No corresponde a Semarnat ni a Conafor impulsar el cultivo agroindustrial: CCMSS

abonos verdesEn tres años han sido sembradas 3 mil hectáreas de jatropha para elaborar biodiesel

El actual esquema de plantaciones sólo beneficia a empresas extranjeras, señala análisis

Por Angélica Enciso, La Jornada, 09 de julio de 2012

La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Comisión Nacional Forestal (Conafor) asumieron un papel que no les corresponde en el impulso al cultivo de jatropha o piñón de aceite que se usa para la elaboración de biodiesel, advierte el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible (CCMSS).

El actual esquema de plantaciones agroindustriales beneficia a vendedores de semillas, empresas extranjeras, intermediarios entre los productores y las fábricas de biodiesel, compañías de agroquímicos y tal vez a algunos productores, pero es posible que la mayoría de los que se dediquen a esta siembra no mejoren su condición de vida o permanezcan en la pobreza, advierte.

Detalla que la Conafor incluyó a partir de 2009 en las reglas de operación de ProArbol el cultivo de jatropha, y que en tres años se han sembrado alrededor de 3 mil hectáreas. Hay estimaciones que dan un potencial de 10 mil hectáreas para la siembra de esta planta, indica la organización en el análisis El error gubernamental de las plantaciones para biocombustibles.

Puntualiza que en México existen diversos instrumentos jurídicos y regulatorios que definen las atribuciones de las dependencias involucradas en temas de bioenergía. En el caso de la Semarnat y la Conafor, se encontró que dejan de lado las tareas que les fueron encomendadas; deberían asegurar que el cultivo de los bioenergéticos se realice de manera sustentable y sin perjuicio alguno para la integridad de los ecosistemas forestales. En lugar de esto, dispusieron recursos económicos para impulsar la producción de materias primas para bioenergéticos, actividad que recae en la Secretaría de Agricultura, señala.

El CCMSS sostiene que la presión para encontrar energéticos alternativos lleva a muchos gobernantes a tomar decisiones precipitadas, sin visión de largo plazo, sin considerar los riesgos, y sin la información científica y tecnológica necesaria para garantizar cultivos sustentables de jatropha y palma africana. Es necesario detener el desarrollo de la fiebre de las plantaciones agroindustriales y desarrollar modelos que consideren las consecuencias ambientales y sociales.

Considera que la producción de bioenergéticos debe garantizar que no se devasten los bosques para establecer estos cultivos. Si existe deforestación para generar nuevas plantaciones de cultivos energéticos, se perderá la capacidad que tienen para reducir dichas emisiones y el resultado final en emisiones podría ser peor que el uso de combustibles fósiles. De no tomar acciones para proteger la biodiversidad y las tierras agrícolas, y dirigir a los biocombustibles hacia la sustentabilidad, los daños sociales y ambientales podrían sobrepasar los beneficios esperados.

Detalla que ProArbol tiene entre sus objetivos disminuir los índices de pobreza y marginación en las áreas forestales con la inducción a un manejo y uso adecuado de los recursos; impulsa la planeación y organización forestal, e incrementar la producción y productividad de los recursos forestales, su conservación y restauración.