La dieta mediterránea es mejor para el corazón que hacer deporte

Por Es.Tendencias, marzo de 2015

Para cuidar nuestra salud, no hay más secreto que abandonar hábitos nocivos, descansar, comer mejor y hacer ejercicio. Pero no todas las dietas sirven por igual ni todos el deporte. Lo más recomendable es hacer una dieta equilibrada y entrenar de forma moderada.

Y dentro de los planes de alimentación, parece que la mejor opción es la dieta mediterránea. Así lo ha demostrado un estudio que asegura que los que la siguen tienen un 47% menos de posibilidades de sufrir problemas cardíacos.

Y no solo eso. El mismo trabajo defiende que ese tipo de alimentación es más beneficiosa e influye más sobre nuestra salud cardiovascular que el propio ejercicio físico.

Las conclusiones de la investigación, que duró 11 años, fueron presentadas en la pasada reunión de la American College of Cardiology . En ella se observaron los hábitos alimenticios, de estilo de vida y de salud de 2.500 griegos desde el año 2001 hasta el 2012.

La adherencia de los participantes a la dieta se midió en una escala de 1 al 55, donde 1 significaba que no comían verdura, pescado y legumbres, y 55, que la seguían por completo.

Las conclusiones fueron claras: los puntuaban en el tercio superior de la escala tenían un 47% menos de problemas cardiacos que los que se encontraban en el tercio más bajo. Y no solo eso: la dieta parecía ser el factor decisivo para que la probabilidad de sufrir esto problemas bajara, más que hacer deporte.

Ekavi Georgousopoulou, investigador de la Universidad de Harokopio (Atenas, Grecia) y uno de los autores del trabajo, asegura en una nota de prensa que “Nuestro estudio muestra que la dieta mediterránea es beneficiosa a todas las edades y géneros, y también para personas sanas o para aquellos que estén enfermos”.

Pero no solo a la hora de prevenir, también sirve para sanar. “Observamos mejoras en aquellos sujetos que puntuaron alto en la escala de adherencia y que tenían problemas de corazón, diabetes, hipertensión o inflamaciones”.

La dieta mediterránea de la que habla el estudio es básicamente la que seguimos en España. Aceite de oliva, pocos lácteos, mucha verdura y legumbres, pasta, huevos, cereales integrales, pescado y carne, preferiblemente de aves de corral.