Los beneficios a la salud de la sandía: más que sólo un gusto veraniego

Por Lacy Boffgs Renner, Organica Authority, 6 de julio de 201, Traducido por Mariana Escalante, Vía Orgánica A.C.

Si creciste disfrutando de la sandía como una fruta veraniega sabrosa, puede que también hayas crecido con la noción de que sólo es agua de sabor – inofensiva, pero no particularmente sana. ¡Pues piénsalo de nuevo! Este elemento básico veraniego es también una poderosa fuente nutricional. Los beneficios a la salud de la sandía te pueden sorprender.

Se ha descubierto que la sandía es uno de los alimentos más densos en nutrientes comúnmente consumidos por los estadounidenses (significando que tiene más nutrición por caloría). La sandía es mayoritariamente agua, así que también es muy baja en calorías, pero es muy alta en vitamina C, beta caroteno, licopeno y vitamina A – todos antioxidantes importantes que se ha mostrado en estudios clínicos que ayudan en la lucha contra el cáncer.

Algo un poco más sorprendente es que los beneficios para la salud de la sandía también incluyen altos niveles de vitaminas B, particularmente B1 y B6, que ayudan a mantener a los electrolitos en balance y ayuda a las células a convertir el alimento en energía respectivamente. Las sandías también contienen mucho potasio y magnesio, ambos esenciales para las funciones corporales. Entre las vitaminas B y los minerales esenciales, la sandía es una gran manera de mantenerte bien hidratado en el verano.

Encontrar sandías orgánicas puede ser un reto (y también pueden ser muy caras cuando por fin las encuentras), pero por suerte, las sandías han sido consistentemente parte de la lista de los “15 limpios” del Grupo de Trabajo Ambiental, lista de las 15 frutas y vegetales menos contaminados.

Interesantemente, un estudio del 2006 por el Departamento de Agricultura de los E.U.A. encontró que la sandía conservada a temperatura ambiente proveía significativamente más nutrición que la sandía guardada en el refrigerador. De hecho, tenían más valor nutricional cuando se conservaban a temperatura ambiente, que hasta cuando eran recién cosechadas. Además, la fruta duraba más – hasta 21 días – cuando se guarda a 55 grados que es lo opuesto a los 40 grados estándar de un refrigerador.

La sandía va bien con platillos dulces o sabrosos. Sírvela en una ensalada de fruta, como parte de un jugo o coctel, o mézclala con albahaca dulce tailandesa y queso feta para una ensalada dulce/sabrosa.