Un estudio de alimentación que duró una década, revela los peligros significativos a la salud de los alimentos transgénicos

Una serie de organizaciones impugnaron la aprobación de la remolacha azucarera Roundup Ready (RR por sus siglas en inglés) por la USDA en el 2008, argumentando que la remolacha contaminaría los cultivos orgánicos y los cultivos que no son modificados genéticamente, como las acelgas y la remolacha. Además, dijeron que la remolacha resistente a pesticidas podría aumentar el impacto de plaguicidas sobre el medio ambiente y podría empeorar la epidemia actual de súper malezas resistentes a los plaguicidas.

Una demanda fue presentada contra la USDA en el 2009 por no cumplir un Estudio de Impacto Ambiental. Un juez federal estuvo de acuerdo con la suspensión temporal de todas las plantaciones de remolacha azucarera RR. La suspensión fue posteriormente anulada por la USDA, aparentemente para evitar una escasez de azúcar.

Después de una serie de nuevos giros y vueltas legales, ahora la USDA ha anunciado su decisión de desregularizar el azúcar de remolacha transgénica Roundup Ready de Monsanto7 . De acuerdo con un comunicado de prensa del 19 de julio del Departamento de Agricultura Animal y el Servicio de Inspección de Salud Vegetal (APHIS por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos8 :

“Después de completar una declaración completa del impacto ambiental y una evaluación de los riesgos de las plagas en las plantas, se llevaron a cabo tres reuniones públicas, considerando y analizando los miles de comentarios sobre los análisis, el APHIS ha determinado que, desde el punto de vista del riesgo de las plagas en las plantas, la remolacha azucarera Roundup Ready es tan segura como la forma tradicional de remolacha azucarera”.

Las compañías de productos transgénicos amenazan la seguridad alimenticia y la soberanía

Un discurso histórico dado durante la conferencia de SEMEAR en el 2011 en Sao Paulo, Brasil, sobre la manera en que los compañías de semillas transgénicas o genéticamente modificadas (GM) ponen en peligro la seguridad y la soberanía alimentaria, ha resultado en una alerta hecha por una fuente inesperada, una persona importante en la industria de la soya. Pierre Patriat, Presidente de APROSMAT, la asociación de productores de semillas de Mato Grosso de Brasil no se opone a los cultivos transgénicos, pero reconoce la amenaza sin precedentes para la seguridad alimenticia que presentan las semillas transgénicas.

Diciendo que la industria de los transgénicos le quita la libertad de elección a los agricultores Brasileños, el pidió “la movilización y acción inmediata por parte de los miembros de la industria consternados, al gobierno, a los legisladores, agricultores y la sociedad civil para evitar la amenaza a la soberanía alimenticia que plantea controlar los mercados de productos transgénicos a través de sus semillas patentadas “, según un informe reciente de Watch GM9 .

En su discurso, que recomiendo leer en su totalidad para obtener más información, Patriat sabiamente dice:

“… [E] n la actualidad, la gente piensa que todo puede ser resuelto a través de la semilla. Si la semilla de la soya se enmohece, “¡Espera, esto se puede resolver con la ingeniería genética!” ¿Problema con los nematodos? – “Vamos a cambiar la semilla directamente!” Ellos quieren resolver todos los problemas de esa manera… Pero mientras tengamos soluciones alternativas no necesitamos que la ingeniería genética se deshaga de todos los problemas.

Hoy tenemos un gran problema con los nematodos por una simple razón, esto no solo se debe a la falta de una política agrícola a mediano plazo. Hay una solución conocida por cada agrónomo: La rotación de cultivos! Así es como las malas hierbas y las plagas se debilitan. Es tan simple! Otra forma es la gestión del suelo y las medidas para corregir el suelo – cosas fundamentales que nadie implementa ya que todo tiene que ser resuelto a través de la semilla.

Nadie hace la rotación de cultivos – todo el mundo hace la sucesión (siembra el mismo cultivo). Estos son problemas que no se resuelven por la biotecnología. El hombre que va a invertir de 150 a 200 dólares Brasileños por hectárea, estaría en mejor posición invirtiendo en el mejoramiento de la [calidad] tierra. La rentabilidad a mediano plazo será mucho mejor. Esto no quiere decir que la mejora constante de la semilla no traerá soluciones. Sin embargo, debemos cooperar y definir la base de la nueva normativa, para que todos puedan colaborar armónicamente, sin abusar de su poder económico.