Presentación de la Compilación del Derecho a la Alimentación en México

Por su parte, el Dr. Héctor Robles, Doctor en Derecho de Agricultura por la UAM-X, indicó que existe una percepción de que la agricultura es sembrada por grandes productores, por lo que el presupuesto sólo favorece a los grandes productores.

Comentó que es necesario evidenciar la importancia de los pequeños agricultores, quienes en México 7 de cada 10, cuentan con 5 hectáreas o menos para cultivar. Resaltó que durante más de 70 años se ha dicho que los pequeños productores son insuficientes, sin considerar que se haya incrementado significativamente su número, que de 200 mil en 1930, pasaron a 2 millones en la actualidad.

6 de cada 10 empleos pagados están relacionados con la producción campesina en pequeño y aportan el 29% de los alimentos que se consumen en México. Destacó que las agroindustrias trabajan con productores pequeños y actualmente, cuentan con un 16% de la superficie total de siembra nacional.

En su momento, Catherine Mariell hizo un llamado para recuperar la soberanía alimentaria del país sin transgénicos, destacando que México es un país rico en biodiversidad, ocupado el lugar 12 de países con mayor biodiversidad en el mundo y ha aportado más del 15% de plantas del consumo mundial, sin olvidar que es el centro de origen del maíz.

Hizo énfasis en la paradoja de que donde hay mayor pobreza existe mayor biodiversidad, y esta pobreza es gracias al interés privado de las corporaciones. Igualmente habló de la migración, de los jóvenes que migran en busca de trabajo y van perdiendo sus conocimientos tradicionales. Comentó que es desesperanzadora esta pérdida de tradiciones ya que, por ejemplo, las tradiciones gastronómicas mexicanas son patrimonio mundial por la UNESCO.

Advirtió que existe el intento de imponer el uso de transgénicos y que si se acepta, será un golpe que afectará nuestra biodiversidad. Habló sobre la necesidad de responder y aplicar los tratados y convenios internacionales que México suscribió como la Ley de Biodiversidad de México y el Protocolo de Cartagena.

Califico a la Ley de Semillas es un gran retroceso y dijo que los campesinas e indígenas deberían defender su derecho a intercambiar semillas. Celebró la moratoria en cuanto a la prohibición de siembra de maíz transgénico en México y habló sobre la falta de evaluación de riesgo por el consumo de transgénicos, sin mencionar que hay 60 razas de maíz en riesgo de extinción y México y el mundo perderían este tesoro si es que llega a suceder.

Dijo que es necesario revisar la obligación del etiquetado de productos que contengan transgénicos, así como renegociar el capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio (TLC), el cual resulta nocivo para agricultores y productores mexicanos, por lo que urge una política de soberanía alimentaria pues en el TLC sólo las empresas se fortalecen, destacó la urgencia de cambiar el modelo económico actual y habló de las muchas alternativas existentes, se podrían restaurar los suelos, rescatar a las semillas criollas y hasta a los híbridos convencionales.

Por su parte, el Diputado Antonio García aseguró que está preocupado y convencido de la urgencia de hacer algo, pues le preocupa el peligro de perder al maíz. Está convencido de que con ayuda de los expertos se le puede dar un giro al modelo económico y a las políticas públicas. Le preocupa que México ocupe los primeros lugares de obesidad y la falta de producción alimentaria. Prometió que los diputados marcarán la pauta y tomarán decisiones para salvar al campo, ya que el modelo neoliberal no funciona en México.