La batalla por el maíz

Sarukhán comentó sobre la posición de Bolívar Zapata acerca de los riesgos en la biodiversidad con los OGM. “El doctor Bolívar no tiene conocimiento realmente de lo que significa la producción agrícola, él es experto en biomedicina…

La ecología es una ciencia integradora, la agronomía es ecología aplicada. Muchos de ellos (en el Instituto de Biotecnología de la UNAM) no conocen de evolución, sea natural o bajo domesticación, qué son las plantas cultivadas, ese proceso lo desconocen, no ven la película, y solamente dentro de una foto ven un cachito muy chiquito y lo extrapolan a todo lo demás…”.

Y hace una advertencia acerca de la seguridad alimentaria mexicana y su fragilidad: “mientras este país no haga una reversa seria, cuidadosa, exigente de mayor inversión en investigación agrícola… México abandonó su obligación de mantener una investigación agrícola propia, autónoma, de alta calidad.

La investigación agrícola ha bajado, basta ver el estado de las escuelas de agricultura, la Productora Nacional de Semillas, que era la que generaba toda la semilla para sembrar en México, ya no existe, la Conasupo ya no existe, el Servicio de Extensión Agrícola ya no existe, extensión agrícola para agricultores que no tenían dinero para contratar una compañía… la extensión agrícola que hay ahora la dan Pioneer, Syngenta, Monsanto… Algunos países se dieron cuenta del abandono y regresaron a apoyar la investigación pública, como Brasil, China e India, aquí no, uno de los grandes errores en los últimos 40 años”.

El 29 de diciembre de 2013 una noticia fue poco difundida por los medios mexicanos. En 20 años la población de la mariposa monarca ha caído en 90% en Norteamérica, y debido a ello ese día el U.S. Fish and Wildlife Service anunció revisaría el estatus de la monarca, para decidir si puede entrar bajo la protección de la Ley de Vida Silvestre.

Es decir, sería una especie protegida que contaría con ciertas acciones del gobierno para impedir que desaparezca. Los expertos creen saber qué sucede con la monarca. Desde hace dos décadas se cultiva en Estados Unidos maíz genéticamente modificado, en especial maíz Bt, y que requiere un herbicida potente, el roundup (glifosato) de Monsanto.

Parece ser que este herbicida está matando el algodoncillo, la única planta que come la mariposa. Así que el gobierno estadunidense va a estudiar si esta sospecha es cierta y si la mariposa peligra.

Si al final de esta revisión de un año concluye que es así, es posible que el uso de maíz Bt tenga que ser reevaluado. Otros expertos afirman que el mismo problema está ocurriendo con las abejas en toda Norteamérica.2

En 2004 el Reino Unido aprobó el cultivo de MMG. Es claro que el maíz no es originario de las islas británicas, pero el gobierno insistió en fuertes regulaciones para prevenir riesgos: de forma obligatoria o la empresa o los agricultores tenían que aceptar responsabilidad legal por cualquier daño ambiental causado por el cultivo.

Como los granjeros no pudieron encontrar alguna compañía de seguros que quisiera darles cobertura, el peso financiero cayó en la productora del MMG. El resultado final fue que Bayer retiró la solicitud de venta comercial de MMG. La fría realidad de riesgos financieros fue más poderosa que todo el cabildeo ecologista.

Nadie osaría acusar a los británicos de no ser ambiciosos, pero tampoco de no pensar a largo plazo habiendo sido un imperio por siglos y teniendo una de las más importantes industrias de seguros del planeta.

El doctor Johannes Klose (Neurobioquímica, Max Planck Institute) es el consejero de ciencia principal de Allianz Global. En 2009 respondió a una entrevista que “los efectos [de los OGM] a largo plazo en la salud humana y el medio ambiente son casi imposibles de probar.

Se tendría que monitorear por décadas, pero usted no puede hacer esto porque se pone en riesgo a la población… Esto ya ha provocado pérdidas a las compañías de seguros… Los beneficios empiezan a disminuir con la cadena de valor alimentaria.

Probablemente, no hay ventaja para el retailer o la empresa que manufactura material OGM versus la que no usa OGM. A nivel del consumidor el beneficio es muy difícil de observarse…”. Esteban Jaramillo, de Minsa, también está preocupado por los riesgos, y sus costos: “Hoy en día México es libre de transgénicos.