Aceites Esenciales Que Refuerzan el Bienestar Físico y Emocional

¿Por qué el olor a pescado en la playa hace sentir nauseas a algunas personas mientras que en otras causa sentimientos de sociabilidad y alegría? Estas variaciones en las respuestas a los olores están relacionadas con unas vías cerebrales especiales de su sistema olfativo. La información olfativa se almacena o codifica con todo tipo de recuerdos y asociaciones en su cerebro. Los sustratos neurológicos del olfato están especialmente adaptados para el aprendizaje asociativo (en su hipocampo) y procesamiento emocional (en su amígdala).11

Kate Fox explica esto en “The Smell Report”:12

“Nuestros receptores olfativos están directamente conectados con el sistema límbico, la parte más antigua y primitiva del cerebro, que se cree es la base de las emociones. Las sensaciones olfativas se transmiten a la corteza, en donde ocurre el reconocimiento “cognitivo,” poco después de que las partes más profundas de su cerebro han sido estimuladas. Por lo tanto, para cuando nombramos correctamente el nombre de una esencia en particular como, por ejemplo, “vainilla,” la esencia ya activó el sistema límbico, desencadenando respuestas emocionales más profundas.”

Un gran número de estudios han demostrado que el aprendizaje de olores comienza antes de nacer. Un feto detecta los compuestos de un sabor/olor en su líquido amniótico, de la alimentación de su madre. En los estudios en los que se monitoreó el consumo de la madre de sustancias de olores distintivos como el ajo, alcohol o humo de cigarro durante el embarazo, se encontró que los bebés preferían estas esencias más en comparación con otros bebés que no habían sido expuestos a ellas.13 Después de nacer, los bebés localizan los pezones de sus madres por el olor. La lactancia materna también influye en las preferencias olfativas, los bebés relacionarán los olores de la lactancia con apego materno y comodidad en los brazos de su madre.

De acuerdo con un estudio14 reciente, los bebés incluso pueden oler los temores de sus madres y aprender los peligros del mundo, a tan sólo días después de nacer. Cuando sus madres experimentan estrés, su cuerpo libera un olor que el bebé detecta y al que responde.

Las preferencias olfativas cambian junto con las etapas de desarrollo. Los estudios demuestran que los niños de tres años tienen esencialmente los mismos gustos y disgustos hasta que llegan a la edad adulta. Los niños no desarrollan sensibilidad a ciertos olores sino hasta que llegan a la pubertad. Los investigadores también han encontrado que los receptores olfativos difieren hasta un 30 por ciento entre dos individuos.15 En las pruebas de capacidad de olfato, las mujeres tuvieron puntuaciones más altas que los hombres y esta diferencia de genero aplica incluso en los recién nacidos.16

En resumen, su respuesta a los olores es en gran medida “aprendida” como una función del contexto emocional en el que se experimenta por primera vez y después está relación influye en su estado de ánimo y comportamiento a lo largo de su vida. Naturalmente, también hay diferencias genéticas. ¿A usted le ENCANTA el olor del cilantro- o piensa que huele a jabón? Si respondió la última opción, entonces podría tener una mutación olfativa… literalmente.17

Somos MUCHO Mejores Olfateando que Pensando

Desde la década de 1920, los científicos han creído que la nariz humana era capaz de detectar cerca de 10,000 olores, pero un nuevo estudio publicado en la revista Science demuestra que este estimado se queda muy corto. En el primer estudio empírico que fue realizado, los investigadores de la Universidad Rockefeller descubrieron que la nariz humana puede diferenciar más de un trillón de estímulos olfativos.18 Se cree que la persona que menos olores percibe es capaz de detectar 80 millones de esencias únicas, pero si usted es un súper olfateador, puede llegar a detectar una sorprendente cifra de mil billones de esencias.19

Este descubrimiento comienza a explicar por qué actualmente los estudios están descubriendo que el sistema olfativo de los seres humanos es capaz de detectar factores como el miedo, enojo, edad20 y género.21 Sí, los estudios demuestran que se puede identificar la edad o género de otra persona simplemente por su olor. Una madre puede identificar un bebé sólo por el olor después de cargarlo durante una hora, incluso otros bebés que no son suyos.