Estrategias naturales para aliviar la acidez estomacal sin medicamentos

Por Dr. Mercola, Tome Control de su Salud, 11 de agosto de 2023.

HISTORIA EN BREVE

  • En el 70 % de los casos de acidez se prescriben medicamentos como el omeprazol (Prilosec), que se relacionan con efectos secundarios como osteoporosis, infecciones y deficiencias de nutrientes
  • El medicamento Pepcid (famotidina) es un bloqueador H2 que se puede utilizar en lugar del Prilosec y de otros inhibidores de la bomba de protones. También produce efectos que inhiben la serotonina, y se puede comprar sin prescripción
  • Una de las causas más comunes de la acidez es la falta de ácido en el estómago; consumir chucrut o jugo de col puede ayudar a estimular la producción de ácido estomacal
  • Además de evitar los alimentos procesados, llevar una dieta mediterránea a base de frutas, grasas saludables, carnes magras y vegetales, puede ser una estrategia tan efectiva como los medicamentos para combatir los síntomas del reflujo ácido
  • El té de jengibre también es muy beneficioso, ya que esta especia acelera el vaciado gástrico
  • La astaxantina, el regaliz desglicirrizado, el olmo resbaladizo y la vitamina D también pueden ayudar a aliviar la acidez

El Omeprazol (Zegerid) es un inhibidor de la bomba de protones (IBP) que se utiliza para tratar la acidez, las úlceras estomacales y la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), y ocupa el sexto lugar en la lista de medicamentos que más se prescriben en los Estados Unidos. 1 En la lista de medicamentos IBP podemos encontrar al lansoprazol (Prevacid), pantoprazol (Protonix), rabeprazol (AcipHex) y esomeprazol (Nexium), los cuales suelen prescribirse para inhibir la producción de ácido en el estómago2 en un intento equivocado por aliviar la acidez.

Se calcula que cada año se prescriben más de 113 millones de IBP en todo el mundo,3pero se estima que hasta el 70 % de las personas que los toman no deberían hacerlo.4 Por suerte, existen muchas estrategias naturales para aliviar la acidez, sin exponerse a todos los efectos secundarios que pueden causar estos medicamentos.

Los IBP no deben tomarse como si fueran dulces

En un principio, los IBP solo se utilizaban para tratar problemas de salud graves, como las úlceras pépticas, el reflujo ácido grave que daña el esófago y el síndrome de Zollinger-Ellison,5 una enfermedad poco común que hace que el estómago produzca mucho ácido. Sin embargo, un día comenzaron a utilizarse como remedio para la acidez estomacal. Además, se supone que sólo deben tomarse durante un corto período de tiempo.

Estos medicamentos suelen prescribirse para pacientes hospitalarios, el problema es que muchas veces los siguen tomando después de que los dan de alta, y su uso crónico no solo puede crear un hábito, sino que también puede ser muy dañino.6 De hecho, hasta al 80 % de los pacientes que dan de alta, les prescriben IBP cuando ya no los necesitan,y las consecuencias pueden ser terribles, ya que los IBP se relacionan con muchos efectos secundarios, incluyendo los siguientes:8

  • Osteoporosis y fracturas
  • Neumonía adquirida en la comunidad
  • Colitis por Clostridium difficile
  • Morbilidad cardiovascular
  • Hipomagnesemia o niveles bajos de magnesio

Las investigaciones demuestran que tomar los IBP durante más de dos años incrementa el riesgo de deficiencia de vitamina B12,9 pero eso no es todo, estos medicamentos también se relacionan con la demencia, tanto que los investigadores concluyeron que “evitar los IBP podría prevenir el desarrollo de demencia”.10

Las razones por las que los IBP causan más daños que beneficios

Los IBP inhiben la bomba de protones que produce ácido clorhídrico. Pero es importante aclarar que el exceso de ácido en el estómago muy pocas veces es la causa principal de la acidez e indigestión. Al contrario, la acidez suele ser una señal de que tiene muy poco ácido clorhídrico, lo que significa que si toma un IBP, solo empeorará el problema al reducir aún más sus niveles de ácido.

Debido a que se requiere ácido clorhídrico (y la pepsina) para descomponer las proteínas en el tracto intestinal, tener niveles muy bajos reduce la capacidad del cuerpo para absorber nutrientes. Cuando las proteínas no se descomponen de forma correcta, incrementa el riesgo de disbiosis, que es el desequilibrio entre las bacterias dañinas y beneficiosas del microbioma.

Después de que estas moléculas de proteína sin digerir se fermentan en sus intestinos, se convierten en alimento para los patógenos, como la Candida, C. difficile y Helicobacter pylori (H. pylori). Si toma algún IBP, considere que su uso crónico puede provocar que desarrolle tolerancia y dependencia. Como se explicó en la revista Gastroenterology & Hepatology:11

“Este tratamiento también puede predisponer a los pacientes a la necesidad de una terapia continua. Al suprimir el ácido, los IBP estimulan la retroalimentación que intenta reactivar la secreción de ácido.

