¿Cómo prevenir y tratar las picaduras de insectos sin tener que utilizar sustancias químicas peligrosas?

Las terapias frías o calientes pueden eliminar la comezón causada por una picadura de insecto

Usar terapias frías o calientes es otra opción que puede ayudar a aliviar las molestias relacionadas con las picaduras de insectos. Por ejemplo, un artículo publicado en el Scientific American9 recomienda utilizar una bolsa de hielo para tratar las picaduras dolorosas en lugar de analgésicos. El artículo también explica por qué los esteroides tópicos comunes como la hidrocortisona no siempre son la respuesta- una de las razones es porque no debe ponerla sobre la piel lesionada.

De acuerdo con un artículo publicado en el Drug and Therapeutics Bulletin10 el año pasado, también existe poca evidencia que respalde la eficacia de los preparados comerciales para las picaduras de insectos, incluyendo a los antihistamínicos y los corticoides tópicos. Los autores concluyeron que el mejor curso de acción para las reacciones locales es simplemente limpiar el área afectada y aplicar compresas frías.

Alternativamente, aplicar compresas calientes directamente a la picadura, también parece aliviar la comezón. Una forma simple de hacerlo es calentando una cuchara y colocándola directamente en el área, como lo demostró Lifehacker.com11. Sólo ponga la cuchara en agua caliente durante un minuto para calentar el metal, después presione contra la picadura por un par de minutos. Naturalmente, debe asegurarse que la cuchara no esté demasiado caliente.

No debe estar tan caliente porque puede lastimarse, así que por favor use el sentido común y asegúrese de probarla en su propia piel antes de colocar el utensilio caliente en la piel de un niño. Los receptores que responden al calor son los mismos que responden al frío, así que probablemente logre los mismos beneficios metiendo una cuchara de metal en el congelador o simplemente frotando unos cubos de hielo sobre la picadura. También se ha descubierto que cubrir la picadura con cinta ayuda a reducir la comezón.

Una versión de alta tecnología de una cuchara calentada es el Therapik- una varita de mano que proporciona calor y que sirve específicamente para tratar las molestias causadas por las picaduras de mosquitos, abejas, avispas, avispones, moscas negras, hormigas, pulgas, garrapatas, niguas, así como de medusas y ortigas. Gizmodo12 la probó y determinó que funciona como se anuncia dándole cuatro de cinco estrellas:

“Pone la punta del Therapik sobre la picadura, después presiona y mantiene el botón apretado. La punta utiliza luz para calentar la mordedura. Lo mantiene ahí todo lo que aguante, más de un minuto. La sensación de ardor se vuelve más intensa después de los 30 segundos más o menos… ¡Realmente funciona!

Las picaduras de mosquito (con lo único que la probamos) dejo de dar comezón pocos segundos después de quitarla y en la mayoría de los casos no volvió a dar comezón. Estamos oficialmente asombrados…Se baja en el principio de que el veneno de la mayoría de los insectos es termolábil (sensible al calor). Therapik afirma ofrecer “calor a la temperatura necesaria para desactivar el veneno de más de 20,000 especies diferentes de insectos y criaturas marinas.”

Un estudio alemán13 publicado en 2011 confirma la hipótesis de esa afirmación. Probando otro dispositivo médico llamado Bite Away, concluyendo que:

“Administrando calor localmente conduce a la mejora rápida de los síntomas (hinchazón, prurito y dolor). Por lo general, los síntomas desaparecen 10 minutos después de la administración. La reducción del dolor es el efecto dominante.”