Pierden semilleros 80 millones de dólares al año por piratería de semillas

Por Imagen Agropecuaria, abril de 2013

La piratería de semillas en México ocasiona pérdidas económicas al sector semillero de alrededor de 80 millones de dólares al año, a lo que se agregan los daños al agricultor, quien pierde productividad, calidad, sanidad en sus cosechas e ingreso, lo cual desincentiva la inversión en esta tecnología.Ante esta práctica que afecta a todo el país porque en el campo se producen los alimentos que se consumen, la Asociación Mexicana de Semilleros AC (AMSAC) y el Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS), lanzaron la Campaña Contra el Uso de la Semilla Pirata, donde se busca sensibilizar a los agricultores sobre los daños que ocasiona el comprar semillas de “dudosa procedencia”, que además en el caso del trigo sólo cuesta 10 por ciento más que el material certificado.

En rueda de prensa, el presidente de la AMSAC, Ángel Saavedra Martínez, estimó que el daño generado por la piratería de semillas representa 8 por ciento de valor total de la producción de semillas, que se calcula en mil millones de dólares al año.

La directora general del SNICS, Enriqueta Molina Macías, explicó que la campaña tendrá presencia en todo el país, en especial en diez estados en función del riesgo de uso de semilla pirata que presentan, los cuales son: Chihuahua, Guanajuato, Jalisco, Estado de México, Michoacán, Morelos, Puebla, Sinaloa, Sonora y Tamaulipas.

Indicó que el organismo certifica alrededor de 300 mil toneladas de semillas de diversos cultivos, que representa 40 por ciento de la producción agrícola. Anotó que la certificación varía de cultivo a cultivo y, por ejemplo en trigo el porcentaje llega 80-90 por ciento.

La semilla certificada –afirmó Enriqueta Molina– brinda certidumbre a los productores, debido a que utilizan productos de calidad que les darán los rendimientos esperados y son específicos para las regiones donde cultivan.

El presidente de la AMSAC señaló que en ocasiones la semilla es envasada en sacos, bolsas falsas o recicladas, supuestamente de marcas reconocidas, pero que en realidad contienen grano pintado simulando ser semilla; hay casos muy preocupantes donde simplemente el agricultor es convencido y engañado, bajo el argumento de que la semilla que va en el interior de una bolsa de estraza rotulada con plumón y a mano, es de alta calidad.

Detalló que la semilla pirata es distribuida por casas no autorizadas o vendedores sin lugar fijo y quien la vende no entrega factura ni documento alguno que compruebe la compra o indique dónde localizarlo.

Molina Macías informó que para contrarrestar este problema, el SNICS realiza visitas a comercios y bodegas en forma permanente, para verificar la información comercial de las etiquetas de las semillas. Además se registran a personas físicas y morales dedicadas a la producción y distribución de semillas, en el Directorio de productores, obtentores y comercializadores de semillas.

La directora del SNICS subrayó que se trabaja en la prevención y sensibilización de los agricultores respecto de la importancia de proteger su inversión, su tierra y su cultivo, con el uso de semillas de calidad.

Informó que la práctica comercial ilegal puede generar multas de entre 16 mil y 650 mil pesos, dependiendo de la gravedad de la infracción. La reincidencia se castiga con el doble del límite máximo de la sanción que corresponda.

La campaña, según se informó, tendrá una duración de seis meses, y será dada a conocer a través de medios impresos (posters, dípticos, comics, calcomanías), medios electrónicos, jornadas y talleres informativos regionales y en internet a través de redes sociales