Si deja de tomar el medicamento, existe un riesgo de hipersecreción ácida de rebote, que crea una especie de dependencia al medicamento, ya que el cuerpo se acostumbra a que se inhiba la secreción de ácido. Además, la estimulación de retroalimentación crónica crea la necesidad de una terapia continua para controlar los síntomas”.

Por esta razón, es importante dejarlos poco a poco y, de ese modo, evitar los síntomas de rebote, así que no deje de tomar el medicamento (IBP) de golpe. Mejor, consulte a su médico para que lo ayude a reducir de forma gradual la dosis que toma, mientras implementa las estrategias naturales que mencionaré más adelante.

Una vez que llegue a la dosis más baja, puede comenzar a sustituirlo por un bloqueador H2, que se puede comprar sin la necesidad de una prescripción. Aunque hay diferentes tipos, como Tagamet, Cimetidina o Ranitidina, el Zantac (famotidina) es por mucho la mejor opción. Luego, suspenda de forma gradual el bloqueador H2 durante las siguientes semanas.

La famotidina es un antagonista de la serotonina, por lo que es una buena alternativa para las personas que toman ISRS, ya que ayudarán a reducir los niveles de serotonina. Y, a diferencia de la mayoría de los medicamentos, su uso a largo plazo se considera seguro.

Las causas de la acidez estomacal

Una de las causas más comunes de acidez es la falta de ácido en el estómago. Su cuerpo necesita ácido en el estómago para digerir bien los alimentos y absorber los nutrientes. Si no tiene suficiente, los alimentos sin digerir en su tracto gastrointestinal pueden causar acidez e indigestión.

Los restos de comida en el intestino también pueden provocar un crecimiento excesivo de bacterias, como la H. pylori, que se relaciona con problemas de salud que incluyen gastritis, úlcera péptica y síntomas de reflujo ácido. Como se dijo anteriormente, los IBP reducen los niveles de ácido estomacal y, con el tiempo, pueden provocar que las glándulas que secretan ácido en el estómago dejen de funcionar por completo.12

La hernia de hiato, en la que la parte superior del estómago sobresale a través del diafragma, es otra de las causas de la acidez, ya que permite que los alimentos y el ácido regresen al esófago.13 En ocasiones, la fisioterapia y el tratamiento quiropráctico pueden ayudar a aliviar este problema de salud.

Las alergias alimentarias son otra posible causa, pero las sustancias que más incrementan el riesgo de acidez son la cafeína, el alcohol y la nicotina. Sin embargo, comer alimentos procesados también incrementa el riesgo de este problema de salud, ya que alteran el microbioma intestinal al promover el crecimiento excesivo de microbios dañinos.

La mejor estrategia para acabar con la acidez

Una estrategia clave para aliviar la acidez es incrementar los niveles de ácido en el estómago. Tomar un suplemento de clorhidrato de betaína (que también se conoce como trimetilglicina) puede ayudar a lograrlo. Lo puede comprar sin la necesidad de una prescripción y debe tomar todas las que sean necesarias para desarrollar una ligera sensación de ardor y luego disminuir la dosis a una cápsula. También puede mezclar 1 cucharada de vinagre de sidra de manzana sin procesar y sin filtrar en un vaso grande de agua, eso lo ayudará a incrementar el ácido en el estómago.

También recomiendo sustituir la sal de mesa procesada por una versión sin procesar, como la sal marina celta. Darle a su cuerpo la materia prima que necesita lo ayudará a producir suficiente ácido clorhídrico (ácido del estómago) de forma natural. Los vegetales fermentados también son una estrategia alimentaria que debe implementar si sufre de acidez.

Por ejemplo, el chucrut o el jugo de col se encuentran entre los estimulantes más poderosos para que el cuerpo produzca ácido estomacal. No solo eso, sino que también le proporcionará bacterias valiosas para ayudar a equilibrar y nutrir su intestino. Tomar unas cucharaditas de jugo de col antes de comer, o jugo de col fermentado (chucrut), mejorará mucho su digestión. El jugo de col, fresco y sin procesar también puede ayudar a cicatrizar úlceras resistentes.

La alimentación es fundamental

La alimentación, incluyendo las bebidas, también influye mucho en los síntomas de acidez. Además de evitar los alimentos procesados, llevar una dieta mediterránea a base de frutas, grasas saludables, carnes magras y vegetales, puede ser una estrategia tan efectiva como los medicamentos para combatir los síntomas del reflujo ácido.14

El agua alcalina15 tiene un pH más alto que el agua potable normal, por lo que puede brindar un alivio ocasional para el reflujo, al neutralizar el ácido en su cuerpo. Puede preparar su propia agua alcalina, solo mezcle 1 cucharadita de bicarbonato de sodio con 4 onzas de jugo de naranja.

