Pide la FAO al G-20 coordinación para evitar otra crisis de precios de alimentos

Se mantendr en 2012 crisis alimentaria mundialMéxico, de los mayores importadores de maíz, lo cual podría repercutir en las alzas

Ferrari, omiso e indolente ante especuladores y acaparadores: Central Campesina Independiente

Por Matilde Pérez, U., La Jornada, 3 de septiembre de 2012

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) pidió a los países integrantes del G-20 –organismo que preside México hasta diciembre de este año– se abstengan de tomar medidas unilaterales para evitar una crisis en torno a los precios de los alimentos similar a la de hace cinco años, pues aseguró que hay suficiente oferta de arroz y trigo, cuyos precios son estables.

Hizo un llamado al G-20 para que se coordinen dentro del Sistema de Información sobre el Mercado Agrícola (Sima) ante el temor de que los precios internacionales de los alimentos se disparen. En 2007-2008 los gobiernos tuvieron que decidir autónomamente, pues se carecía de un mecanismo de coordinación para hacer frente a los aumentos de los precios de los alimentos. Actualmente se pueden adoptar medidas responsables, coordinadas y oportunas para impedir que se produzca una crisis.

En un comunicado que José Graziano da Silva, director general de la FAO, envió al gobierno, asentó que México es uno de los mayores importadores de maíz, por lo que las medidas que adopte pueden tener repercusiones determinantes en los precios de los productos alimentarios.

Destacó que la situación mundial es una prueba para el Sima –cuya secretaría es de la FAO– y un reto para que los países adopten medidas conjuntas con la finalidad de impedir que se repitan situaciones que pueden repercutir de manera negativa en las familias probres de todo el mundo. Agregó que el organismo examina los riesgos y las implicaciones de las políticas del aumento de los precios de alimentos y está lista para colaborar con el gobierno de México para encontrar soluciones a largo plazo ante el desafío de la seguridad alimentaria.

Al respecto, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación detalló que se iniciaron las consultas en el Sima, pues la preocupación es elevar la producción mundial de alimentos, considerando el cambio climático, y mantener la estabilidad de precios. Por ello, México promovió la Reunión de Científicos Agrícolas en Jefe y funcionarios de alto nivel en materia de investigación agrícola del G-20 de otros países interesados y de organismos internacionales especializados, la cual se llevará a cabo en Jalisco del 24 al 27 del mes en curso.

Puntualizó que por conducto del Sima se sigue de cerca la evolución del mercado y se mantiene contacto con los coordinadores de los gobiernos de los países que lo integran, pues entre ellos están los responsables de más de 90 por ciento de las exportaciones mundiales de maíz y trigo, y de 80 por ciento de la soya y arroz, así como de la mitad de los que realizan las importaciones mundiales de maíz, arroz, trigo y soya.

Al respecto, expuso que en el ámbito nacional hay mil 966 establecimientos de almacenamiento en los que se acopia 89 por ciento de la producción nacional, lo cual garantiza la seguridad alimentaria. Refirió que en el periodo 2005 2011, la producción promedio anual de granos y oleaginosas fue de 33.9 millones de toneladas.

De su lado, organizaciones campesinas pidieron al Congreso de la Unión que apruebe un plan emergente de producción de alimentos. La Confederación Nacional Campesina apuntó que la situación es grave, ya que además de las sequías y heladas que afectaron la producción nacional, las familias afrontan el alza constante de los precios de los productos básicos, como en el caso más reciente del huevo, que pese a las importaciones que anunció la Secretaría de Economía, sigue entre 22 y 30 pesos; en algunas regiones se ha encarecido hasta en 200 por ciento.

La Central Campesina Independiente demandó acciones urgentes para recomponer la producción de alimentos, pues se importa más de la mitad de éstos y acusó a Bruno Ferrari, secretario de Economía, de ser omiso e indolente ante especuladores y acaparadores. El campo requiere otra estrategia y enfoque de las políticas públicas, concluyó.