Cómo Revertir la Diabetes Tipo 2, Por Qué la Insulina Podría Acelerar la Muerte, y Otros Aspectos Ignorados

Como lo dijo el Dr. Rosedale anteriormente: “La diabetes tipo 2 es causada por tener constantemente un exceso circulante de insulina y leptina, derivado por la misma alimentación que ha sido recomendada para el tratamiento de la diabetes y la enfermedad cardiaca, que es una alimentación baja en grasas y alta en carbohidratos. Después, al darle más insulina a estos diabéticos es como echarle gasolina al fuego. “Los médicos no podrían hacer más daño si intentaran.”

Leptina – Un Factor Calve Frecuentemente Ignorado en el Desarrollo de la Diabetes Tipo 2

Mientras que la mayoría de los consejos convencionales se centran en la insulina, la leptina es otra hormona que juega un papel integral en el desarrollo de la diabetes tipo 2. La leptina es producida en la grasa y otras células, y una de sus funciones principales es regular su apetito y el peso corporal. La leptina le dice al cerebro cuándo comer, cuánto comer, y lo más importante, cuándo dejar de comer. La leptina también le dice a su cerebro que hacer con la energía disponible.

Ahora recuerde, cuando su nivel de azúcar en la sangre se eleva, se libera insulina enviando la energía adicional al almacenamiento – la mayoría se almacena en forma de grasa y la leptina se produce en esas células de grasa, entre más grasa más leptina. Además, a medida que el azúcar se metaboliza en las células de grasa, las emisiones de grasa aumentan repentinamente en leptina. Es por ello que generalmente hablo de la resistencia a la insulina y a la leptina, ya que trabajan en conjunto. Por otra parte, la leptina es en gran parte responsable de la exactitud de señalización de la insulina ya sea que desarrolle o no resistencia a la insulina. Si es resistente a la insulina, es más probable que también sea resistente a la leptina, especialmente si usted tiene sobrepeso u obesidad.

¿Por qué?

Porque cuando se desarrolla resistencia a la leptina, su cerebro ya no puede oír las señales de la leptina, lo que causa hambre crónica, comer en exceso, incapacidad para quemar adecuadamente la grasa y, por lo general, obesidad. La resistencia a la insulina, y finalmente, diabetes tipo 2 concuerdan. Al igual que con la insulina, la única forma conocida para restablecer la señalización de la leptina es mediante una buena alimentación. El alto consumo de carbohidratos, sobre todo fructosa, es el principal culpable y la causa arraigada de la resistencia a la leptina. La falta de ejercicio y la flora intestinal anormal también contribuyen y/o exacerban la resistencia a la leptina e insulina.

La importancia de leptina en el control de la glucosa en la sangre y la diabetes es poderosamente ilustrada por estudios recientes que muestran su capacidad, incluso en dosis bajas, para disminuir la glucosa en sangre tanto en las personas con diabetes tipo 1 como tipo 2, y este es un nuevo tratamiento potencial fascinante.

Deficiencia de Magnesio – Otro Factor que Aumenta el Riesgo de Resistencia a la Insulina y la Diabetes tipo 2

La deficiencia de magnesio es también digno de mención, mientras que todavía está sujeto a ser una causa fundamental de la diabetes tipo 2. El magnesio realmente juega un papel importante en la homeostasis de la glucosa y la insulina,16 y la deficiencia de magnesio esta esparcida en estos días. También se requiere de magnesio para activar la tirosina quinasa, una enzima que funciona como un interruptor en muchas funciones celulares y es necesario para el correcto funcionamiento de los receptores de insulina.

Es bien sabido que las personas con resistencia a la insulina también experimentan aumento de la excreción de magnesio en la orina, lo que contribuye aún más a la disminución de los niveles de magnesio. Esta pérdida de magnesio parece ser secundaria a un aumento de glucosa en la orina, lo que aumenta la producción de orina.17 Por lo tanto, el consumo inadecuado de magnesio parece provocar un círculo vicioso de bajo nivel de magnesio, resistencia a la insulina, niveles elevados de insulina y glucosa, y exceso de la excreción de magnesio. En otras palabras, entre menos magnesio tenga su cuerpo, menos probabilidades tendrá para retenerlo.18