En la UNAM, plantean académicos de Harvard modelos para generar energía sustentable

Por Boletín UNAM-DGCS-181, marzo de 2014

• Beneficiarían a sectores pobres, además de ser menos contaminantes y más económicos  • Daniel Nocera y Alan Aspuru-Guzik, profesores de esa Universidad, ofrecieron conferencias en la Facultad de Química

Daniel Nocera y Alan Aspuru-Guzik, profesores de la Universidad de Harvard, plantearon en la UNAM métodos avanzados para la generación de energía solar que derivarían en beneficios para sectores pobres y comunidades apartadas, además de ser menos contaminantes y más económicos.

Los adelantos en sus investigaciones están centrados en la aplicación de la ciencia para la solución de importantes problemas sociales, a través de la creación de fuentes de energía sustentable para el futuro.

En la Facultad de Química (FQ), ante unas 700 personas, principalmente profesores y alumnos de distintas entidades de la UNAM, los especialistas dictaron las conferencias The artificial leaf (La hoja artificial) The artificial lab: new organic solar cells and flow batteries using supercomputers (El laboratorio artificial: celdas solares orgánicas y baterías de flujo novedosas mediante supercómputo), respectivamente.

En los auditorios A y B de la entidad y en carpas instaladas en la explanada principal, Nocera habló sobre el desarrollo de un sistema potencialmente revolucionario para generar hidrógeno a partir del agua, mediante el empleo de energía solar, que se conoce como “fotosíntesis artificial”.

La investigación del académico de Harvard y líder científico en el campo de la conversión de energía tanto en biología como en química, se centra en el trabajo denominado La hoja artificial, un sistema que emula el proceso fotosintético, considerado un hito en el esfuerzo por crear energía sustentable.

Celdas solares orgánicas

Por su parte, el egresado de la FQ, Aspuru-Guzik, explicó las ventajas del desarrollo de celdas solares orgánicas, elaboradas a base de carbono, que representan una alternativa importante frente a las que se usan hoy día, hechas con silicio y que son utilizadas fundamentalmente para transformar la luz solar en electricidad.

Podrían beneficiar a comunidades marginadas y de escasos recursos, además de que la energía generada por este tipo de dispositivos sería menos contaminante y más económica.

Su trabajo de investigación cubre una amplia área de intereses y se ubica en la interfase entre la información cuántica y la química. Como ejemplo, sus intereses alcanzan el empleo de las computadoras cuánticas y los simuladores cuánticos dedicados al estudio de sistemas químicos.

El investigador mexicano –a cargo del Proyecto Energía Limpia, un esfuerzo de cómputo en el que se busca identificar los materiales adecuados para la generación de energía renovable– ha analizado el papel de la coherencia cuántica en la transferencia de energía en los complejos fotosintéticos y desarrollado metodología para estudiar la espectroscopía de moléculas en ambientes de nanoescala.

Carlos Amador Bedolla, académico de la FQ y coordinador de las conferencias, señaló que las líneas de trabajo de los profesores de los departamentos de Química y Biología Química de Harvard, Daniel Nocera y Alan Aspuru, respectivamente, son relevantes porque la actual investigación sobre energía es el tema de mayor importancia en el mundo.

Hoy se vive el conflicto porque “nuestras fuentes son combustibles fósiles y no renovables. Además, se queman, por lo que generan bióxido de carbono, es decir, contaminan y contribuyen al calentamiento global; su uso no puede continuar como hasta ahora. En consecuencia, el consumo y generación es el tema más importante de la humanidad en este siglo”.

En ese sentido, abundó, ambos investigadores no sólo trabajan en esta área, sino que además son de los especialistas que lo han hecho con mejores resultados en el mundo, “lo que hace de gran trascendencia su visita a la FQ”.

A ello se suma que la forma actual de hacer ciencia es complicada, pues involucra e implica que los líderes científicos del planeta estén ocupados a un nivel extraordinario. La globalización del conocimiento provoca que estos especialistas tengan un ritmo de trabajo extremo. Proporcionar modelos a seguir para los jóvenes o contarles las historias personales de quienes han llegado a esos niveles, es fundamental y puede tener efectos extraordinarios sobre los estudiantes, concluyó.

El encuentro fue organizado por la Secretaría de Energía (Sener), en coordinación con el Fondo de Sustentabilidad Energética, la Secretaría General de la UNAM y la FQ, bajo el tema La energía del futuro. Asistieron Leonardo Beltrán Rodríguez, subsecretario de Planeación y Transición Energética de la Sener; Eduardo Bárzana García, secretario General de la UNAM; Jorge Vázquez Ramos, director de la FQ y Bárbara Randolph, de la Fundación México en Harvard, entre otros.