En el CDB, La Sociedad Civil Llama a Moratoria sobre La Geoingeniería
Por Grupo ETC, octubre 25, 2010
Se necesitan precauciones extremas ante los riesgos extremos, exige la sociedad civil a la reunión ministerial de Naciones Unidas
Nagoya, Japón Uno de los temas más controvertidos que enfrenta el Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) en Nagoya, Japón, es la moratoria sobre los experimentos de geoingeniería que se están proponiendo como una de las soluciones a la crisis del clima. Durante la plenaria de apertura la alianza de organizaciones de la sociedad civil llamó a establecer definitivamente una moratoria sobre los experimentos de geoingeniería.
Este martes 19 de octubre el Grupo ETC presentó un informe detallado sobre el tema y llamó a los gobiernos reunidos a respaldar la moratoria. El Grupo ETC argumenta que los experimentos de geoingeniería, por la escala en la que tienen que realizarse, salen por completo de los parámetros usados en las pruebas científicas en el mundo real y quedan fuera de lo previsto por las legislaciones internacionales. Un puñado de países de la OCDE y corporaciones están presionando para que se realicen estos arreglos tecnológicos a escala masiva, en vez de reducir las emisiones en casa.
“Algunos de los que proponen esas tecnologías piensan que es más fácil manipular el sol que hacer que la gente utilice el transporte público, dijo en Nagoya Pat Mooney, director del Grupo ETC.
Hace algunos meses este mismo 2010, el organismo científico del Convenio sobre Diversidad Biológica propuso una prohibición sobre las actividades de geoingeniería relacionadas con el clima más amplia que la prohibición de 2008 sobre la fertilización oceánica. En la nueva propuesta se propone prohibir las técnicas de manejo de la radiación solar, como la liberación de aerosoles estratosféricos y el blanqueamiento de nubes, hasta que todos los riesgos e impactos hayan sido evaluados a profundidad.
Organizaciones de la sociedad civil reunidas esta semana en Nagoya exigen a los gobiernos de 193 países que ratifiquen la propuesta de moratoria y pongan esos experimentos en espera. El informe del Grupo ETC, de 52 páginas, Geopiracy – The Case Against Geoengineering (Geopiratería: los argumentos contra la geoingeniería), demuestra la necesidad de una moratoria, y argumenta que la geoingeniería es “una estrategia política para que los países industrializados se liberen de la responsabilidad de su deuda climática.” El texto, próximamente en castellano, puede descargarse en: http://www.etcgroup.org/en/node/5217
Las naciones, confrontadas por alarma creciente sobre el caos climático, tienen la opción de adoptar políticas socialmente responsables para cortar drásticamente el uso de combustibles fósiles en vez de buscar soluciones mágicas. El nuevo informe del Grupo ETC presenta resúmenes de las diversas propuestas de geoingeniería y detalla cómo pueden afectar la biodiversidad y las soluciones verdaderas para enfrentar el cambio climático.
“Los científicos pueden hacer investigación con proyecciones de computadora y en laboratorios, pero no tienen el derecho a experimentar directamente con la Madre Tierra, sin discusión previa entre gobiernos, sin acuerdos que incluyan la participación de la gente que será directamente afectada”. Dijo Neth Dano, responsable de programas del Grupo ETC en Filipinas.
“La geoingeniería va contra la precaución”, argumenta el informe. “Incluso quienes quieren invertir en grande en ese campo reconocen que no se sabe lo suficiente sobre los sistemas de la Tierra como para tomar el riesgo de experimentar la geoingeniería en el mundo real.”
Un mensaje clave del informe es que la geoingeniería no es simplemente un remedio técnico de bajo costo para el cambio climático, sino una cortina de humo política impuesta por las naciones ricas en vez de responsabilizarse de su reducción de emisiones y de sus compromisos para auxiliar al Sur global a enfrentar la inminente catástrofe climática. El informe pregunta: ¿Quién tendrá el derecho de regular el termostato planetario?
En la investigación del Grupo ETC también se denuncia que varias tratados internacionales podrían ser violados si la geoingeniería se pone en marcha, por ejemplo el Convenio sobre Diversidad Biológica, la Convención sobre la Prohibición de Utilizar Técnicas de Modificación Ambiental (ENMOD), el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y la Declaración Internacional sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
Tom Goldtooth, Director de la red indígena Indigenous Environmental Network con sede en Estados Unidos, afirmó: “Este peligroso tipo de experimentos, promovidos por un pequeño grupo de científicos y ricos países industriales, son una continuación de la pesadilla tecnológica que se nos ha impuesto por cinco siglos. Al contrario de resolver los problemas, la geoingeniería amenaza con descontrolar totalmente nuestra biosfera y nuestras comunidades. Necesitamos detenerla.”
El informe Geopiracy – The Case Against Geoengineering, estará disponible en www.etcgroup.org, y será discutido en un evento en Nagoya este martes 19 de octubre (1:15 pm, Salón 234C, Edif. 2, 3er piso). Un documento de contexto puede verse en http://www.etcgroup.org/es/node/5204