Grandes desastres ambientales

Por Reforma, septiembre de 2014

A lo largo del año, distintas catástrofes medioambientales han ocurrido en el País; sin embargo, los cuerpos de agua federales han sido los más afectados.

Ríos y arroyos en Sonora, Durango, Nuevo León y Veracruz, principalmente,  experimentaron emergencias ambientales el pasado mes de agosto, originadas por vertidos de distintos tóxicos, cuya consecuencia ha resultado en pérdidas millonarias y emergencias para el ecosistema.

Derrame tóxico en el río Sonora y el bacanuchi

Cuarenta mil metros cúbicos de sulfato de cobre acidulado fueron vertidos en los ríos Sonora y Bacanuchi, así como en el arroyo Tinajas, el pasado 6 de agosto. Lo anterior se debió a que la mina Buenavista del Cobre, en Cananea, Sonora, sufrió un derrame.

Grupo México, empresa minera explotadora, dio el aviso tardío a las autoridades del incidente. A la fecha, se han presentado dos recursos legales en su contra.

El uso del agua fue restringido por la presencia de altas concentraciones de metales pesados dañinos para la salud, y los pobladores de la región reportaron afectaciones y muerte de peces.

Greenpeace México calificó el incidente como el peor desastre ambiental en el Estado, mientras que Juan José Guerra Abud, Secretario de Medio Ambiente, señaló que éste sería el peor desastre ambiental de la industria minera del País.

Autoridades ambientales y de Protección Civil tardaron cinco días en alertar a la población sobre el derrame de contaminantes en el Río Sonora.

 Vertido de agua con cianuro en el arroyo la cruz

En el Municipio de El Oro, en Durango, 2 mil metros cúbicos de solución cianurada de la mina Proyecto Magistral fueron vertidos como consecuencia de las fuertes lluvias registradas en el Estado.

El arroyo La Cruz resultó afectado y debido a que está conectado con El Magistral, 400 metros cuadrados de suelo natural se vieron perjudicados.

Lo anterior ocurrió el pasado 13 de agosto, y, a decir de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), ya se restablecieron las condiciones del cauce, en las que no han encontrado evidencias de algún problema mayor.

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) estableció cinco recomendaciones a la empresa respecto a la seguridad de la presa de jales e inició un procedimiento administrativo contra ella.

Un derrame de 2 mil metros cúbicos de solución cianurada se registró en la mina denominada Proyecto Magistral, en el Municipio de El Oro, en Durango.

Derrame de petróleo en el río san juan

Por la fuga ocasionada por una toma clandestina, cerca de 4 mil barriles de crudo fueron vertidos en cuerpos de agua en Nuevo León el pasado 16 de agosto.

El percance ocurrió en la línea 2 del oleoducto Madero-Cadereyta, en el Municipio de González, con lo que se afectaron 11.5 kilómetros de la acequia Toma de Agua Santa Isabel y 6.5 kilómetros del río San Juan.

Dentro de las tareas que han realizado para la recuperación de la zona por parte de Petróleos Mexicanos se encuentran la colocación de barreras oleofílicas (idóneas para absorber el aceite) y barreras marinas, que facilitan su contención al frenar el avance del hidrocarburo.

Aún no se da a conocer si se procederá con alguna denuncia penal.

Alrededor de 4 mil barriles de petróleo se derramaron en Río San Juan por una fuga derivada de una toma clandestina.

 Arroyo hondo y laguna maría lizamba

Otra toma clandestina a un ducto de Petróleos Mexicanos en Veracruz ocasionó un vertido de gasolina.

Lo anterior se suscitó el pasado 1 de septiembre después de que el crudo se vertiera en 20 kilómetros a lo largo del arroyo Hondo y la laguna María Kizamba, en Veracruz.

Peces, tortugas de la especie tres lomos y distintas aves han resultado los más afectados al presentar altos índices de mortandad.

Según estimaciones, la fuga del combustible duró al menos 16 horas.

Aunque la mayoría del hidrocarburo se concentró en las barreras oleofílicas, los trabajos de recuperación del área continúan.

Ni la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ni la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) se han pronunciado.

La fuga de gasolina, derivada de una toma clandestina, contaminó a lo largo de 20 kilómetros del arroyo Hondo y la Laguna María Lizamba, en Veracruz.

Desastres bajo la lupa