de un control global y la vigilancia tecnológica para mantener el orden público
  • Durante décadas, la guerra y las amenazas de guerra han enriquecido a la élite tecnocrática y han mantenido a la población de acuerdo a sus intereses. Hoy en día, las pandemias y la amenaza de brotes infecciosos son las nuevas herramientas para el control social
  • La Reserva Federal de los Estados Unidos está trabajando en una moneda digital de un banco central (CBDC, por sus siglas en inglés). Este sistema de moneda digital es parte del sistema de control social
  • Los globalistas que buscan implementar una agenda tecnocrática incluyen: las Naciones Unidas, el Foro Económico Mundial, Bill Gates y fundaciones como la Fundación Rockefeller, la Fundación de las Naciones Unidas y la Fundación Open Society de George Soros, Avanti Communications, Vision y Frontier 2030, Google, Mastercard y Salesforce

En el siguiente video “8 predicciones para el mundo en 2030” del Foro Económico Mundial, demuestra lo que la élite tiene pensado para todos nosotros.

Dichas predicciones incluyen lo siguiente:

“No poseerá nada y será feliz”, ya que alquilará todo lo que necesite y se le entregará a domicilio.
“Estados Unidos no será la primera potencia mundial”, ya que muchos países dominarán juntos.
“No tendrá que esperar a un donante de órganos”, sino que los órganos se imprimirán en 3D, en lugar de utilizar órganos de donantes fallecidos.
“Comerá menos carne”, ya que la carne será un placer ocasional, y “no un alimento básico, por el bien del medio ambiente y su propia salud”.Como se detalla en muchos artículos anteriores, esta es una locura, no solo por razones de salud sino también ambientales. Integrar el ganado es un aspecto importante de una agricultura regenerativa exitosa que puede resolver tanto la escasez de alimentos como las preocupaciones ambientales. Para mayor información, lea el artículo: “6 razones principales para apoyar la agricultura regenerativa“.
“Mil millones de personas tendrán que desplazarse por el cambio climático”, por lo que los países deberán prepararse para recibir a más refugiados.
“Las empresas tendrán que pagar por emitir dióxido de carbono”, ya que habrá un precio global por el carbono para eliminar los combustibles fósiles. Vandana Shiva, Ph. D.,ha discutido sobre cómo en lugar de promover la agricultura orgánica y regenerativa, la élite tecnocrática está impulsando algo conocido como agricultura natural sin presupuesto. Bill Gates es parte de este panorama.Según ha explicado Shiva, esto funciona de la siguiente manera: el estado obtiene grandes préstamos, que luego se reparten entre los agricultores para que cultiven alimentos de manera gratuita. Los agricultores ganan dinero al negociar su tasa de carbono del suelo en el mercado global.El carbono se está convirtiendo en un producto comercializable, al reemplazar la producción agrícola real de granos y otros cultivos. Los agricultores que tengan más carbono en su suelo ganarán más dinero que los que tienen suelos más pobres. Mientras tanto, los cultivos no son rentables.
La humanidad podrá viajar a Marte“, ya que los científicos “están trabajando para hacer una estancia saludable en el espacio”, al abrir la posibilidad de convertirnos en una raza espacial y colonizar otros planetas.
“Los valores occidentales serán puestos a prueba”.

Las pandemias son para el control social

Durante décadas, la guerra y las amenazas de guerra han enriquecido a la élite tecnocrática y han mantenido a la población de acuerdo a sus intereses. La guerra y los ataques psicológicos se han utilizado en repetidas ocasiones para imponernos más restricciones y eliminar nuestras libertades. La Ley Patriota en los Estados Unidos, impuesta tras el 11 de septiembre, es solo un ejemplo.

Hoy en día, las pandemias y la amenaza de brotes infecciosos son las nuevas herramientas para el control social. Durante años, Gates preparó la mente de las personas para pensar en virus mortales e invisibles que pueden aparecer en cualquier momento. Y la única manera de protegernos es al renunciar a las antiguas nociones de privacidad, libertad y toma de decisiones.

Necesitamos alejarnos de las personas, incluyendo los miembros de nuestra familia. Necesitamos usar cubrebocas, incluso en nuestra casa y al tener relaciones sexuales. Necesitamos cerrar las pequeñas empresas y trabajar desde casa. Necesitamos vacunar a toda la población mundial y generar restricciones en los viajes para evitar la posibilidad de propagación.

Debemos rastrear a todos, durante todo el día, e instalar lectores biométricos en el cuerpo para identificar quiénes podrían ser una amenaza. Las personas infectadas son la nueva amenaza. Esto es lo que la élite tecnocrática quiere que creamos, y han logrado convencer a muchas personas en tan solo unos pocos meses.

