¿Beber Soda de Dieta le Ayuda a Perder de Peso?

Por el Dr. Mercola, 5 de agosto de 2014

¿Cree usted que el beber soda de dieta le permitirá “comer pastel” mientras sigue manteniendo su peso, o incluso eliminar algunas libras? Esto es sin duda lo que la industria de sodas quiere que crea.

El año pasado, la compañía Coca-Cola lanzó una campaña publicitaria animando a la gente a unirse a la lucha contra la obesidad. Los anuncios fueron razón de crítica por parte de los consumidores, los defensores de los consumidores, y los expertos en obesidad1, 2 por igual.

La mayoría de las personas vieron la campaña como un esfuerzo de control de daños, teniendo en cuenta la abrumadora evidencia que vincula el consumo de soda con la obesidad.

Poco después, Coca-Cola Co. lanzó otra campaña publicitaria, esta vez asegurando que las bebidas de dieta que contienen el endulzante artificial aspartame son una alternativa segura a la soda regular.3

Ahora, la industria de las sodas ha llevado su propaganda al siguiente nivel al publicar un estudio para confirmar lo que la industria ha estado diciendo durante todo el tiempo-que beber soda de dieta le ayudará a perder peso.4, 5

En realidad, el ensayo financiado por la industria afirma que las personas que beben sodas de dieta pierden peso más rápido que los que no beben soda en lo absoluto. Están intentando todo lo que sea posible. Como se informó por Time Magazine:6

“El pequeño estudio, financiado en parte por la American Beverage Association, dividió a 300 bebedores de soda de dieta en dos grupos. A un grupo se le permitió beber toda la soda que quisiera, mientras que el otro se le eliminó por completo.

El estudio encontró que los bebedores, con entrenamiento intensivo, perdieron un promedio de 13 libras en 12 semanas, mientras que los que no tomaron, con el mismo entrenamiento, perdieron sólo 9 libras…

“La explicación más probable fue que el acceso a las bebidas con sabor dulce ayudo al grupo que bebió bebidas endulzadas artificialmente adherirse mejor al programa de cambio de comportamiento,” concluyó el autor del estudio Dr. Jim Hill…”

Financiación de la Investigación—Las Mejores Relaciones Públicas que el Dinero Puede Comprar

Este estudio fue publicado “justo a tiempo” para rescatar la rápida disminución de las ventas de la industria de sodas.

La creciente conciencia de los peligros para la salud asociados con la soda, tanto regular como de dieta, ha provocado una caída libre7 de las ventas. Las ventas de bebidas carbonatadas en general cayeron un tres por ciento en el 2013, mientras que Coca diet y Pepsi diet ambos disminuyeron casi un siete por ciento.8

La investigadora de la Universidad de Purdue Susie Swithers9 ha criticado fuertemente el estudio presentado, diciendo que es “fatalmente defectuoso y que no tiene respaldo absoluto de la ciencia.”

Por ejemplo, que no contiene ninguna información sobre que bebidas regulares en realidad tomaron los consumidores. Mientras que el agua se sugirió como la bebida ideal, en realidad ¿tomaron agua, o la compensaron con jugos de frutas y soda regular?

La propia investigación de Susie Swithers demuestra que las bebidas de dieta promueven los problemas del corazón, y que los animales alimentados con endulzantes artificiales desarrollan una respuesta metabólica alterada al azúcar real. A principios de este año, ella le dijo MedicineNet.com:10

“[Al igual que los diabéticos], esas personas se hacen hiperglucemicas. Sus niveles de azúcar suben más alto de lo que deberían. Ellos también hacen menos de una proteína protectora del corazón. Si beber soda de dieta interfiere con este sistema, entonces, a largo plazo está eliminando algo que protege su salud cardiovascular, y eso podría ser lo que está contribuyendo a estos efectos.”

Por otra parte, con tanta evidencia en contra de la seguridad y la eficacia de las sodas de dieta, ya sea para bajar de peso o cualquier otra prevención de enfermedades, el estudio financiado por la industria en realidad no ofrece evidencia científica relevante en lo que podría inclinar la balanza a favor de las sodas de dieta.

Como lo señala Swithers, “este trabajo no nos dice nada sobre las consecuencias para la salud a largo plazo, lo cual debería ser nuestro enfoque real.”