Carnaval en defensa del maíz criollo

Hoy, por ejemplo, organizaciones de la sociedad civil, jóvenes de colectivos, organizaciones campesinas, de derechos humanos, de productores, ambientalistas, así como ciudadanas y ciudadanos preocupados por la situación del campo, del maíz y la alimentación, salen a la calle para mostrar su creatividad y exigir sus derechos. Realizan un carnaval dedicado a la defensa del maíz criollo. Este acto, que se suma a cientos de acciones contra Monsanto a nivel mundial, se desarrollará en el centro de la Ciudad de México y en otras ciudades del país. Todas ellas como muestra de la total desaprobación hacia lo que esta corporación, junto con otras, como Pioneer y AgroSciences pretenden hacer con nuestro planeta.

El Carnaval del Maíz es un signo de esperanza. Es expresión de la cooperación y la unión diversa entre personas que creemos que la justicia está en el comer sano, en el maíz libre de transgénicos y en el respeto a la tierra. El carnaval es una práctica que se realiza en las comunidades, por lo general, en el tiempo de cuaresma, que interpela a los grupos de poder y a las instituciones que regulan la vida de los seres humanos.

En el Carnaval del Maíz se interpela al Estado y a los grandes capitales. Precisamente ahí surge la resistencia. Entre las risas y el baile florece la defensa de los derechos humanos, que también es alegre y esperanzadora para las personas y los pueblos. El Carnaval del Maíz es un ágape donde se intercambia experiencia y vida. Donde personas hermanadas alimentamos nuestra lucha por la búsqueda de un mundo más solidario y justo. La lucha contra Monsanto es a nivel planetario. Por ello es un grito de todos los pueblos para transformar una civilización enferma, y que enferma a todos los habitantes del mundo.