Para más información sobre la tecnocracia, por favor visite el artículo “Los peligros apremiantes de la tecnocracia“.

Nuevo sistema de moneda digital

Otros dos factores de este plan totalitario son la transición a una moneda digital que, a su vez, estaría relacionada a las identificaciones digitales. Con eso, será más sencillo aplicar las reglas sociales, ya que sus finanzas e identidad, pueden ser retenidas si no las cumple.

Qué fácil sería automatizar todo de manera que, si no se vacuna o publica algo indeseable en Internet, su cuenta bancaria no estará disponible o su identificación biométrica no le permitirá ingresar a su oficina.

Un artículo del 13 de agosto de 2020 en el sitio web de la Reserva Federal analiza los supuestos beneficios de una moneda digital del banco central (CBDC). Existe un acuerdo general entre los expertos de que la mayoría de los países implementarán un CBDC dentro de los próximos dos a cuatro años.

Un sistema de moneda digital también es importante para la ingeniería social, ya que puede utilizarse para incentivar los comportamientos que se desean, muy similar a lo que China está haciendo con su sistema de crédito social. Por ejemplo, es posible obtener una cierta cantidad digital, pero debe comprar un artículo determinado o realizar una tarea en especial dentro de un período de tiempo determinado.

Muchas personas desinformadas creerán que estas nuevas CBDC serán similares a las criptomonedas como el Bitcoin, pero estarán muy equivocadas. Bitcoin no está centralizado y es una estrategia para salir del sistema controlado por el banco central, mientras que estos CBDC estarán enfocados y controlados por los bancos centrales.

Los globalistas

Aunque hablo mucho sobre Gates, no es el único involucrado. Da la casualidad de que a medida que rastrea las relaciones entre los responsables de la toma de decisiones, lo encontrará en muchos lugares.

Por ejemplo, en octubre de 2019, Gates organizó un simulacro para prepararse para un “nuevo coronavirus”, conocido como Evento 201, junto con el Centro Johns Hopkins para la Seguridad de la Salud y el Foro Económico Mundial.

El evento predijo lo que sucedería solo 10 semanas después, cuando apareció el COVID-19. Gates y el Foro Económico Mundial, están relacionados con las Naciones Unidas que, aunque mantienen un perfil bajo, al parecer está involucrada en la conquista global.

Gates también es el principal financiador de la Organización Mundial de la Salud, que es la rama médica de la ONU, mientras que el Foro Económico Mundial es la rama social y económica de la ONU. Otros socios involucrados en implementar la agenda globalista incluyen:

Fundaciones como la Fundación Rockefeller, el Fondo Rockefeller Brothers, la Fundación Ford, Bloomberg Philanthropies, la Fundación de las Naciones Unidas y la Fundación Open Society de George Soros
Avanti Communications, un proveedor británico de tecnología satelital con conectividad global
Vision 2030, una asociación que ofrece una infraestructura y las soluciones tecnológicas necesarias para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sustentable de la ONU. Vision 2030 también está asociado con Frontier 2030, que es una asociación bajo el mando del Foro Económico Mundial
Google, el recopilador de información más importante a nivel mundial y líder en servicios de IA
Mastercard, lidera la carga globalista para desarrollar identificaciones digitales y servicios bancarios
Salesforce, líder mundial en computación e inteligencia artificial. Por cierto, Salesforce está dirigido por Marc Benioff, quien también forma parte de la junta directiva del Foro Económico Mundial

La cuarta revolución industrial

En décadas pasadas, los tecnócratas —que son la élite mundial que dirige la gestión de las naciones a nivel mundial— solicitaron un “nuevo orden mundial”. Hoy en día, se reemplazó el Nuevo Orden Mundial por términos como “la cuarta revolución industrial” y “una mejor reconstrucción”.

La utopía prometida tiene precio: le pone cadenas nuestra libertad personal.

Todos estos términos se refieren a la misma agenda a largo plazo para desmantelar la democracia y las fronteras nacionales en favor de un control global, y la confianza en la vigilancia tecnológica en lugar del estado para mantener el orden público: enfocarse en la tecnología, en especial la inteligencia artificial, vigilancia digital y recopilación de información (que es lo que busca el 5G), y la digitalización de la industria (que incluye el banco) y el gobierno, lo que permite la automatización de la ingeniería social y el gobierno social ( aunque eso nunca se indica).

La ONU hace un llamado a las naciones

Es difícil ignorar la función de la ONU en la agenda tecnocrática una vez que comienza a buscar. De acuerdo con lo informado por el Departamento de Comunicaciones Globales de la ONU el 22 de abril de 2020, en un artículo sobre el cambio climático y el COVID-19:“A medida que el mundo comienza a planificar una recuperación, las Naciones Unidas solicitan a los gobiernos a aprovechar la oportunidad de ‘una mejor reconstrucción’ al crear sociedades más sustentables, resilientes e inclusivas.