Asegúrese de que el vaso esté a la mitad, ya que la reacción produce espuma que se puede desbordar. Esto ayudará a neutralizar el ácido del estómago y aliviar el ardor por reflujo ácido. Otra estrategia simple es tomar sorbos de agua con mucha frecuencia, ya que eso ayudará a controlar los síntomas de la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE).16

El té de jengibre también puede ser de gran ayuda, ya que disminuye la presión en el esfínter esofágico inferior, lo que ayuda prevenir la acidez y otros síntomas gastrointestinales. Además, el jengibre acelera el vaciado gástrico, un proceso que puede causar acidez cuando no se realiza de forma correcta17 y que ayuda a combatir la H. pylori. Agregue dos o tres rodajas de raíz de jengibre fresco a 2 tazas de agua caliente y déjelo reposar durante varios minutos. Bébalo unos 20 minutos antes de comer.

El jugo de la sábila es otro remedio natural que ayuda a reducir la inflamación, lo que, a su vez, podría aliviar los síntomas del reflujo ácido. Beba alrededor de media taza de jugo de sábila antes de comer. Para evitar su efecto laxante, busque una marca que no contenga el componente que causa este efecto.

Los mejores remedios naturales para la acidez

Exponerse de forma regular a los rayos del sol, para optimizar sus niveles de vitamina D, es muy importante para la salud intestinal, ya que este nutriente participa en la producción de 200 péptidos antimicrobianos que ayudarán a combatir las infecciones intestinales. Otros remedios que podrían ayudar a controlar los ataques ocasionales de acidez estomacal y otros síntomas leves de reflujo, incluyen los siguientes:

• Astaxantina: se descubrió que este potente antioxidante puede reducir los síntomas del reflujo ácido, sobre todo en personas con una fuerte infección a causa de la H. pylori.18 Según el estudio, “a diferencia del placebo, se detectó una reducción mucho mayor de los síntomas de reflujo en los pacientes que recibieron la dosis más alta de astaxantina (un antioxidante natural)”.

Los investigadores concluyeron que una dosis diaria de 40 miligramos de astaxantina puede ayudar a reducir el reflujo.

• Raíz de regaliz desglicirrizado (DGL): ayuda a bloquear las prostaglandinas que causan inflamación. Un estudio encontró que el DGL protegía la mucosa gástrica y aliviaba los síntomas de ERGE mejor que los medicamentos que inhiben la producción de ácido.19

Sin embargo, debe tomarse con precaución, ya que contiene el metabolito activo glicirriza, que en altas dosis puede afectar las glándulas suprarrenales, causar debilidad o entumecimiento muscular e hipertensión.

El regaliz está contraindicado si toma diuréticos o laxantes. También deben evitarlo las mujeres que llevan tratamiento de terapia hormonal, que padecen algún tipo de cáncer dependiente de estrógenos o enfermedades reproductivas, como la endometriosis.

• Glutamina: se ha demostrado que el aminoácido glutamina ayuda a curar el daño gastrointestinal que causa la H. pylori. Según Susan Hagen, profesora asociada de cirugía en la Facultad de Medicina de Harvard:20

“El daño gástrico se produce cuando la bacteria debilita la capa mucosa que protege el estómago, daña las células y provoca una fuerte respuesta inmunológica que no tiene la capacidad de combatir la infección. Nuestros hallazgos sugieren que la glutamina en la alimentación podría proteger contra el daño gástrico que causa la H. pylori”.

La glutamina se encuentra en muchos alimentos, como la carne de res, pollo, productos lácteos, huevos, pescado, así como en ciertas frutas y vegetales. También hay muchos suplementos de L-glutamina.

• Papaya (suplemento de papaína) o piña (suplemento de bromelina): la papaya contiene papaína, una enzima que ayuda a descomponer las proteínas y los carbohidratos. La bromelina es una enzima proteolítica que se encuentra en la piña y, al igual que la papaína, ayuda a digerir las proteínas. También promueve la actividad antiinflamatoria y puede ayudar a estimular los movimientos intestinales.

• Olmo resbaladizo: recubre y alivia la boca, la garganta, el estómago y los intestinos, al igual que contiene antioxidantes que pueden ayudar a tratar los problemas inflamatorios del intestino.

Debido a que estimula las terminaciones nerviosas en el tracto gastrointestinal, ayuda a estimular la secreción de mucosidad, que protege de las úlceras y del exceso de acidez. Mezcle de 1 a 2 cucharadas de olmo resbaladizo en polvo con agua; beba después de comer y antes de acostarse.21

También se ha descubierto que la curcumina, la pectina y el aceite de menta mejoran los síntomas gastrointestinales y refuerzan la salud del microbioma, mientras reducen la necesidad de medicamentos para el reflujo.22 Además, un suplemento que contenía melatonina, l-triptófano, vitamina B6, ácido fólico, vitamina B12, metionina y betaína, fue mejor que el omeprazol para tratar la ERGE.23

Como puede ver, existen muchas estrategias naturales que puede implementar para aliviar los síntomas y ayudar a combatir las causas subyacentes de la mayoría de los casos de acidez. Todas estas estrategias, junto con una dieta a base de alimentos enteros y una cantidad limitada de alimentos procesados, ayudarán a curar su intestino y acabarán con la acidez de una forma natural.

Fuentes y Referencias