Sólo las y los campesinos son capaces de alimentar a la humanidad con alimentos sanos y una producción agroecológica

La coexistencia es una falsa idea. Se tienen estudios con el algodón, el único cultivo transgénico liberado ampliamente en el norte del país, que muestra como los transgenes han llegado a parientes silvestres en el sur del país. Finalizó señalando que “Es fundamental que las instancias gubernamentales, cuya responsabilidad es la bioseguridad se dediquen a ello, en lugar de promover los transgénicos o ideas erróneas como la coexistencia”.

Don Evaristo Polo, de la organización Unidad Indígena Totonaca y Nahua (UNITONA) denunció la amplia difusión de semillas híbridas de empresas trasnacionales en regiones de temporal en donde las semillas híbridas tiene pocas posibilidades de tener éxito y de adaptarse a las condiciones ambientales. La Cruzada contra el hambre esta trabajando para cambiar las costumbres de las regiones con alimentos extraños, con comedores que introducen alimentos del exterior y con la introducción de semillas ajenas que son de empresas trasnacionales. “Quieren que dejemos de comer nuestros alimentos y de usar nuestras semillas para hacernos dependientes de las empresas”. Señaló.

Si adoptamos estas semillas en unos cuantos ciclos perderemos nuestras semillas. Por eso es urgente que retomemos el control de nuestras semillas y de nuestra alimentación.

Finalmente, Carmen Patricio de la Red Tsiri de Michoacán mencionó como en nuestro alimento básico que son las tortillas hemos sufrido un grave atentado pues la calidad de este producto ha ido a la baja en los últimos años. Por eso ella con un grupo de mujeres han logrado un proceso exitoso que parte por conservar las semillas criollas para producir las diferentes razas de maíz que hay en la cuenca del lago de Pátzcuaro y Zirahuen entre ellas el maíz azul para producir además de tortillas los diferentes alimentos como gorditas, atole, corundas, etc., de gran calidad que venden con mucho éxito como un producto sano.

Para ellas es muy importante la revaloración de la producción campesina y que los consumidores se involucren y conozcan las amplias posibilidades de producir alimentos sanos y de calidad desde el campo. En su caso han integrado a cerca de 20 mujeres que reciben un precio justo por su trabajo y que utilizan el producto del trabajo de los campesinos. El maíz azul que utilizan es reconocido por sus características nutricionales.

Carmen Patricio afirmó “Sólo la agricultura campesina podrá darnos de comer a los mexicanos con alimentos sanos y suficientes”.