‘Con esto, se abre una ventana de esperanza y oportunidad para que las naciones establezcan sus estrategias para recuperarse y formen la economía del siglo XXI de manera limpia, ecológica, saludable, segura y resiliente’, explicó Patricia Espinosa, Secretaria Ejecutiva de la CMNUCC (Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático), en su mensaje del Día Internacional de la Madre Tierra. Por lo tanto, es importante que estas estrategias ayuden a la economía a ser más sustentable.

A medida que los gobiernos aprueben estrategias para crear empleos, reducir la pobreza y fomentar el crecimiento económico, el UNEP ayudará a los Estados Miembros a llevar a cabo ‘una mejor reconstrucción’ y aprovechar la oportunidad de invertir en energías renovables, viviendas inteligentes, adquisiciones públicas ecológicas y transporte público, todo bajo los principios y estándares sustentables. Estas acciones serán importantes para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sustentable”.

Aquí también se muestra la agenda de los tecnócratas Como lo describe Wood, la tecnocracia es un sistema económico que se basa en asignar recursos energéticos, que requiere de la ingeniería social para controlar a la población y la infraestructura tecnológica para automatizar este control.

En lugar de estar impulsado por la oferta y la demanda, este sistema les dice a las empresas qué recursos pueden utilizar, cuándo y para qué, así como que pueden comprar y alquilar, a juzgar por el video del Foro Económico Mundial del año pasado.

Podría alquilar todo lo que necesite. Es probable que ni siquiera sea suya la ropa que lleva puesta. Todo será “justo” y “equitativo”. No habrá necesidad de trabajo duro, ingenio o inteligencia superior a la media. Todos seremos iguales, a excepción de los tecnócratas. Mientras que la ingeniería social nos dice que seremos “felices” en nuestra esclavitud continua.

La distopía invasora

Es importante comprender que una de las maneras en las que se impulsa este plan es al crear nuevas leyes globales. Gates ya ejerce una poderosa influencia sobre la política alimentaria y agrícola a nivel mundial, además de influir en la salud y la tecnología (incluyendo las identificaciones bancarias y digitales).

El plan de llevar a cabo una “mejor reconstrucción”, solicita que todas las naciones implementen estrategias ecológicas para recuperarse del COVID. Suena como algo que vale la pena; después de todo, ¿quién no quiere proteger el medio ambiente?

Pero el objetivo final está lejos de esta realidad. El objetivo final es quitarnos nuestro derecho a la privacidad, la propiedad privada o cualquier otra cosa.

Para tener una idea de cuán distópico es el futuro, recuerde la patente internacional WO/2020/060606 de Microsoft para un “sistema de criptomonedas que utiliza datos corporales”. Esta patente se presentó el 20 de junio de 2019, mientras que la solicitud de la oficina de patentes de los Estados Unidos (16128518), se presentó el 21 de septiembre de 2018. Como se explica a continuación:

“La actividad del cuerpo humano relacionada con una tarea proporcionada puede utilizarse en el proceso de un sistema de criptomonedas. Un servidor puede ofrecer una tarea a un dispositivo que está relacionado al servidor. Un sensor relacionado al dispositivo o incluido en él puede detectar la actividad del usuario.

Se pueden generar los datos de la actividad al basarse en la actividad detectada del usuario. El sistema de criptomonedas relacionado al dispositivo puede verificar si los datos cumplen con una o más condiciones establecidas por el sistema de criptomonedas y otorgar criptomonedas al usuario cuyos datos se verifican”.

Si esta patente se implementa, esencialmente convertiría a los seres humanos en robots. Si alguna vez se ha preguntado cómo una persona promedio se ganará la vida en el futuro impulsado por la inteligencia artificial, esto puede ser parte de su respuesta.

Las personas serán robots sin sentido que pasarán su vida llevando a cabo tareas asignadas por una aplicación a cambio de criptomonedas. Yo prefiero pensar en formas más agradables de pasar mi tiempo aquí en la Tierra.

Foro Económico Mundial: un caballo de Troya

El Foro Económico Mundial junto con la ONU, están enfocadas en el control global. Como se indica en la publicación “World Economic Forum Wheel of Evil” (La rueda demoniaca del Foro Económico Mundial) del blog Canadian Truth:

“Se trata de dos cosas, implementar los [Objetivos de Desarrollo Sustentable] de la ONU y la Cuarta Revolución Industrial del Foro Económico Mundial. La última jugada es el bloqueo total para controlar todos los aspectos de nuestras vidas y todos los recursos del planeta”.

