15 Recetas Sanas de Halloween. Parte II

6.      Pepitas

Luego de retirar la pulpa y las semillas a tus calabazas, no dejes que se desperdicien, conviértelas en una deliciosa botana.

Son ricas en fibra, proteína, hierro, cobre, magnesio, manganeso y fósforo así como en vitaminas B y E.

Ingredientes

1 ½ taza de semillas de calabaza

2 cucharadas de aceite de oliva

Sal marina

Especias, para dar sabor (opcional)

Preparación

Precalienta el horno a 300 grados Farenheit.

Retira las semillas de la calabaza y enjuágalas con un colador. Quita la pulpa o fibra de las semillas, enjuágalas de nuevo y deja secar las semillas.

Coloca las semillas de calabaza en un recipiente con aceite de oliva, sal y cualquier condimento opcional.

Extiende las semillas de calabaza en una capa sobre un molde y hornéalas durante 40 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que estén cafés doradas y crujientes.

7.    Papas veganas

Los vegetales saben mejor cuando están crujientes, por lo que en todo el país han aparecido bolsas de papitas veganas: con dulce, frijoles verdes, chirivía,  taro y más. Sin embargo, estos antojitos producidos comercialmente, por lo general contienen grandes cantidades de sal y preservativos, por lo que cuentan con muy poco valor nutricional.

Has tus propias papas veganas para controlar sal, aceite y el método de cocina. Cocina las siguientes recetas para botanas vegetales horneadas y crujientes que  tu familia amará.

Papas crujientes

Las papas crujientes cuentan con una larga historia larga en la mesa estadounidense, junto con las hamburguesas, dips de cebolla y sándwiches deli. Haz las tuyas con cualquier variedad de papas, como la Yukon dorada. Límpialas tallándolas, déjales la cáscara y rebánalas lo más delgadas posibles – asegurándote de que todas las rebanadas tengan el mismo grueso.

Enjuaga y remoja las rebanadas en agua durante una hora, después sécalas cuidadosamente. Tradicionalmente, las papas crujientes son freídas en aceite vegetal, pero las puedes hornear para obtener una versión más sana: Simplemente pon una cucharada de aceite por papa, rocíalas con sal y pimienta y después hornéalas a 204 grados Celsius, hasta que tomen un color café dorado, luego de unos 15 minutos. Esta receta también funciona con papas dulces; pruébalas con una mezcla de polvo piquín y comino para una botana picante.

Papitas de betabel

El bonito color rosa fucsia de los betabeles frescos se convierte en un intenso púrpura, cuando las papitas de betabel son horneadas. Corta dos betabeles grandes en rebanadas de 3 cm de grosor, ponlas en una bandeja engrasada para hornear. Pinta los betabeles con una capa ligera de aceite de oliva y hornéalos a 162 grados centígrados por 45 minutos.

Papitas de zanahoria

Las zanahorias crujientes intensifican su sabor al ser horneadas como botanas naranjas crujientes. Rebana dos zanahorias grandes en rebanadas delgadas, después ponlas en una bolsa o en un bowl y ponles 2 cucharadas de aceite de oliva y rocíales sal marina. Acomoda las rebanadas en una bandeja para hornear engrasada y cocina por 35 minutos a 135 grados centígrados, revisando casi al final para asegurarte de que no se quemen.

Papitas de coliflor

¿No te has enterado? La coliflor es la nueva carne. Prueba la tuya en forma de papitas crujientes y descubre un mundo nuevo. Primero, consigue una coliflor fresca,  lávala y sécala cuidadosamente. Retira las ramas duras y córtala en pequeños pedazos. En un recipiente grande, añade las hojas de coliflor más 3 gajos de ajo finamente picados y 2 cucharadas de aceite de oliva. Vierte esta mezcla sobre las hojas y coloca la coliflor en una bandeja para hornear engrasada. Hornea por 30 minutos a 135 grados centígrados, hasta que las hojas estén frágiles y crujientes al tacto. Añade sal y pimienta.