Cambio en las Pampas: La Agricultura Industrial llega a Argentina

El sector agrícola que está emergiendo tiene menos, más grandes y más granjas industriales. Depende más que nunca de importaciones de plaguicidas. Y la calidad de su famosa carne se ofrece a cambio de producción barata. Es una tendencia que será difícil de revertir. La ganadería necesita de tal inversión inicial que una vez que un agricultor vende su rebaño, es difícil que lo vuelva a recuperar. Históricamente, los argentinos han tratado al ganado como andantes cuentas bancarias,  después de todo, la palabra ganadería tiene las mismas raíces que el  verbo “ganar”. Para los agricultores como Max Van Tuyll, el banco quebró. Ahora depende totalmente de la volatilidad de los precios internacionales de la soja y otros cultivos. Aunque los precios son ahora más altos que a principios de esta década, la recesión mundial ha puesto de manifiesto el grado de volatilidad del mercado y lo peligroso que es depender de sólo un par de cultivos. El nuevo modelo pampeano está construido sobre precios altos. Cuando el próximo auge y caída lleguen, Max y todos los agricultores de toda la región ya no tendrán ganado.

“Hay un viejo adagio argentino”, me dijo más tarde por teléfono. “Una vez que el ultimo ganado deje la granja simplemente no regresará.”