La publicación del blog incluye la siguiente ilustración, creada y publicada por el Foro Económico Mundial, que demuestra el impacto de la pandemia y la respuesta global. Si visita el sitio original de la ilustración, también encontrará publicaciones, videos y datos relacionados con todos estos aspectos.

En resumen, la pandemia se está utilizando para destruir las economías locales, lo que permitirá que el Foro Económico Mundial “rescate” a los países endeudados.

Como se mencionó antes, el precio es la libertad. El Foro Económico Mundial, a través de estas medidas, podrá controlar a la mayoría de los países del mundo. Y una parte del plan tecnocrático es eliminar las fronteras nacionales y el nacionalismo.

world economic forum covid-19

Síntomas del poder

Se podría decir mucho más sobre esto, pero he cubierto muchos aspectos de los intereses globalistas en otros artículos, incluyendo: “Milmillonarios de la tecnología se aprovechan de la humanidad durante la pandemia”, “Los multimillonarios tecnológicos intentan crear una moneda global”, “Erudita de Harvard expone a Google y Facebook” y “Cómo la tecnocracia médica hizo posible la pandemia”.

Nada de eso es agradable, pero es importante comprender hacia dónde vamos. Ya no podemos ignorarlo y esperar a que pasen cosas malas.

La pandemia del COVID-19 ha aumentado la brecha económica entre las personas de clase media y la élite rica, con multimillonarios ganando miles de millones de dólares en meses. Sin las pequeñas empresas, las grandes empresas han podido devorar negocios, al expandir su riqueza e influencia, mientras que la pobreza extrema ha aumentado en dos décadas.

Si cree que el Nuevo Acuerdo Ecológico va a nivelar esta disparidad financiera y convertir al mundo en una utopía equitativa, es probable que se sienta decepcionado. El plan globalista no se trata de crear un mundo mejor para la persona promedio. La patente de Microsoft ilustra lo que buscan para nosotros.

La tiranía médica empeorará

La tiranía médica y la censura que ha surgido durante esta pandemia también son parte del plan. Después de todo, si no nos permiten tener nada y quieren poner biosensores en nuestro cuerpo para las criptomonedas, ¿en realidad es probable que nos permitan tomar decisiones medicas?

En los últimos meses, Gates ha anunciado en los medios la necesidad de silenciar las opiniones y la información sobre el virus, su tratamiento y las vacunas que se están fabricando.

De acuerdo con una encuesta citada por RT, menos de la mitad de todas las personas en Estados Unidos ahora dicen que no se pondrían la vacuna incluso si se les pagara 100 dólares. Existen buenas razones para esto, ya que los ensayos están comenzando a revelar los efectos secundarios graves.

Para Gates, que está financiando no menos de seis vacunas para el COVID-19, este es problema. En una entrevista de octubre de 2020, Gates instó a los funcionarios de salud de Estados Unidos a comenzar a “pensar qué ayudará a reducir esta manera de pensar, para que podamos obtener un nivel de vacunación que pueda detener” la pandemia.

A pesar de los riesgos relacionados con estas nuevas vacunas de ARNm, que nunca antes se habían aprobado en humanos, y a pesar del hecho de que los niños y adolescentes tienen un menor riesgo de enfermedad grave o muerte por COVID-19, los defensores de la vacuna como el Dr. Paul Offit ahora están solicitando que se incluyan niños a los ensayos. Con suerte, el número de personas dispuestas a ofrecer a sus hijos como conejillos de indias será menor.

Para terminar, recuerde que la tecnocracia es una sociedad tecnológica dirigida por la ingeniería social. Es por eso que hay un enfoque tan fuerte en la “ciencia”. Cada vez que una persona no está de acuerdo, se le acusa de ser “anti-ciencia” y cualquier ciencia que entre en conflicto con el status quo se declara “ciencia desacreditada”.

La única ciencia que importa es la que los tecnócratas consideran cierto. La lógica, le dirá que esto no puede ser así. La ciencia no se ha establecido. La ciencia no es unilateral. La ciencia puede estar equivocada. Llegar a la verdad exige que se observe desde muchos ángulos diferentes.

En especial, durante el año pasado, la indagación científica y la curiosidad se censuraron en un grado asombroso. Si permitimos que continúe, el resultado será devastador.

Debemos seguir presionando por la transparencia y la verdad. Debemos insistir en la libertad médica y personal. No se deje intimidar por los que contrarrestan sus objeciones con insultos de “anticiencia” o “teoría de la conspiración”. Está en juego el futuro de la humanidad. Sea valiente. Resista la tiranía.